» CAPÍTULO OCHENTA Y NUEVE:
' futuro incierto '*:・゚✧
ZOOM SE ACERÓ A mi luego de que la imagen de Barry desapareciera, su rostro era adornado por una estúpida sonrisa y me miraba con aires de grandeza.
— Te lo dije, si correremos .— murmuró con burla.
— No lo creo, Barry dijo que si yo tenía herida alguna, no harían un trato .— dije con obviedad.
— Eso es algo que se puede arreglar .— levanté una de mis cejas ante lo dicho.
Abrí mi boca para decir algo pero al no saber qué volví a cerrarla, el rubio fue en busca de unos paños, alcohol y vendaje, se paró frente a mi y procedió a limpiar mis heridas visibles, en especial la del labio. Miré la escena incrédula, ¿es tan idiota como para creer que con alcohol la herida desaparecería en segundos? al parecer si y lo peor es que no me sorprendía. Terminó luego de un par de minutos, inspeccionó mi rostro y luego me sacó las esposas de una de las muñecas, me agarró con firmeza para evitar que me escapara y procedió a curar mis lastimadas muñecas, las cuales sangraban y me dolían como el mismísimo infierno.
No mencionamos nada, yo estaba demasiado adolorida y agotada como para intentar escapar y él estaba concentrado en curarme, su rostro lo demostraba. Antes de darme cuenta ya tenía mis muñecas con vendas, puso mis brazos atrás de mi cuerpo y volvió a colocarme las esposas, eliminando toda esperanza de poder escaparme. Comenzamos a caminar, yo apenas lo hacía, mi mirada se desvió hacia la jaula de cristal e hice una mueca al ver a Jay.
— Lo siento .— susurré cuando pasamos por su lado.
Asintió siguiéndonos con la mirada, la mano de Zoom se posó en uno de mis brazos, apareció una brecha y la cruzamos, él cruzó rápidamente y en segundos nos encontramos en la Tierra 1. Suspiré mirando a mi alrededor, era de noche y no corría nada de viento, pero el ambiente era fresco, estábamos en un lugar totalmente desconocido, hubiera inspeccionado más pero otra cosa llamó mi atención, a unos metros estaba el equipo Flash.
— ¿Trajiste a todo el equipo? No puedo culparte .— dijo el idiota que me retenía.
Barry se abrió paso entre los demás para quedar al frente y apreté mis labios apartando la mirada.
— Rosie .— me llamó Dylan acercándose.
Rápidamente negué, tratando de que se alejara y los chicos lo sujetaron, evitando que haga algo estúpido.
— Será un gran espectáculo .— se burló Zoom.
Rodeé los ojos sacudiendo mis brazos, lo que solo logró que el agarre de las esposas se hiciera más fuerte y que comenzara a lastimar aún más mis muñecas.
— Déjala ir .— demandó Allen acercándose un poco.
— Después de la carrera .— se negó Zoom.
— Déjate de tonterías, sabemos que usarás el Magnetar para destruir el multiverso .— intervino Harry con un arma entre sus manos.
— Bravo, lo descubrieron .— respondió sarcásticamente el rubio.— Casi, no quiero destruirlo todo, esta Tierra estará en el centro del multiverso, es el punto de acceso a todas las otras Tierras existentes, una onda transdimensional y se acabó.
Gruñí al escuchar el descabellado plan.
— Sigues siendo un villano de mierda .— susurré mirándolo de reojo.
Me miró con enojo, apretó sus puños pero no me pegó debido a la presencia de los demás.
— Dejarás solo nuestra Tierra, qué generoso de tu parte .— dijo Cisco.
— Necesito un lugar para colgar mi capucha, tal vez quieras despedirte .— finalizó Zoom.
Recorrí con la mirada a los presentes, todos se mostraban preocupados y ansiosos por lo que estaba a nada de suceder, se miraban entre ellos sin saber qué decir, todos menos Barry, sus ojos estaban pegados en mi y al conectar nuestras miradas me sonrió débilmente, le devolví la acción luego de unos segundos, aunque tratara de ocultarlo sabía que estaba nervioso, podía terminar todo bien o todo mal y todos estábamos con ese pensamiento en la cabeza. Zoom me agarró nuevamente y corrió, para dejarme agarrada en un palo de fierro, me miró amenazante, advirtiéndome con solo eso que si intentaba hacer algo, podrían empeorar las cosas.
Volvió a desaparecer, parándose frente a su gran invento. Bufé deslizándome hasta quedar sentada en el suelo, mis piernas no daban más después de haber estado horas parada. Volví a mirar al equipo, estaban hablando entre ellos pero no alcancé a escuchar nada por la distancia que nos separaba, mis ojos se fijaron sobre los chicos, se notaban cansados y unas ojeras se hacían presentes bajo sus ojos, demostrando que no habían descansado nada desde que me llevaron. Quería correr a abrazarlos, susurrarles que estaba bien y que no debían preocuparse por mi, pero no pude, o por lo menos, no aún. Ante mis ojos, el destino era incierto, habían un 50% de posibilidades de que Barry gane y otro 50% de que Zoom gane, aunque algo dentro de mi me decía que confiara en Allen, conociéndolo no se hubiera presentado con tanta seguridad a la carrera si no tuviera un plan bien elaborado.
Una solitaria lagrima se deslizó por una de mis mejillas, no pude secarla por la posición en la que estaba, así que recorrió el lado izquierdo de mi rostro hasta mi cuello, quería cerrar mis ojos y no volver a abrirlos hasta estar en los brazos de los bobos o de Barry, quería cerrar mis ojos y que al abrirlos todavía estuviera en la escuela, sin preocupaciones y con personas increíbles alrededor de mi, sin preocuparme sobre posibles amenazas o sobre si llegaría a casa esa noche, sin moretones por todo el cuerpo o cicatrices, sin llantos descontrolados o malas experiencias, ser una simple chica que vive en Starling y tiene problemas de adolescente, preocupándome de lo que estudiaría al terminar la escuela y a qué universidad iría, siempre me ha gustado todo lo que tiene que ver con informática o ingeniería, pero puede que nunca llegue a descubrir qué me guste más si Zoom gana y nos mata a todos.
— ¿Cuáles son las reglas? .— la voz de Barry me sacó de mis pensamientos.
Miré en esa dirección, estaba parado frente a Zoom dispuesto a hacer la carrera.
— Una vuelta aquí producirá un gigavatio de energía, necesito más de 500 para hacer que el Magnetar funcione, cuando esté lleno, yo gano, porque no hay forma de pararlo .— aclaró el rubio.
— Lo único que debo hacer es detenerte antes de que lo hagas .— dijo Barry mirando el aparato.
— Si, es así de simple, pero si en algún momento decides que ya no vas a correr, tu querida novia morirá al igual que tu club de admiradores .— la amenaza de Zoom me hizo tragar en seco.
— No son mi club de admiradores, son la razón por la que corro y por la que te venceré .— aseguró Allen poniéndose en posición.
— Veamos qué tan bueno eres, Flash .— murmuró Zoom imitando su posición.
Antes de partir con todo el show, Barry miró en mi dirección capturando toda mi atención y sonrió de manera tranquilizadora, buscando transmitirme la confianza que él sentía, con sus labios moduló "Te adoro" y sin darme la oportunidad de contestarle, la carrera comenzó.
— Yo también te adoro .— susurré para mi misma siguiéndolos con la mirada.
Lo único que se veía eran destellos Azules, Zoom, y amarillos, Flash. Ambos luchando por sus objetivos, dispuestos a ganar y derrotar al otro.
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𝑬𝑳𝑬𝑴𝑬𝑵𝑻𝑨𝑹𝒀
Hayran Kurgu𝑬. La noche de la explosión en S.T.A.R labs cambió la vida de muchas personas, creando así a los famosos "metahumanos", algunos buenos cómo The Flash y otros malos. Una joven se vió afectada, dándole poderes increíbles pero junto con sus amigos pr...