Soy yo

El parque

Los informativos de medio día habían empezado y con el todos nos habíamos sentado a comer.
Terminamos un poco más tarde que el informativo pero no nos importaba lo más mínimo.
Quedaban todavía unas dos horas para poder quedar y bajar con mis amigas y no sabía que hacer.
Me fui a la parte de arriba hacia mi habitación para escuchar un poco de música y que se me pasara más rápido las dos horas que quedaban para bajar.
Empece por el primer disco de Selena Gomez y así hasta terminar todos los que tenía. Me encantaba escucharla y mirar a el techo de mi habitación.
Terminé y había pasado tiempo pero no el suficiente que necesitaba.
Buscando por el internet de mi reloj/movil, encontré que Selena iba a lanzar su nueva canción dentro de media hora y claramente tenía que esperar hasta que la sacara para escucharla de las primeras personas.
Me levanté de la cama de donde estaba, hacia la cocina para comer algo.
Habían unas barritas de cereales con trozos de chocolate y tenían muy buena pinta así que cogí unas cuantas para comer mientras empezaba la canción. Fui a ver a la nevera haber si había algo y vi un yogur griego con plátano y canela en el, era una combinación rara pero se veía que podía estar buena y entonces decidí probarlo para ver como estaba el yogur con tantas cosas distintas. Lo cogí y con él también una cuchara pequeña y unas servilletas por si acaso ocurrían accidentes por las sabanas de la cama o por que se me cayera al suelo algo. Con lo patosa que soy no me sorprende nada. Subí con todas las cosas en las manos y abrí como pude la puerta de mi habitación.
Dejé las cosas encima de la cama y dejé también a Camila en su rinconcito para que se entreteniera mientras tanto. Abrí una barrita y me la terminé enseguida, y unos segundos después me empecé la siguiente y así hasta que me terminé todas las que me había llevado a la habitación. Tiré los envoltorios a la papelera de mi cuarto y me subí de nuevo a mi cama para comerme el yogur antes de que empezara el estreno.
Quedaban unos veinte minutos mas o menos y quería comerme el yogur. Tenía mucha curiosidad de a que iba a saber y si me gustaría o no.
Lo probé y nada más meterme la cuchara a la boca se me calló el vaso entero con yogur por toda la cama y por parte del suelo. Sabía que era patosa pero no a este nivel. Todo estaba lleno de yogur y chuparlo todo no era el mejor plan para limpiarlo y menos decírselo a mamá o a papá. Salí de la habitación con la esperanza de que nadie entrara hasta que lo limpiara. Le había caído a un montón de cosas incluso en la patita de Camila, todo estaba hecho un desastre. Bajé a por la escoba pero enseguida me di cuenta de que no tenía nada que hacer con ella así que la puse donde estaba y cogí la fregona y el cubo donde estaba. También cogí una barrita mas para que me diera mas fuerzas de limpiar todo el desastre que tenía montando ahí arriba. Subí con todo eso y me metí directamente a mi habitación sin decírselo a nadie. Entre a mi cuarto de baño a llenar el cubo con agua y poco de jabón líquido y empecé a fregar todo el suelo. Antes de ello, quite las sabanas manchadas y las dejé afuera en la puerta. Antes de empezar a fregar todo el suelo de mi habitación, le limpie la patita a Camila antes de que empezara a comérselo o ha olerlo. Terminado con ello, empecé a limpiar de al fondo hacia la puerta para salir de la habitación. Quedaban quince minutos y no sabía si me iba a dar tiempo para tumbarme en la cama y ver el estreno. Mi hermana vio la sábana en la puerta pero no le importó y pasó de largo. Yo la cogí y fui directa a la lavadora con ella en la mano. La metí y cerré la puerta esa redonda de la lavadora. Mire en los botones lo que ponía y apreté al botón que ponía lavado rápido. Le eché suavizante y detergente. Empezó a girar y a lavarse muy rápido. No sabía cuanto tiempo iba a tardar pero esperaba que fuera poco para que nadie se diera cuenta, una tarea que iba a ser difícil ya que esta lavadora sonaba mucho y se escucha con facilidad.
Subí a la habitación de mis padres para coger otra sábana intentando que no se dieran cuenta ya que estaban dormidos y obviamente no quería despertarles y que se dieran cuenta de todo el lío que había montado en muy pocos minutos.
Cogí la primera sábana que vi, vi que el ordenador de papá esta encendido y eso me dio una idea.
Salí del cuarto sin hacer ningún ruido que los hiciera sospechar.
Abrí la puerta de mi habitación y se me había olvidado abrir la ventana para que se secara más rápido. Pero sin abrirla ya se había secado completamente. Entre y rápidamente le puse la sábana a la cama. Era la primera vez que había echo esto y no sabía si me había quedado bien o no pero a mí me gustaba el resultado que había obtenido finalmente.
Con la esperanza de que mi hermana me dejara su portátil para ver el estreno con una pantalla mucho más grande, me dispuse a ir a su habitación para intentarla convencer de que me lo dejara por unos minutos. Solo quedaban diez minutos y las manos me empezaron a sudar mucho, como cuando estaba nerviosa como en este mismo momento.
Muy pocas veces había entrado a la habitación de mi hermana. Siempre entraba cuando era mucho más pequeña y su habitación para mi gusto no era muy bonita pero era la otra casa. No tenía mucho que ver.