Ambitious || KookMin

10. Consuelo

“Ser o no ser, esa es la cuestión”

Hamlet – William Shakespeare

El mal clima se había calmado, por lo que Joohyun llevaría a Jimin de vuelta a su casa. Mientras Jimin se cambiaba de ropa y se alistaba, Jungkook se encontraba leyendo en su despacho.

—¿Cómo está Jimin? —preguntó Jungkook cuando Joohyun ingresó a su despacho.

—Está muy destrozado y aturdido —le respondió ella, triste—. Ya se está alistando para que lo lleve a su casa. Su padre y su tía están muy preocupados por él, pero ya les avisé que está conmigo. Gracias por haberlo atendido bien.

—No es nada, Joohyun. Yo me sentí muy sorprendido al verlo en media calle y lluvia, pero me asusté cuando vi su mirada vacía y muerta, para luego desmayarse.

—Me alegro que tú hayas estado en ese momento, porque le podría haber pasado algo peor. ¿No crees que sea coincidencia?

Jungkook negó con la cabeza.

—¿Qué cosas piensas? —rió con nerviosísimo.

Joohyun le miró con suspicacia. Había algo extraño en su primo, pero no sería impertinente en ese momento. Sabía que detrás de esa preocupación, había algo más que eso, porque no era normal la mirada que le otorgaba su primo a Jimin. ¿Quizás era posible enamoramiento?

—¿Seokjin dónde está? —cambió de tema—. Al ver a Jimin tan destrozado, seguro recordó a sus papás.

—Sí, pero después hablaré con él. Ahora está en su habitación con Yoonji.

Joohyun se mostró interesada.

—¿Min Yoonji? Creo que la vi hoy —comentó.

—Al parecer, ella tampoco se encuentra bien, porque la vi entrar a la habitación de mi hermano. No se veía nada bien, estaba llorando —dijo Jungkook.

—No entiendo qué clase de relación llevan ellos —cuestionó con curiosidad, cruzando los brazos.

—Yo tampoco, pero parece que Seokjin se está enamorando de ella.

Joohyun suspiró.

—Al menos, ella no es la misma mierda que es su hermano Yoongi —musitó, enfadada—. No entiendo cómo Yoonji puede ser su melliza.

—¿Por qué dices eso? —interrogó, confundido.

—Min Yoongi se cree la gran cosa por venir de familia de alcurnia. Se burló de Jimin y se siente con el derecho de humillarlo, nada más por venir de familia humilde y pobre —refunfuñó—. Mira que tú y yo venimos de familias de alcurnia y no somos así.

—Sea como sea, Yoongi no tiene el derecho de humillar a Jimin —argumentó—. Odio a esa clase de personas, pero me alegro que Yoonji no sea así, porque sino yo no estaría de acuerdo que ella se relacione con mi hermano.

Joohyun sonrió, enternecida.

—Admiro como eres. ¿Sabes que te quiero mucho?

Jungkook le devolvió la sonrisa.

—Sí, lo sé, Joohyun.

Ambos se acercaron para abrazarse con cariño. Segundos después se separaron al ser interrumpidos por los toques de la puerta por parte de una sirvienta.

—Adelante —dijo Jungkook.

La empleada ingresó e hizo una reverencia.

—Señor Jeon, le llegó su pedido —anunció, extendiéndole una bolsa de color rosado.