𝑬𝑳𝑬𝑴𝑬𝑵𝑻𝑨𝑹𝒀

055 | exaggerations.

» CAPÍTULO CINCUENTA Y CINCO:
'exageraciones'

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— ABRE LA BOCA, ESTO te molestará pero será rápido, lo prometo .— asentí haciendo lo que me indicó, otra prueba más.

Agarró un palito que tenía algodón en la punta y sin contar hasta tres como solía hacerlo lo introdujo en mi boca, cuando lo retiró solté una arcada y me tapé la boca con una mueca de asco.

— Lo lamento pero ahora tengo que hacer lo mismo en tu nariz .— levanté mis cejas sintiendo pánico pero antes de siquiera pensar en escaparme Liam estaba aquí mirándome de manera severa.

— Ni lo pienses .— me apuntó ya sabiendo mis intenciones.

— Está bien .— sin tener otra opción me rendí y me acomodé en mi lugar.

Con una leve sonrisa Caitlin agarró otros de esos palitos del demonio y lo introdujo en uno de los orificios de mi nariz, sentí que me tocó hasta el cerebro.

— Y listo .— cuando terminó de decir eso lo retiró y rápidamente me agarré la nariz con una de mis manos.

— Genial, venía a decirles que la comida está lista, ¿te quedarás Cait? .— un sonriente Liam preguntó y me sacudió el cabello.

— Claro .— contestó ella sin dudarlo y abandonamos mi habitación en conjunto.

Cuando me dispuse a bajar los primeros escalones de las escaleras unos brazos me agarraron y lograron que mis pies dejaran de tocar el suelo, fruncí el ceño pero al ver una cabellera rubia me relajé y me afirmé de su cuello para estar más cómoda.

— Puedo caminar sola, ¿lo sabías? .— me burlé cuando me dejó sentada en una de las sillas.

— Lo sabemos, pero preferimos prevenir que curar, ¿y si te desmayas en la mitad? ¡caerías al suelo y te golpearías la cabeza! .— contestó Dean moviendo sus manos con exageración lo que me sacó una risa.

Este par algunas veces cumplían el rol de padres en mi vida, eran un dolor en el trasero pero sin sus partes sobre protectoras ya tendría mas de un hueso roto y pasaría estando enferma.

— Y bueno papás, ¿qué cocinaron?

Coloqué mis brazos sobre la mesa y apoyé mi cabeza en mis manos.

— No codos en la mesa .— Dean dijo con tono de regaño y sin dejar que me acomodara, empujó mis brazos logrando que mi cabeza cayera de golpe sobre la mesa.

Ven a verme, me necesitas

Me levanté algo exaltada debido a la familiar voz que había escuchado y coloqué mi mano sobre mi pecho con la respiración agitada.

(...)

Rodeé los ojos cruzándome de brazos y un bufido salió de mis labios, después de que volviera a tener un "episodio" en la mesa de casa me trajeron a S.T.A.R labs donde Caitlin podría monitorearme de manera más completa y así nos aseguraríamos de que todo estaba bien, durante todo el camino estuve tratando de convencerlos de que había sido el golpe en la cabeza y que estaba bien, pero eso los puso más histéricos ya que se pasaron mil historias y aquí estábamos, en el ascensor y en mi caso, en los brazos de Dean, se turnaban para ver quien me llevaba. Las puertas finalmente se abrieron y D comenzó a correr, solté un leve grito aferrándome a su torso y cerré mis ojos con fuerza, hasta que me recostó en la camilla con delicadeza y se paró a mi lado.

— ¿Es necesario todo esto? estoy bien y Caitlin dijo lo mismo .— pregunté abriendo mis ojos y me encontré con el resto del equipo a unos metros de distancia.

— Por favor, solo unas pruebas y nos iremos a casa.

Accedí rendida luego de unos segundos y una sonrisa ladina se formó en el rostro del castaño.

Caitlin llegó luego de unos segundos junto a Liam, se sacó el bolso y lavó sus manos para después colocarse el delantal blanco que solía ocupar.

— Necesito que salgan porque necesita quitarse la ropa .— la escuché decir, todos le hicieron caso y tragué en seco mirando a los chicos en busca de ayuda.

— ¿Es necesario que me saque la ropa? digo, hace frío y no quiero enfermarme .— puse excusas sentándome en la camilla y rasqué mi nuca.

— Debo chequear tu respiración y para aquello debo colocar el aparto en tu espalda sin que algo haga interferencia .— se encogió de hombros haciendo una leve mueca.

Miré hacia mi alrededor sintiendo el corazón en la boca, en la habitación solo estaba Liam, Dean, Cait claramente y Barry, este último me miraba con preocupación pero al notar mi mirada me sonrió levemente.

— Está bien .— susurré con un hilo de voz y llené mis pulmones de aire.

Procedí a quitar mi hoodie lo más lento posible, lo dejé doblado a un lado y con mis manos tiritando quité mi camisa, quedando solamente en brazier y dejando a la vista las cicatrices que tenía en mi cuerpo, mordí el interior de mi mejilla sintiéndome aun más nerviosa y deseando que la tierra me tragara, la verdad es que con un simple movimiento de manos podría hacer eso. En silencio la chica colocó el frío aparto en mi espalda y comenzó a hacer lo que había mencionado anteriormente, en repetidas ocasiones me pidió que respirara o mantuviera el aire. Los minutos pasaban más lento de lo que me gustaría, seguía siendo sometida a diferentes pruebas y todos estaban en silencio, cosa que me incomodaba muchísimo.

— Los resultados estarán en media hora, ya puedes vestirte.

Asentí agarrando mi ropa la cual me coloqué rápidamente.

— Chicos, ¿nos pueden dejar solos? .— Barry habló por primera vez desde que estaba aquí y se cruzó de brazos.

Los tres abandonaron la habitación casi de inmediato y cerraron la puerta de cristal, sin que el chico a mi lado se diera cuenta miré con los ojos entrecerrados a los bobos ya que les había rogado que no me dejaran sola con Allen, pero qué es lo primero que hacen? se van, me traicionaron y les pegaré en el trasero al volver a casa.

— ¿Qué pasó?

— Eso debería preguntártelo yo, ¿qué pasó Rosie? ¿por qué tienes tú espalda así? .— suspiré bajando la mirada y me crucé de brazos.

— Son... son las marcas que me quedaron de unas guerras pasadas .— cité lo que Oliver me había dicho en esos días y forcé una sonrisa.

— ¿Qué guerras? .— volvió a preguntar y tomó una de mis manos con delicadeza.

Me quedé en silencio pensando en si debía decirle o no, confiaba en él pero aún ni siquiera Dylan sabe de todo esto y a él lo conozco desde hace años.

— Está bien, no es necesario que me digas, aún debemos trabajar en la confianza .— contestó al notar que no diría nada con una falsa sonrisa y soltó mi mano dispuesto a abandonar la habitación.

— Barry, si confío en ti, claro que lo hago, es solo que esto es un tema delicado para mi y solo lo saben cierta personas, me cuesta decirlo en voz alta porque me hace revivir todo .— aseguré agarrando nuevamente su mano y lo acerqué a mi con un tirón.

Quedó parado frente a mi y sus manos fueron a mis mejillas las cuales acarició con delicadeza, al sentir el suave contacto de su piel cerré los ojos sintiéndome más tranquila y me apoyé en su pecho.

— Fue hace dos años, en una batalla contra Deathstroke .— solté luego de mantenerme en silencio por unos segundos y un nudo se formó en mi garganta, aquí vamos de nuevo.