𝑬𝑳𝑬𝑴𝑬𝑵𝑻𝑨𝑹𝒀

019 | dickhead.

» CAPÍTULO DIECINUEVE:
' gilipollas '

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— ¿QUIERES IR A OTRO lado para despejarte o hablar?

Asentí levemente al escucharlo y me separé algunos centímetros secando mis mejillas con las mangas de mi hoodie.

— A cualquier lado menos a S.T.A.R labs, no quiero que los demás me vean así .— me crucé de brazos haciendo una mueca, si los chicos me veían así me preguntarían qué me pasó y no quiero hablarles del tema, no quiero preocuparlos.

— Bueno, con permiso .— se acercó a mi y con gentileza me levantó entre sus brazos.

Me miró pidiendo permiso por lo que asentí aferrándome a mi bolso y enseguida sentí el aire golpear mi rostro, no tenía idea a dónde íbamos pero no importaba, fijé mi mirada en la nada misma y el arrepiento me golpeó, no debería haber cedido a los brazos de Allen y mostrarme tan débil, pero por esta vez lo ignoré, no estaba segura de poder seguir con esa carga sobre mis hombros sin explotar y me hacía falta algo de compañía.

— Llegamos .— Barry se detuvo y me dejó cuidadosamente en el suelo.

Miré a mi alrededor con curiosidad y estábamos en un prado, se parecía al lugar en el que entrenábamos pero este tenía muchísima más vegetación, tenía flores de diferentes especies, árboles frondosos y arbustos esparcidos en el lugar, creando una hermosa armonía. Nos fuimos a sentar entre unos árboles, apoyé mi espalda en uno de estos y coloqué mi bolso a mi lado, crucé mis brazos al mismo tiempo que llevaba mis piernas hacia mi pecho y suspiré mirando hacia el frente con la mente hecha un lio.

— Rosie, ¿quieres hablar de lo que sucedió? y no me digas que no fue nada porque estabas llorando.

Lo miré durante unos segundos con desconfianza, no me siento lista para decirle todo pero sé que debía decir algo.

— Solo tuve unos recuerdos desagradables de una etapa muy oscura de mi vida, he reprimido mis sentimientos sobre aquello y evito recordar, pero hoy debido a diferentes circunstancias no pude y bueno, la herida se abrió nuevamente, fue tan doloroso como la primera vez .— me encogí de hombros manteniendo mi rostro sereno, estaba reprimiendo mis lágrimas.

— Te entiendo, me pasa lo mismo con un recuerdo, cuando mi madre fue asesinada.

Suspiró bajando su mirada, me acomodé en mi lugar y pude notar que iba a seguir hablando, así que lo miré con atención.

— Esa noche me arrebataron la cosa que más amaba en este mundo, mis padres, fue horrible, sentí miedo, desesperación e impotencia por no poder hacer algo, nadie creía lo que vi y arrestaron a mi padre de manera injusta, cuando estoy con los chicos ignoro ese recuerdo pero sigue atormentándome cada noche, en especial pensar que tendré que volver a esa noche en el futuro y revivir todo .— su tono de voz era suave, se veía indefenso y me recordó a cuando era más pequeña.

Allen nunca me había hablado sobre la muerta de su madre, lo mencionó superficialmente cuando me explicó lo que sucedió con Eobard y ahora entiendo la razón, aún le duele aunque trate de demostrar lo contrario.

— Lamento muchísimo lo que te sucedió y no es bueno que te guardes lo que realmente sientes, aunque bueno, te lo dice la experta en hacerlo .— sonreí débilmente sin saber muy bien qué decir colocando una de mis manos en su hombro y el asintió imitando mi sonrisa.

— Deberíamos volver a S.T.A.R labs, los chicos estaban desesperados buscándote.

Nos levantamos al mismo tiempo y sacudimos nuestra ropa para sacar la tierra.

— Gracias por acompañarme y abrirte conmigo, Allen .— hablé recogiendo mi bolso.

— Cuando quieras.

Asentí al escucharlo, siendo sincera no creo que esto se vuelva a repetir.

(...)

Salimos del ascensor del edificio cuando las puertas se abrieron y cruzamos miradas durante unos segundos para luego dirigirnos hacia el cortex, al poner un pie adentro todas las miradas estaban sobre nosotros por lo que nos cruzamos de brazos manteniéndonos en la entrada algo cohibidos.

— Rosie, ¿podemos hablar?

Asentí al escuchar a Liam, quien salió de la habitación junto a Dean.

Antes de seguirlos me despedí de los demás con un leve movimiento de cabeza y le sonreí a Allen para luego retirarme, caminamos en un incómodo silencio por el pasillo hasta que nos detuvimos en el taller de Cisco.

— ¿Dónde estabas?

Me dejé caer pesadamente sobre una de las sillas y acomodé mi cabello mirando a Dean.

— Fui a dar una vuelta porque estaba aburrida, los resultados de Caitlin estaban tardando y ya .— le resté importancia encogiéndome de hombros y los escuché bufar.

— ¿Para la otra nos avisas, si? .— les guiñé esbozando una leve sonrisa.

Se miraron entre ellos y luego abandonaron el lugar no sin antes despedirse, nada más cruzaron la puerta mi sonrisa se borró y pasé mis manos por mi rostro dejando escapar un suspiro, no quería hablar con ellos sobre lo que sucedió, no quiero nadie más sepa que puede que esté sufriendo una recaída y tener que irme de la ciudad dejando todo atrás, si les decía que fui a entrenar y ocupé mi arco, me matarían.

— Desapareciste durante horas y ahora vienes como si nada.

Fruncí al ceño al escuchar aquello, retiré las manos de mi rostro y pude ver a un serio Jay parado frente a mi.

— ¿Perdón? .— me crucé de brazos manteniéndome sentada y lo vi rodar los ojos.

— Tuviste al equipo preocupado y los distrajiste de su misión principal, no entiendo qué haces aquí, es una pérdida de tiempo para los demás que traten de ayudarte con tus poderes .— reí mientras negaba y me levanté lentamente sin dejar de mirarlo.

— Mira, querido Jay, yo no les pedí que me buscaran y no estoy obligada a estar todo el tiempo aquí porque no soy parte del equipo, además, creo que la persona que les está haciendo perder el tiempo es otro .— lo miré a los ojos con una sonrisa burlesca y me dispuse al salir del lugar, pero al pasar a su lado me agarró fuertemente el brazo.

— No me vuelvas a hablar así o habrán consecuencias, sé que algo escondes y te desenmascaré, te desenmascaré frente a todos antes de lo que te esperas.

Me solté bruscamente de su agarre y seguí mi camino empujándolo con mi hombro.

— Oh dios, tengo tanto miedo de lo que puedas hacer .— hablé deteniéndome en la puerta tratando de sonar asustada y le enseñé mi dedo favorito volviendo a caminar.

No creía que Jay era un idiota tan grande, en la semana que llevaba aquí nunca habíamos hablado, sólo lo saludaba cuando estaba con los demás y ya, no sé qué bicho le habrá picado para que me amenace así, siempre me dió una mala espina y no dije nada ya que él llevaba más tiempo aquí que yo, por suerte estoy segura de que no podrá cumplir su amenaza porque cuando abandoné mi vida de vigilante le pedí a Felicity que borre todo registro de mi existencia en internet, lo único que quedaba de mi en Starling eran las historias y relatos de las personas sobre mi trabajo junto a Arrow, Arsenal y Black Canary, lo único que podría delatarme sería mi celular y el almacén de entrenamiento, por lo que debía ser muy cuidadosa cuando quiera ir a desquitarme evitando ser vista o rastreada, además cuando hable con el team Arrow por celular, ya que la mayoría de las veces se menciona mi pasado.