Herederos ©✔[Heir#2]

Capítulo 6

Pase mis manos por mi rostro dejando de teclear en mi laptop. Necesitaba una taza de cafe negro con urgencia o el cansancio y la frustración me iban a matar e iba a caer al suelo sin poderme levantar. Tenía días geniales, pero ahora todo se me estaba llendo de lad manos y estos eran los días duros que no deseaba tener nunca. Me giré sobre mi silla quedando el escritorio a mis espaldas y la gran pared con el cristal que me mostraba la ciudad de frente. Tome una bocanada de aire y me levante colocando mi mano sobre el frio cristal y tratando de aliviar un poco mi cuerpo tenso, mire hacía abajo los autos que se movían de un lugar a otro. Me encaltaban las alturas y ya estaba deseando tener mis vacaciones para subir a un avión y caer de el a la tierra con un paracaídas ¿no es hermoso?

— Pasé — me volteé mirando como una chica rubia muy hermosa entraba a mi habitación.

Sus ojos azules estaban detrás de unos lentes que le quedaban perfectos, la chica era máximo de mi edad. Vestia una falta negra larga, unos zapatos de tacones finos del mismo color y una blusa salmón metida entre su falda. Caminé de nuevo a mi escritorio quedándome de pie junto a él.

— Mucho gusto Señorita Hudson — me extendió la mano y le respondí — vengo de parte de la compañía Collins, mi nombre es Eva Martínez y me encantaría conversar algunos detalles con ustedes.

La chica se acomodó los lentes y me mostró su linda dentadura, eso me hizo pensar que era amable lo cual era lo que necesitaba, un poco de relajación.

— Claro — la invité a sentarse en el sofa y lo hice delante de ella — ¿que desea saber?

— Como sabe, las nuevas inversiones de tecnología a esta empresa deben ser registradas por un inventario y obvio soy la encargada de verificar ese inventario y me encantaría revisarlo ahora.

— Oh, claro — me levanté del asiento y caminé a mi escritorio — es un gusto trabajar con ustedes.

— Todos dicen eso, pero tranquila conmigo no tiene que tener tanta formalidad. — la mire— se que como hija del jefe debe mantener una actitud formal, pero conmigo no tiene que fingir y halagar a la empresa en la que trabajo para quedar bien conmigo.

La chica me miró, acomodó sus lentes nuevamente sujetando su libreta en sus brazos. Deje de verla para concentrarme e imprimi el documento colocándome sobre mis pies para darle los papeles en la mano.

— Muchas gracias — guardo las hojas en el folder en sus manos — que tenga un hermoso día señorita.

— Igualmente señorita Martínez.

La rubia solo asintió y se giró para salir de mi oficina,  me gire para volver a lo mio cuando escuché algo a mi espalda. Mi novio estaba frente a la chica la cual al parecer hizo el ademán de salir pero esté se lo impidió.

— Lo lamento no quise...— se disculpó el chico.

— Descuida, entiendo — le extendió la mano — con su permiso me retiró.

La chica dandome una rapida mirada, salió después de que James le diera espacio. Extraña de la formalidad de esa chica, me senté en mi silla para volver con mi trabajo.

— ¿Quién era?— preguntó tomando mi silla y girandola quedando frente de mi.

— Venía de Homes Collins — sus manos subieron por mis piernas dejandolas hasta mi entrepierna mandano escalones a todo mi cuerpo, se inclinó y lentamente acercó sus labios besandolos con suma delicadeza. — debo trabajar— gemi en sus labios.

— Lo sé,  yo también — su mano todo mi sexo por encima de mi pantalón soltando mi garganta un gruñido — pero tu cuerpo no quiere trabajar.