Kill This Love •Minsung•

•08•

Minho se sentía como un niño de nuevo. Estar en ese lugar después de tanto tiempo, le provocó algo de nostalgia. Recuerda venir todos los días después de la escuela con su madre, siempre pedían chocolate y fresas, era el favorito de ambos.

Debió de haber sido demasiado expresivo, ya que el de mejillas bonitas le pregunto si se sentía mal o si quería irse.

- No no, estoy bien.- Jisung le sonrió como respuesta causando que el corazón del mayor enloqueciera. Sentía que esa sonrisa se convertiría en su debilidad más grande.- ¿Dónde deberíamos sentarnos?

- Allí.- El menor señaló una de las mesas del fondo, justo a un lado de un ventanal que dejaba ver el hermoso paisaje de afuera.

- Perfecto, yo iré por los helados. ¿De qué sabor quieres?

- Chocolate con fresas!.- Se avergonzó por como salió su voz, parecía un chiquillo emocionado por un dulce. Pero a los ojos del mayor, fue la cosa más tierna del mundo.

- Es mi favorito también.- el chico frente a él tenía un fuerte color rosa en sus mejillas y le entraron unas ganas enormes de estrujarlas pero se contuvo.

- Ten.- decía Han, mientras le entregaba dinero para los helados.

- Ni se te ocurra, yo pago.- el mayor se dió la vuelta y se dirigió a la caja, para ser atendido.

Jisung rodó los ojos y se dispuso a ir a la mesa que habían escogido. Mientras esperaba a Minho, saco su móvil, y le envío un texto a su padre diciéndole que habían hecho una parada para comer algo, y que luego irían a casa, después de eso guardo el móvil. Se dispuso a mirar fijamente al mayor, ya que este estaba distraído. Vaya que era sexy. Tenía sentido, su padre a pesar de su edad, seguía siendo un hombre verdaderamente guapo. Hyunjin siempre decía que si tuviera alguna oportunidad con el señor Lee, no la desaprovecharía. A lo que Woojin le respondía con un golpe en la cabeza.

Perdido en sus pensamientos, no noto cuando Minho se había sentado justo frente a él, con 2 helados exactamente iguales.

- Perdón, estaba algo distraído.

- Tranquilo.- dió una probada a su helado.- ¿Que pensabas?.

Jisung se sonrojo como por milésima vez en el día. ¿Cómo le decía que pensaba en lo buenos que son los genes Lee sin que sonara extraño?.

- ¿Acaso pensabas en mi?.- dijo mientras se colocaba una mano en la barbilla y sonreía sensualmente.

- Ya quisieras.- decía burlonamente Jisung comiendo también de su helado.

Ambos rieron y se quedaron en silencio. Solo viéndose fijamente a los ojos. No era incómodo, ambos trataban de hablarse a través de sus miradas. Querían saber que pasaba por la mente de el otro. Cómo buscando respuestas, pero ¿A qué preguntas?

Jisung fue el primero en apartar la mirada. Sentía un extraño cosquilleo en su estómago, lo que no sabía era que el mayor estaba igual o peor que él, pero era buen actor.

- Dime Jisung.- ¿tienes novia? ¿O algún novio quizás?

- ¿Ah?. - ¿Había escuchado bien? ¿Lee Minho le estaba preguntando eso?
Tenía la boca ligeramente abierta, sorprendido por la pregunta del mayor.

A Lee nunca le había gustado ver que alguien tuviera la boca llena de comida, de hecho le incomodaba un poco. Pero ahí estaba, viendo al chico frente a él con un poco de helado en la comisura del labio, y le parecía la cosa más tierna que había visto en su vida.

- Tienes...algo...en... Agh!.- Se inclinó un poco sobre la mesa, y acerco su mano al rostro del menor lentamente, y con el pulgar quitó los restos de aquel frío dulce, tocando los suaves labios del contrario en el proceso.