Creo que pasaron unos cuarenta minutos más y éramos las siguientes en pasar a conocerla.
La gente de antes había salido muy contenta y emocionada así que eso me dio más alegría.
Llamé a mi hermana para que recogiera las sillas y vino enseguida algo que me sorprendió mucho.
Fuimos a conocerla y era encantadora, muy simpática. Me encantó conocerla ella fue muy atenta conmigo cuando la hablaba, cuando le dije mi opinión sobre su libro también me escuchó mucho.
Me dijo que le iba a enseñar esas hojas a gente para ver si le interesaba y que si a alguno le interesaba me lo iba a decir.
Le dejé todas las hojas que tenía y me fui ilusionada como todos los que salían de aquel cuarto.
Lo último que me dijo fue que iba a sacar un libro para que lo comprara y que ella me lo iba a firmar.
Muy contenta Ana y yo fuimos a decírselo a todos nuestros amigos y a mis primos.
Se pusieron muy felices al saber la noticia, incluso más felices que yo.
Me volvía a doler más el tobillo y fui a decírselo a mama para que me lo viera y me dijera si estaba mejor o peor.
Me dijo que por haber estado mucho tiempo de pie, se me ha hinchado un poco. Me dejó salir a jugar pero sin correr y sin estar mucho tiempo de pie. Mis primos sacaron un montón de juegos de mesas para que no tuviera que estar mucho tiempo así.
Lo poco que quedaba de tarde pasó muy rápido mucho más rápido que esperando en la fila. Esperar se me hacía agotador menos mal que ya no estoy ahí.
Tenía mucha hambre y la abuela ya nos estaba llamando para cenar algo que era muy común en ella. Pero no me puedo quejar ya que su comida esta muy buena.
Nos lo comimos muy rápido. Me subí a ducharme y a cambiarme de ropa para irme a dormir ya que había sido un día bastante largo. Me habían pasado muchísimas cosas en el día de hoy y estaba bastante cansada, mucho mas de lo normal. En la ducha los ojos se me iban cerrando lentamente intentando dormirme allí parada pero estaba impidiéndolo poco a poco.
Hice todo lo que tenía que hacer y puse a Camila a mi lado. Nos tumbamos en la cama y nos dormimos enseguida.
Unos rayos de luz salían por la ventana hasta la hermosa cara de mi querida gata, su pelaje resplandecía y era más hermoso de lo habitual.
Me levanté de la cama lentamente en busca de mi crema para el tobillo y también buscando el cepillo de mi gatita.
Me vi el tobillo y estaba ligeramente mejor que el día anterior.
Camila abría los ojos mientras la cepillaba y se volvía a dormir, así siempre.
Ya solo quedaban unos cuatro días para volver a la rutina y eso me ponía muy triste. No quería despertar de este verano que había sido increíble.
-¡Todos a desayunar! Gritó la abuela para todos los que estábamos en la casa.
Nos había preparado un banquete muy bueno lleno de tortitas, batidos de chocolate, bacon, cereales... y muchas más cosas.
Nos pusimos hasta arriba de comida algo que no solíamos hacer en el desayuno, yo creo que era más propio de comida o de la cena.
Sonó el timbre y el abuelo fue a ver quien era y sorprendentemente era el correo con una caja bastante grande pero no muy pesada.
Mis primos y yo al ver aquel paquete tan grande decidimos abrirlo y ver que tenía adentro. Yo esperaba que fuesen mis camisetas de Selena Gomez pero al ver esa caja tan grande mis esperanzas por que fueran se iban esfumando poco a poco con la poca espérenme que llevaba adentro decidí abrirlo y vi demasiado papeles arrugados adentro de ellos. Quitamos todos los papeles que habían hasta que llegamos a ver unos libros de portadas negras con los títulos en diferentes colores y formas. Se lo dije a papa y me dijo que no era de ellos, así que suponía que eran de mi hermana ya que leía libros de esos tipos.
Mis primos me ayudaron a subir la caja grande a la habitación que compartía con mi hermana donde pasaba la mayoría de las horas allí o si no estaba se había ido con sus amigos a la calle. Llamamos y nadie estaba así que decidimos pasar y dejarle la enorme caja en su cama para que cuando viniera la viera y no nos dijera nada.
Mi hermana se parecía bastante a mí y yo creo que por eso no, nos soportábamos mucho. Pero algo bueno que tenia ser la hermana pequeña, era heredar todas las cosas de ella y al ser muy parecidas de estilo todo me gustaba. Algo que generalmente las hermanas pequeñas hacemos es robarle cosas a la mayores, algo que yo no hago por qué se las consecuencias y prefiero no volverlas a ver en mi vida. Pelearse con mi hermana para mi es un poco duro pero cuando hay algo que no me gusta o alguna injusticia no dudo en decirlo y en hacerlo saber. Creo que eso es algo que me caracteriza mucho. En eso nos diferenciamos mi hermana mayor y yo, creo que es de las pocas cosas que tenemos diferentes. Los ojos también los tenemos diferentes, ella tiene unos envidiables ojos verdes y yo ojos marrones comunes pero a mi me gustaban al igual que los de mi hermana.
Mis primos si que eran muy diferentes a mi eran justamente lo contrario pero lo bueno era que nos complementábamos muy bien los tres juntos. Yo creo que ellos eran gemelos ya que se parecían mucho, pero nunca me había parado a preguntárselo y además tenían la misma edad, así que todo encajara para lo fueran.
Mi prima mayor era diferente al resto pero no de forma mala, de forma de otro sentido. Ella se llevaba muy bien con mi hermana creo que era por que escuchaban la misma música y eran de la misma edad. Creo que eso era todo lo que tenían en común por que casi nunca hablábamos.
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Soy yo
Teen FictionHera lo tenia todo a su familia, sus amigos... La vida le trataba bien y se sentía cómoda en ella. Tenía amigas de verdad que la querían y familia que la adoraban, no necesitaba más. La perdida de sus familiares hacen que su ansiedad y sus problema...