Durante los minutos interminables que esperamos en el estacionamiento no podía dejar de pensaren qué haría o diría una vez que me encontrara en la puerta de su departamento. Entre nervios y risas nerviosas retoqué mi maquillaje y revisé que en mi cartera hubiera dinero para tomar un taxi en caso de que algo saliera mal y mi teléfono contara con suficiente batería para llamar a Derek. Me senté nerviosa a retocar mi maquillaje mientras los ansias cosquilleaban mi estómago.
Una vez que estuve afuera del edificio de Nick me despedí de mis amigos y luego de un largo suspiro me aventuré a entrar. Dentro del ascensor repasé mentalmente algunas cosas que quería decirle una vez que estuviera frente a él, sin embargo, olvidé todo cuando me vi frente a su puerta. Eran las tres de la mañana y, levanté temblorosa un dedo para presionar el timbre. Me quedé esperando de pie fuera de la puerta hasta que luego de un segundo timbre alguien abrió la puerta, era Nick que me miraba desde sus ojos asombrados y confundidos; me encogí de hombros y pregunté con voz tímida si podía entrar. Él asintió con la cabeza, aún sin poder decir nada. Di algunos pasos en mis tacones altos para ser recibida por algunos maullidos, las luces estaban apagadas, me volteé hacia Nick por primera vez me percataba de que tenía el torso descubierto, los nervios no dejaban de repiquetearme y no sabía muy bien cómo reaccionar.
-Yo, no podía simplemente dejar que todo se acabara así como así-Dije entre susurros.
No hubo palabras sino que en respuesta pude sentir sus brazos envolviéndome y sus labios buscando mi boca. Me tomó por la cintura y me levantó, no pude más que enroscar mis piernas en torno a su cadera y responder a sus besos furiosos y hambrientos. No fue hasta que sus labios bordeaban el límite de la tela azul de mi vestido y su mano comenzó a despeinar mi cabello que descubrí cuánto necesitaba esto, cuánto lo deseaba.
Comenzó a caminar hacia la habitación cargándome en su brazos y comencé a saborearme en los labios la dulzura de tenerlo otra vez, de sentirlo en los labios como un caramelo y las inevitables ganas de morder que comenzaban a enloquecerme. No hubo más palabras, nos hundimos en una espiral de placer que aumentaba a cada momento hasta que ya no hubo más que dos cuerpos envueltos por sábanas azules. Mis piernas temblaban y Nick me giró hacia él para verlo directamente a los ojos.
-¿Cómo decidiste venir aquí?-Dijo recuperando un poco la compostura.
-No puedo aceptar tu carta ni tu despedida. La verdad es que siento que-Nick se acomodó a mi lado girándose y sosteniendo su cabeza sobre una mano- No quería decirte que estaba enferma y yo misma te estuve alejado, además de que me comporté como una niñita.
-Lamento tanto no poder ser el tipo de novio que puedes llevar a la graduación.
-Pero puedes ser el tipo de novio que ahora mismo quiero, no puedo prometerte nada, digo, tampoco te has comportado muy bien conmigo últimamente.
-Lo sé, ser trabajólico no aporta para nada y me ha vuelto un imbécil.
-Definitivamente.
Nos miramos y, a pesar de todo, seguimos siendo uno. No siento mayores miedos, no temo que otra se fije en él ni que él le devuelva el interés. Siento una confianza nueva que jamás imaginé que tendría.
-Prometo ser el mejor novio de tu joven vida, aunque tendrás que darme un poco de tiempo porque no hallo la manera de decirle a Marc lo que sucede entre nosotros, aunque creo que sospecha algo.
-No quiero hablar de eso ahora ¿Qué te pareció mi vestido?
Nos quedamos hablando hasta que el sueño me vence y me duermo entre sus brazos, su olor llena mi nariz y siento que es un lugar en el cual pasaría la vida entera si así me lo ofrecieran. Por fin respiro tranquila y siento que, aún en medio del huracán de emociones que me ha arrebatado durante las últimas horas, a veces es necesario lanzarse a lo desconocido.
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Huye Conmigo
RomanceJamas me molesto del todo que mis hermanos fueran mayores, siendo la menor y la unica mujer era casi hilarante la sobreproteccion. Asi mismo sus amigos eran todo un tema, obligandome a quedarme en mi habitacion para evitar que yo molestara, per...