» CAPÍTULO TRECE:
' viejo amigo '*:・゚✧
NADA MÁS ESA BRISA salió de mi todo malestar desapareció de mi cuerpo por lo que me levanté asustada, pude escuchar sus quejidos de dolor mientras se levantaban y retrocedí mirando hacia todos lados, hasta chocar con una de las paredes. Miré mis manos confundida y luego miré al team Flash, quienes estaban parados a unos metros de mi mirándome sin expresión alguna, dios qué acabo de hacer.— Perdón, no sé qué pasó .— murmuré algo aturdida por la situación, los lastimé a todos.
— No te preocupes, estamos bien, ¿si? tranquila .— Barry se acercó a mi levantando sus manos pero negué corriéndome hacia un lado.
Los chicos aparecieron en el lugar mirándome asustados y vaya que me había dolido esa mirada, por primera vez desde que estos poderes llegaron a mi vida me miraron con miedo y se sentía horrible. Sin escuchar lo que me decían corrí rápidamente hacia la salida del lugar, escuché pasos detrás de mi, entré a la primera habitación que había en el pasillo, cerré la puerta silenciosamente para no llamar su atención y luego le puse el seguro, estaba en una habitación vacía pero tenía ventanas y eso era lo que necesitaba, las abrí con desesperación al mismo tiempo que escuché como intentaban abrir la puerta, dejé mis poderes fluir y salté por la ventana, viendo los asustados rostros de los demás al verme hacer aquello. Cerré mis ojos con fuerza esperando el impacto el cual nunca llegó, abrí mis ojos y mi rostro se encontraba a metros del suelo, mis poderes me habían salvado de un dolor corporal que duraría días. Moviendo mis manos salí enseguida del lugar al escuchar que me llamaban y pensé en dónde podría ir, si voy a casa los chicos llegarían a los minutos ya que tenemos cámaras, instantáneamente descarté esa idea ya que necesitaba estar sola por un tiempo, así que mi mejor opción fue ir a la playa, antes de llegar dejé mi celular y comunicador sobre el techo de uno de los edificios, sé que los chicos intentarían rastrearme así que si lo hacen llegarán a nada.
(...)
Mis pies eran mojados por las olas que rompían en la arena, lo único que se escuchaba era la marea y unos cuantos pájaros, llevaba un par de horas aquí y no tenía intención de irme, pensé que ya sabía lo necesario de mis poderes, pensé que ya podía controlarlos pero no era así, me cegué con todo esta emoción de ser una justiciera nuevamente y no seguí con los entrenamientos, como debí haberlo hecho desde un principio para evitar este tipo de cosas.
— Hola pequeña Hawk.
Sonreí levemente al escuchar esa voz y levanté la mirada, encontrándome con Oliver parado a mi lado.
— Hola Ollie, no pensé que vendrías, no me contestaste.
Escuché un suspiro de su parte y luego se sentó a mi lado.
— Claro que vendría, con tus mensajes me dejaron en claro que no estabas bien y eso era más que suficiente para venir .— una leve sonrisa se formó en mi rostro al escuchar aquello y abracé mis piernas para luego apoyar mi rostro sobre mis rodillas.
— No estoy bien, si tengo un problema y vaya que es uno grande .— murmuré apretando mis manos, necesitaba decirle a alguien más sobre mis poderes y Ollie era el candidato perfecto.
— Vamos, sabes que puedes confiar en mi y decirme lo que sea, ¿verdad? .— asentí al escucharlo y respiré profundamente, aquí vamos.
— Bueno ehh, ¿recuerdas cuando fue el accidente y estuve en el hospital por unas semanas? .— al verlo asentir continúe.— La cosa es que lo doctores me encontraron en perfectas condiciones y sin rastros de nada, pero eso no era verdad, al estar expuesta a la materia oscura del gran experimento de Wells mi cuerpo sufrió cambios, pero mejor te muestro.
Mantuve mi mirada sobre el durante unos segundos para luego mirar hacia el mar.
Cerré mis ojos sintiendo mis poderes fluir por mi y comencé a mover mis manos, enseguida el sonido del agua moviéndose de manera irregular llegó a mis oídos y pude escuchar la exclamación de asombro del hombre a mi lado. Al ya haber probado lo que necesitaba relajé mis brazos abriendo mis ojos, pero mantuve mi mirada fija al frente, no era lo suficientemente valiente para mirarlo luego de haberle mentido por un año.
— Eres una metahumana y la nueva héroe de la ciudad, pensé que ya no querías tener ese estilo de vida .— noté la sorpresa en su rostro y jugué con mis manos.
— Si, pero nadie sabe además de Liam y Dean, así que por favor no le digas a Felicity, le contaré cuando me sienta lista, ¿si? Sobre lo otro, lo sé, ya no quería tener ese estilo de vida pero no pude resistirme .— hablé con claros nervios, pero me tranquilicé al verlo asentir.
— Rosie, no debes tenerle miedo a estas nuevas habilidades que te han sido otorgadas, es difícil empezar una nueva vida pero no imposible, además, conozco a unas personas que pueden ayudarte .— negué con una ladina sonrisa y me crucé de brazos bajando la mirada.
— Si te refieres al team Flash lo dudo, estuve con ellos hace unas horas y por un descuido los lastimé, además de romper algunas cosas .— arrugué la punta de mi nariz mientras hablaba y escuché su risa por lo que lo miré confundida.
— Los conozco y sé que no dejarán de insistir en ayudarte hasta que aceptes, son casi tan tercos como yo.
Esta vez reí yo y lo empujé levemente.
— Nadie es más terco que tú .— el asintió dándome la razón por lo que los dos sonreímos.
— Prométeme que no los alejarás a todos como yo lo hago, no sigas ese mal ejemplo y deja de culparte, el que siempre se hecha la culpa es Diggle o yo .— una leve mueca se formó en mi rostro al escuchar aquello, no es tan simple como suena.— Si es simple y no, no leí tus pensamientos, te conozco y sé que piensas en eso.
Levanté mis cejas sorprendida, eso si que dió miedo.
— Está bien, lo prometo por la garrita .— levanté mi dedo meñique en su dirección y me miró con una ceja levantada.
Fruncí el ceño sin bajar mi dedo, por lo que bufó rendido y entrelazó su dedo meñique con el mío.
— Yo ya me debo ir antes de que tu hermana comience a hackear las cámaras de todo el mundo para encontrarme .— asentí dándole la razón, ambos nos levantamos y sacudimos la arena de nuestra ropa.
Me acerqué a él y lo rodeé con mis brazos, acto que correspondió, besó mi cien para luego separarse y agarrarme de los hombros.
— Y no te preocupes sobre Roy, estoy seguro de que está bien y si sabemos algo de él, serás la primera en saber, Felicity me cuenta de que preguntas por él casi todos los días.
Mi hermana es una soplona.
— Está bien, gracias por venir y mándale saludos a Thea .— asintió desordenando mi cabello, me sonrió por última vez y luego se fue del lugar dejándome pensativa en la arena.
ESTÁS LEYENDO
𝑬𝑳𝑬𝑴𝑬𝑵𝑻𝑨𝑹𝒀
Fanfikce𝑬. La noche de la explosión en S.T.A.R labs cambió la vida de muchas personas, creando así a los famosos "metahumanos", algunos buenos cómo The Flash y otros malos. Una joven se vió afectada, dándole poderes increíbles pero junto con sus amigos pr...