CAPITULO 70 - El Fin

188 4 1
                                    

Panteón de San Francisco de los Reyes

Una pequeña mano se estrecha al colocar una rosa blanca sobre la lápida de una tumba.

Amado esposo, hijo y padre. Decía inscrito.

"Pa-pa." pronunció una pequeña niña de casi tres años, de pelo oscuro y ojos claros.

"Si, nuestro papá." dijo Sebastian ya a sus catorce años pasando sus manos por el nombre Gustavo N. Olivier. "El mejor..." él sonrió tristemente al recordarlo.

"Te extraño mucho papá. Te voy a extrañar siempre..."

*

Sobre las tierras de La Oliviera vuela una pequeña avioneta de pasajeros que a poca distancia se preparaba para aterrizar sobre la pista. Al tocar tierra la aeronave empieza a perder velocidad hasta llegar a una completa parada deteniéndose a unos pies de una camioneta estacionada.

Los primeros en salir al abrirse la puerta fueron los dos pequeños gemelos, Aaron y Andrés corriendo hacia el auto.

"Cuidado mi vida." les decía Aurora desde el interior.

"Estos chamacos, están cada vez más grandes." dice Vicente riéndose, llegando ayudar a Aurora. "Bienvenida señora."

"Qué tal Vicente." ella lo recibió con una gran sonrisa.

"Los estaban esperando, algo impacientes." dijo este dirigiéndose con un gesto hacia sus espaldas.

En ese instante ante los ojos de Aurora el tiempo retrocedió tres años atrás. Se recuerda parada nuevamente en ese frío pasillo del dispensario. Rodeada de gente, pero a la vez tan sola. Solo la voz de Andrés la acompañaba mientras miles de los bellos momentos vividos volvían a revivir en su mente, uno de ellos aquella noche en la que se había aparecido montado sobre un árbol con la invitación a la feria del pueblo vecino. Bromeando con ella de su telepatía...

Ella rogaba con todas sus fuerzas que sus pensamientos llegarán a los de él. Pidiéndole que no la abandonara... >>>

Aurora volvió hacia el presente enfocando su mirada sobre los niños que acaparaban los brazos de Andrés felices de verlo.

"Me extrañaron?" les pregunto él jugando con ellos.

"Si." le respondió uno entre risas.

"¡Mucho!" dijo el otro.

"Mucho? No." Andrés los alzó al aire. "No más que yo."

"Y ami?" Aurora se detuvo a unos pasos de ellos despojándose de sus lentes obscuros, deslizando una dulce sonrisa sobre sus labios. Sus ojos clavados sobre Andrés. "Me extrañaste?"

*

Casona de hacienda La Oliviera...

"Esto acomódalo aquí." le instruyó Martina a otra de las sirvientas. Terminando de organizar el comedor para la cena de esa noche.

"Martina." la llama Victoria entrando. "Martina."

"Que pasa?"

"Fui a la habitación de Pau y no está."

"La vi con Sebastian."

"Ahora, donde podrían verse metido?"

"Tranquila. Han de andar por ahí... ya conoces a tu hijo."

"¡Mamá!" grito la pequeña Paulina apareciendo por detrás de ellas de la mano de Sebastian.

"¿Se puede saber dónde estaban metidos?" preguntó Victoria con alivio recibiendo a la pequeña en sus brazos con un tierno beso.

ACUERDATE DE MIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora