Me acosté a dormir pero tardé mucho en conciliar el sueño ya que no podía por los nervios que tenía de empezar el primer día de curso en el nuevo instituto con nueva gente diferente a lo que ella estaba acostumbrada hasta entonces. Camila también estaba muy inquieta pero no la culpo tenía mucho calor mi pequeña.
Dormí toda la noche del tirón hasta que me levanté más o menos a las siete. Una hora antes de lo que debía, fui al baño a lavarme la cara y volver a la cama. Bajé un poco más la persiana y cerré más las cortinas para que no entrara luz ya que no podía dormir con luz. Me volvió a costar dormir pero esta vez mucho menos. Cerré los ojos y me pegué a Camila y poco más para intentar conciliar el sueño más rápido.
-Hera levántate ya, es hora de despertarse que al final vas a llegar tarde me dijo mamá mientras se estaba poniendo los tacones de color negro que se ponía siempre para trabajar. Era muy normal que mi madre se pusiera los zapatos en mi habitación porqué así ya hacía las dos cosas a la vez, despertarme y calzarse.
Di muchas vueltas en la cama intentando retrasar lo más posible levantarme estaba muy cansada y no tenía muchas ganas de ir.
-Venga ya levantate me volvió a hablar mi madre ya saliendo de la habitación con la sabana que me estaba cubriendo.
Después de eso me levanté y fui directamente al baño a lavarme la cara como hacía todos los días al levantarme. Cogí el uniforme de encima del baúl y me lo llevé al baño para cambiarme allí también. Antes de salirme del baño me cepille un poco el pelo y me hice una trenza en un lado del pelo. Me puse un poco de laca para que no se me moviese ni se me enredara más el pelo.
Salí del baño para ir a la habitación a dejar el pijama en el vestidor y ponerme los zapatos. Metí como pude el pijama y me fui a buscar los zapatos del año pasado. Busqué en el zapatero y no estaba así que fui a buscarlo en el fondo de mi armario ya que había ponía varias cosas. Tardé mucho tiempo en llegar al fondo hasta que los encontré un poco sucios pero los había encontrado. Cogí el limpiador de zapatos del baño y empecé a limpiarlos rápido. Vi que quedaba muy poco tiempo y yo tenía que desayunar, me empecé a poner los zapatos muy rápido y bajé para empezar a desayunar.
Me senté en mi sitio y empecé a comer un croissant relleno de jamón y queso a la plancha. Acompañado con un zumo de naranja natural y un yogur griego con canela por encima y trocitos de caramelo. Mientras mi madre estaba viendo las noticias y mi padre estaba viendo las noticias. Ellos estaban comiendo cereales integrales con leche de soja y bizcocho de manzana con cereza. Me lo terminé todo y fui a ponerlo en el lavavajillas. Subí rápidamente a cepillarme los dientes y a ultimar todos los detalles. En mi habitación cogí mi mochila y la dejé en el pasillo para cogerla antes. Me volví a meter en el baño y me cepillé los dientes y me puse un poco de colonia de mama.
Bajé con la nueva mochila hacia la puerta para salir de mi casa pero antes tenía que despedirme de mis padres.
Fui a despedirme de mi madre que estaba haciendo unas cosas en el ordenador, sentada en el sofá. Subí a la habitación de mis padres donde debería estar mi padre ya que así me lo dijo mamá unos segundos antes. Toque la puerta y abrí, mi padre se estaba secándose las lágrimas que se le habían caído y se volvió a abrazarme y a desearme un buen comienzo de curso.
Me quedé muy desconcertada después de ello. Bajé y cerré la puerta, fui al ascensor y esperé hasta que llegó al cuarto piso donde yo me encontraba.
Cerré las puertas del ascensor lo más antes posible ya que había oido a uno de los vecinos que salía de su casa y ahora mismo no me apetecía cruzarme con ningún de mis vecinos y menos con los de mi planta.
Bajé a la calle y esta el cielo un poco nublado como con ganas de llover. No tenía paraguas y me daba miedo mojar el uniforme el primer día. Llegué en menos de diez minutos como esperaba. Nos recibieron en la sala de teatro, yo creía que iba a ser en el patio pero resultaba ser que habían cambiado de planes. Allí nos teníamos que sentar por clases y yo me senté al lado de Laura y de Luisa ya que eran las únicas que conocía en la clase. Al principio no sabían como reaccionar las dos cuando se conocieron a la entrada del instituto pero una vez nos sentamos en las butacas que había allí se pusieron a hablar como locas, como si se conocieran de toda la vida, como si hubieran sido amigas de la infancia. Tenían muchas cosas en común, en algunas partes que hablaban me perdí ya que había cosas que no sabía pero nos entendimos las tres a la perfección. A lo lejos vimos a Ruth y a Maria con el grupo de amigos que tenía Alba antes de irse. Me extrañó mucho pero intenté no darle importancia, sabiendo que cuando llegáramos a casa se lo iba a decir en la videollamada que según ellas íbamos a hacer todos los días.
La mañana pasó muy rápido, después de una explicación bastante grande de todo el centro nos llevaron a nuestra clase, a la clase que íbamos a estar más tiempo en ella. Nos sentaron por orden de lista y Laura y yo íbamos al lado pero Laura era de las primeras en la lista, nosotras estábamos justamente en medio de ella.
Salimos por la puerta principal y me fui con Luisa dirección a mi casa ya que vivíamos prácticamente al lado.
ESTÁS LEYENDO
Soy yo
Teen FictionHera lo tenia todo a su familia, sus amigos... La vida le trataba bien y se sentía cómoda en ella. Tenía amigas de verdad que la querían y familia que la adoraban, no necesitaba más. La perdida de sus familiares hacen que su ansiedad y sus problema...