Ambitious || KookMin

6. Oportunidad

“Nos desgarramos
Encadenamos nuestros corazones en vano
Saltamos sin habernos preguntado por qué”

Wrecking Ball – Miley Cyrus

Cuando Jimin había ingresado a la mansión de los Jeon, quedó sorprendido ante lo lujosa, hermosa y espaciosa que era, más que la de su amiga Joohyun. Esa era la mansión de sus sueños.

No obstante, su deslumbramiento desapareció cuando Jeon Jungkook propuso pagar sus estudios en la academia de su familia.

—¿Qué? —preguntó con incredulidad y parpadeó tres veces.

—Sí, Jimin. Si aceptas, tendrás la oportunidad de estudiar en la academia artística más aclamada de Seúl y tendrías tu carrera asegurada.

—¿A cambio de qué? —interrogó, mirándole fijamente—. No tengo nada que ofrecerle, señor Jeon. ¿Por qué a mí me tiene que ofrecer ese trato?

—Como te habrás dado cuenta, admiro tu talento. Créeme, eres el más talentoso que conozco —respondió con sinceridad—. Tienes todo para ser el mejor bailarín de danza contemporánea.

—Sí, pero lo que no tengo es dinero —refutó—. Necesito pensarlo.

Jungkook sonrió, comprendiendo la situación.

—No hay problema, Jimin. Solamente no tardes tanto, porque ya se acerca tu graduación y tu futuro está en tus manos.

—Más en sus manos, querrá decir —le corrigió.

Jungkook suspiró.

—Sí, pero es tu decisión si aceptas o no mi propuesta. No hablemos más de eso —cambió de tema—. ¿Vamos a comer?

Jimin sonrió y asintió con ternura.

...

Mientras almorzaron, habían conversado sobre otros temas. Jungkook comenzó a adorar más la sonrisa de Jimin. Esa sonrisa de media luna que hacía que sus mejillas se abultaran y sus párpados se cerraran.

Cuando terminaron de almorzar, Jungkook le invitó a pasear por el jardín, y Jimin aceptó con emoción. Amó cada flor y planta que observó, pero su atención la captaron las rosas de color rosado.

—¿Te gustan las rosas? —preguntó Jungkook.

Jimin acarició la rosa más cercana y la olió. Su aroma era suave y sutil.

—Sí, pero mi debilidad son las rosas de color rosado, porque ese color es mi favorito —contó, sonriendo.

—¿Por eso tu color de cabello? —interrogó con curiosidad.

—Sí, me encanta el color rosado y todo lo dulce.

Jungkook rió con suavidad, enternecido.

—Mientras más te conozco, estoy descubriendo que detrás de tu inteligencia y talento, existe ternura —confesó.

Jimin sintió que sus mejillas se llenaron de sangre.

—Gracias, señor Jeon.

—Jimin, volviendo al tema importante....

Jimin apartó su atención de las rosas y miró a Jungkook.

—No me respondió a cambio de qué —se apresuró en decir.

Jungkook suspiró.

—Mi principal objetivo es que la academia tenga la posibilidad de abrir becas para las personas con escasos recursos, pero aún no puedo cumplir eso y el proceso sería larguísimo. Así que, te ayudaré a cambio de tu talento, porque no me pagarás con dinero, sino con esfuerzo, entrega y pasión en el baile. Si tú cumples eso, tu futuro estará asegurado. No tienes dinero, pero sí tienes ambición de salir adelante. Eso es lo que admiro de ti -disuadió.