El estreno

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Solo diez minutos y no había cruzado la puerta que me separaba de mi hermana. Me armé de un extraño valor y fui a tocar la puerta.
Que quieres! Me gritó desde la otra cara de la puerta.
-Necesito que hablemos por favor le pedí.
-Haber desembucha me dijo ella.
Le conté todo lo que me pasaba, su cara no era de mucha esperanza para mí ya que su expresión había cambiado pero para mal. Seguía teniendo la misma cara malhumorada de siempre con muchas ojeras que intentaba tapar con maquillaje.
Accedió a dejármelo con una condición. Esa condición era recoger su habitación una semana entera y sin decírselo a mamá y a papá. Obviamente a mi no me importa porque tenia que hacer la mía y no me importa la verdad.
Cogí el ordenador y me fui a ponerle encima de cama. Solo faltaban cinco minutos y tenía todavía un montón de cosas que hacer.
Me metí al baño y m lavé las manos, salí y bajé hacia la cocina para coger un paquete de oreos nuevo que había traído mamá por la mañana mientras estaba viendo el partido con papá ella se fue y ninguno nos enteramos.
Subí y vi que todavía no se había encendido el portátil y eso fue algo que me asustó mucho. Pasaron minutos y me di cuenta de que no estaba ni encendido.
Se encendió enseguida y la contraseña era la más fácil que se podía poner. La contraseña era "megustacomer" muy fácil para no saberlo viniendo de mi hermana. Después de esto iré a decirle que le cambie la contraseña a su portátil si quiere más seguridad y protección.
Me fui a ver el estreno , y estaba totalmente lleno. No había posibilidad de entrar. Solo quedaban unos tres estupidos minutos y seguía ahí frente al ordenador con la bolita cargándose desde hace mucho tiempo. Ya me había comido varios oreos.
Solo quedaban dos minutos y no había pasado nada de nada.
La ruedecita giraba y giraba y no paraba nunca de girar mientras en la pantalla aún negra seguía ahí la ruedecita blanca.
Quedaba un minuto y seguía en lo mismo. No pasaba nada, refresque la página para que se cargara más rápido o se pueda conectar mejor.
Cincuenta segundos faltaban y el sueño me estaba entrando. Mis ojos se iban cerrando y no podía intentar resistirme. Me quedé tan dormida, que desperté a las cinco y cuarto abrazando el ordenador de mi hermana.
Desperté muy bien sin ningún sueño pero llegaba muy pero que muy tarde. Nunca llegaba tarde cuando bajaba al parque porque estaba a unas calles de mi casa.
Me desperté y fui a la habitación de mi hermana y le dije que no lo había utilizado y que cambiara la contraseña de paso. Así que me negué a hacer el trato ya que no lo había utilizado nada.
No se que cara puso ni nada pero yo salí directamente de la habitación sin mirar para atrás.
El paquete de oreos estaba a la mitad y yo ya estaba muy llena para terminarlo. Bajé a la cocina a dejarlo y fui a ver que estaban hechando en los canales interesantes en la televisión.
Vi uno de reformas pero ya se estaba acabando dentro de unos diez minutos entonces tenía que buscar algo para mirar más.
Me estuve viendo un canal de las tartas más increíbles del mundo jamás construidas. Era muy interesante pero duró muy poquito. Pero derrepente se me volvió a la mente que eran las ocho menos cuarto de que debería haber estado en el parque hace mucho tiempo con mis amigas.
Me peiné el pelo lo más rápido que pude, me cambié de zapatos y me puse unas pulseras de colores. Bajé y caminé rápidamente hasta llegar al parque de lejos se veía a gente que creía que conocía pero nada más me iba acercando no veía a mis amigas ni a gente de mi colegio. No había nadie solo estaban los amigos de mi hermana con la música puesta muy alta a estas horas de la tarde. Me había arreglado para nada y también me había bajado hasta aquí para nada. Subí directamente a mi casa muy rápido y llamé enseguida a mis amigas para saber que estaba pasando. Me dijeron que como no había ido se habían aburrido y se fueron a sus casas para no estar ellas solas.
Lo último que me dijeron fue que no las volviera a dejar solas porque si no, no iban a volver a quedar conmigo. Decían que eso sería una pérdida de tiempo esperar y que no apareciera.
Colgué y me empecé a sentir muy triste por esa culpa de no haberlas visto. Llore unos minutos pero se me pasó y me fui a lavar la cara para que se me quitara lo rojo de llorar de los ojos y de la cara hinchada que tenía. Había oido que hecharse aloe vera, esa planta verde, te ayudaba a tener una piel mejor y que no se hinchara mucho ni que se pusiera tan roja por muy pocas cosas. Me quemaba muy fácil mente y no me gustaba en absoluto era muy molesto, tener que echarse protección solar cada cinco minutos para que no se quemara. En el cuerpo eso no me pasaba ni siquiera en los hombros.
Ya que estaba en internet, con mi reloj/movil fui a buscar el estreno que me perdí. El videoclip empezaba con un estilo de los setenta muy seguido de un musical que estaba comenzando en un teatro y después todo el mundo salieron a la calle y siempre se veían felices cantando y bailando subidos a autocarabanas y coches descapotables. Los vestidos y los trajes de todos eran muy bonitos y me encantaban las faldas con tanto vuelo y rallas de colores brillantes.
Bailaban y Selena estaba en medio de todos ellos con un increíble traje precioso.
Me encantó el videoclip y la canción entera.
Aunque el día había sido un desastre era lo mejor que me había pasado.

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