Gym || Joerick || ADAPTACIÓN

7.-

—Deberíamos prepararnos, Erick llegará en cualquier momento —aconseja Chris.

—¿Erick? —pregunto—. Me suena familiar.

—Es el nuevo vecino, recién se inscribió a la escuela en la que trabajas —me informa cuando conecta el micrófono—. Pero no creemos que juegue basketball en absoluto —ríe un poco.

Santa mierda.

Corro arriba y me asomo por la ventana, viendo a Erick cruzar la calle con unos jeans ajustados claros y una mochila rosa pastel.

—Me lleva la...

—¡Joel! —grita Chris a mis espaldas.

—¡Qué? —grito volteándome.

—Oye tranquilo, ¿qué tienes?

Estaba por responder cuando el sonido del timbre suena y Zabdiel camina hacia la puerta con una sonrisa en el rostro.

—¡Hey, Erick! Pasa —dice una vez que abre la puerta—. ¿Ves Joel? No tardo mucho en abrir la puerta.

El pelinegro entra tímido tomando las correas de su mochila y balanceándose sobre sus talones.

—Tocaremos en el sótano Erick, ¿quieres un poco de licuado?

Erick ríe un poco y finalmente levanta la mirada, viendo a todos en la habitación hasta llegar a mí, donde instantáneamente borra su sonrisa.

—E-Eh... No quiero molestar —dice volviendo su vista a Chris.

—Ni lo digas, pequeñín. Ven, vamos.

Mueve la cabeza en dirección al sótano y Erick pasa a un lado mío con la cabeza agachada y mordiéndose el labio.

Inhalo profundo y aprieto los puños cuando veo a Zabdiel mirarme con una sonrisa burlona.

—¿Es el mismo chico de la escuela?

Asiento con la cabeza.

—No, Zabdiel, no aceptaré estar aquí con él.

—Basta, Joel. Me estoy hartando —quita su sonrisa y me mira enojado—. Me importa una mierda tu homofobia, es una persona.

—¿Si quiera lo conoces?

—¿Tú sí?

—No, y no quiero hacerlo. Está enfermo.

—¡Deja de hablar así!

—¡No quiero pelear!

—¡Pues lárgate, mierda! —grita abriendo la puerta de un golpe.

—¿Qué?

—Que te vayas a la mierda, Joel —aprieta sus puños y se acerca a mí.

—¿En serio vas a preferir a ese niñato antes que a tu amigo de la infancia? —pregunto.

—No, Joel. No es por Erick, ¿qué acaso crees que no lastimas a Christopher? Es mi mejor amigo, incluso sobre pasándote a ti. Es mi amigo al igual que tú, pero no dejaré que lo lastimes.

—A él no le estoy haciendo nada —respondo molesto.

—¿Qué carajos, Joel? ¿Crees que no escucha nuestra conversación justo ahora? Sólo nos separan unas escaleras.

—Sabe que a él lo soporto.

—¡Pero no se trata de él! ¡Se trata de que no puedes querer a un gay y odiar a otro, suena racista!

Volteo a atrás, viendo a Erick y Christopher observándome, Chris con decepción y Erick con miedo y tristeza.

Le dedico una sonrisa burlona a Erick y luego me río un poco para pasar al lado de Zabdiel, golpeándolo con el hombro y salir de la casa azotando la puerta.

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Voten y comenten, que cambiaré los horarios y días de actualización, uwu.

—Gabbb.