Siempre seremos tu y yo

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El maestro lan luego de ver a su sobrino mayor irse con la joven, se quedó en la sala ancestral meditando todo lo sucedido, paso alrededor de media hora, luego soltando un pesado suspiro, decidió ir a la enfermería el tenía que hablar con wangji, para saber lo que realmente paso, confiaba en su sobrino, pero lo que la joven le había dicho tal ves tenía un poco de sentido, tal ves se apresuró a dar su veredicto, tal ves si debía hacerle unos exámenes a la joven para estar seguro, pero ya estaba hecho, probablemente Mai ya estuviera fuera de Gusu ahora, sin más siguió caminando a la enfermería. Ya llegando ahy, las curanderas y enfermeras le recibieron asiendo una reverencia, - maestro lan que desea- pregunto una mujer algo mayor, lan qiren le respondió el saludó, - donde se encuentra wangji- dijo el haciendo sorprender un poco a las mujeres, - perdón maestro pero hanguang-jun​ no está aquí- dijo la misma mujer haciendo que qiren pusiera un rostro sorprendio, - a que se refiere, wangji no se encuentra aquí?- termino diciendo lan qiren a las señoras, a los cuales estás solo negaron, - zewu-jun como ase una hora y media atrás vino aquí y pidió que dos de nuestras compañeras fueran con el- dijo una joven no tan mayor como las otras, - entonces wangji está en el jingshi- dijo qiren en voz baja para a si mismo​ e imperceptible para las mujeres, sin más les hiso una reverencia y se marchó dejando a las jóvenes detrás de él, - por que llevaste a wangji a su habitación, no esta más cuidado en la enfermería- termino diciendo lan qiren para sí mismo nuevamente mientras caminaba con paso algo rápido a donde estaba el jingshi.

Mientras tanto en el hangshi las enfermeras cumplían fiel mente la orden de zewu-jun, cuando él se marcho de hay, una mujer se acercó a la pequeña mesa que tenía una tetera con agua, sacando unas vendas de una bolsa blanca que carga consigo, luego las humedeció y la llevo a la frente de hanguang-jun limpiando las gotas de sudor que parecían pequeñas perlas que brillaba en su frente, mientras que la segunda señora, saco el brazo de hanguang-jun de el fudon que lo cubrirá y levantó la manga para dejarlo hasta su dobles del codo, ella también traía consigo una bolsa blanca y de ahy saco una inyección vacía, dió pequeños golpes en donde pasaba la vena principal del brazo y cuando está se hiso visible clavo muy despacio la aguja para no hacerle daño y empezó a sacar una muestra de sangre, ya terminando de hacer eso, coloco un pedazo de algodón de donde extrajo la aguja y la vendo para que no saliera sangre, cuando iba a cubrir el brazo de hanguang-jun, tan concentrada estaba en su trabajo antes que no pudo ver como en el brazo y en la muñeca tenía unas marcas rojas, en el brazo parecía unas marcas de color morado oscuro pero eran muy pequeñas para decir que eran golpes y también parecían que alrededor de estas avían marcas de dientes, pensó para ella que eso sería muy raro pero luego dirigió su vista a las que tenía en la muñeca, eran unas marcar de color rojo que claramente se hechavan de ver como si el hubiera estado atado, su compañera tambien lo noto, - que creé que le allá pasado- dijo la mujer a su mayor, lo cual está solo negó y tapo nuevamente el brazo de hanguang-jun y lo cubrió con el fudon nuevamente, - eso no es de nuestra incumbencia, solo concentremonos en lo que nos pidieron- termino diciendo la mujer mayor poniéndose de pie y guardando la inyección con la muestra de sangre en su bolsa blanca, - a donde va?- pregunto la otra mujer al ver que su mayor se dirigía a la puerta, - tengo que llevar la muestra de sangre a la enfermería, para hacerle unos exámenes y asi tener un resultado cuando zewu-jun venga, yo la llevaré y también la haré, tu quédate y cuida de el segundo maestro, no dejes que nadie entre sin el permiso de zewu-jun sin importar quien- termnino diciendo la mujer de avansada edad mientras salía y cerraba la puerta detrás de si. La otra mujer solo asintió, y continuo con el cuidado de él segundo jade.