Ambitious || KookMin

23. Boda

“Yo te creo todo y tú no me das nada
Que si sigo tu camino, llegaré hasta el cielo
Tú me mientes en la cara y yo me vuelvo ciego
Yo me trago tus palabras, tú juegas un juego
Y me brilla el mundo cuando dices luego”

Mientes Tan Bien – Sin Bandera

Mientras Jimin y Taehyung se sumían en la pasión de sus cuerpos y planeaban su escape, Joohyun y Jungkook se encontraban preparando los últimos detalles para el regalo de bodas que le daría Jungkook a Jimin.

Volvieron a la mansión de los Jeon, alrededor de las nueve de la noche. Jungkook se dirigió a su habitación y Joohyun quiso ir a la habitación de Jimin para reunirse con él, pero se encontró con Seokjin en medio pasillo.

—¿Buscas al arribista de Jimin? —le preguntó, burlón.

Joohyun puso los ojos en blanco, asqueada del comportamiento de Seokjin.

—Si te dieras la oportunidad de conocer a Jimin, te darías cuenta que es muy diferente a lo que tú crees.

—No, Joohyun. No necesito conocerlo, porque con tan solo ver su mirada, me doy cuenta qué tipo de persona es Jimin. Hablando de él, no sé el porqué, pero hace pocas horas se fue de acá sin decírselo a nadie —informó.

—¿Qué?

—Sí, se escapó.

Joohyun sintió ese mal presentimiento en su corazón, advirtiéndole desconfiar de Jimin, pero no lo haría porque estaba tan manipulada por él. Confundió ese presentimiento por preocupación, preguntándose a dónde había ido Jimin.

—¿A dónde pudo haber ido a estas horas? —preguntó, buscando su celular en su cartera.

—Quizás cambió de opinión y ya no quiere casarse con mi hermano.

Joohyun le fulminó con la mirada.

—Cállate, Seokjin.

...

Jimin reía ante los besos depositados en su cuello, provocándole placer. Adoraba cuando las manos rudas de Taehyung acariciaban su trasero, haciéndole gemir sin control.

Ya tenían todo planeado para su escape. Jimin volvería a la mansión de los Jeon para no levantar sospechas y en la mañana escaparía como pudiese. Mientras tanto, Taehyung se encargaría de ir a comprar los boletos de avión para el lugar de escapatoria. Iban a irse a la ciudad natal de Taehyung, Daegu.

El momento pasional fue interrumpido por el sonido del celular de Jimin. Taehyung se separó de Jimin para dejarle contestar el celular, le observó ponerse de pie y admiró su desnudez sensual. Jimin buscó su ropa tirada en el piso, alzó su pantalón y sacó su celular. Al ver la llamada entrante, su expresión se deformó en susto.

—Es Joohyun —le informó.

Taehyung abrió sus ojos como platos.

—¡Contéstale, sino va a sospechar!

Jimin tragó saliva y miró su celular. Deslizó su dedo sobre la pantalla y se llevó el celular a su oreja.

—Hola, Joohyun —respondió.

—Minnie, ¿dónde estás? —preguntó ella, preocupada—. Acabo de llegar a la mansión, pero no te encuentro. Faltan pocas horas para tu boda.

Jimin notó la suspicacia temerosa en su voz.

—No te preocupes, Joohyun. Estoy en casa de mi papá —mintió sin vacilaciones—. No pude con tanta felicidad y me puse nervioso por la boda, por eso escapé a casa de mi papá.