Capítulo 4

5.7K 423 62
                                    

Tenía la idea de publicar cada ocho días, tengo varios libros que debo de seguir pero este libro... vaya los amo me sorprende de ver los 1.04 K de leídas que tiene con solo 3 capítulos. Los amo de verdad por hacer esto.

Así que aquí les traigo otro capítulo porque se los ganaron.

*´¯'*.¸¸.*´¯'* °•°•°•°•°•°•° *´¯'*.¸¸.*´¯'*

Sentía que me iba a ir de culo contra el suelo y eso no iba hacer posible por la simple razón de donde me encontraba, además que no iba hacer el ridículo frente a las personas que se suponía que seríamos manos derecha en todo lo que nos respecta y odio eso porque no me agradaba la idea de mantaner una relación con ese chico de cabello negro y ojos azules grisáceos con una sonrisa burlona sobre sus labios carnosos.

Esto era un desastre.

Antes cuando conocí a Easton Collins imaginé que era el dueño de la compañía del que pensé que era su padre el señor Ethan Collins, un hombre de no solo atractivo sino que también rico y poderoso en muchos aspectos. Ahora me daba cuenta que ese rubio de cabello dorado solo era el sobrino de este y primo del hombre que había derramado su café esa mañana sobre mi pobre falda. Easton trabajaba para la compañía de su abuelo Carlos Montesco, no fue ese día a la reunión a representar a Home Collins y odió por sentirme más estúpida y llena de ira solo por el simple hecho que ese hombre atractivo se presentó como si fuera la primera vez que nos habíamos visto y eso para mi alteraba mi sangre.

— ¿Segura qué estas bien?— me preguntó James por milésima vez.

— Si James estoy estupenda— mentí bebiendo de mi copa.— ire a buscar a mi familia, nos vemos luego.

Besé su mejilla y solo escuche un "esta bien" salir de sus labios cuando empecé a caminar entre la multitud. Necesita enfocarme, no era de las chicas que se alteraban por todo. Bueno mentí. Si nada sale como yo quiero me molesta y me estresa y para desahogarme necesitaba mi almohada y no para llorar sino para gritar.

Me detuve cuando vi a mi padre con mi madre conversar con un hombre mayor el cuál no recordaba en estos momentos su nombre, pero sabía que era uno de los empresarios más importantes del lugar y aunque ya estaba retirado supongo que solo estana de vicita.

— Me puedo— no mire a la chica junto a mi — ya viste lo sexy que es el nuevo heredero.

— Darla — advertí porque sabía de quien me estaba hablando.

— Pensé que era el único hombre más sexy en toda mi vida... pero su primo ¡Dios! Esta que arde ¿tendrá novia?

— Podrías dejar de hablar de los Collins — musite tratando de no quebrar la copa en mis manos.

— Lo lamento ¿ok?— se rindió — no tengo la culpa que esos chicos serán ridículamente sexys.

— Lo sé, no estoy ciega se que soy todos unos adonis; pero en este lo menos que deseó es de hablar de Nathan o su empresa.

Sus ojos negros miraron algo detrás de mi y apretó sus labios.

— Eh... creo que lo tendré que hacer.

— Darla— amanece.

— Él te está mirando — confundida a lo que se referia la chica me gire buscándolo.

Nathan estaba al otro lado de la pista de baile con sus ojos azules grisáceos sobre mí con una mano en su bolsillo y la otra sostenía la copa que tenía en sus labios. En su mirada notaba la diversión, suponía que todo esto le agradaba porque sabía que en estos momentos no estaba feliz de que fuéramos "manos derechas". Juntó a él estaba un chico rubio rizado de traje negro quién conversaba con Easton, ese chico de traje negro era al parecer de la misma edad que los dos primos Collins. Ese rubio dejo de conversar y reír con Easton para decirle algo a Nathan el cuál no alejaba su mirada de la mía y quería que lo dejara de hacer. Nathan le respondió dejando de verme, el chico rubio levantó la mirada conectando su mirada azul sobre nosotras.

Herederos ©✔[Heir#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora