Herederos ©✔[Heir#2]

Capítulo 11

Tuve la intención de girarme y entrar al baño para desaparecer de su vista y ese incómodo suceso pero no encontraba la razón para hacer eso cuando yo no tenía nada del porque ocultarme o huir de su presencia como si él tuviera sangre azul o verde. Así que me mantuve firme en mi lugar sin despegar mi vista de sus iris los cuales no parecían sorprendidos de verme en el mismo lugar que él.

En realidad ninguno parecía sorprendido de vernos al comparación de nosotras quienes no esperábamos verlos ahí.

— Hola Darla— la chica se puso roja e inmóvil viendo a su príncipe azul quien esperaba un saludo de su parte.

— H-Hola Owen.— le di un codazo sin que ellos se dieran cuenta para que reaccionará.—: ¿qué te trae por aquí?

Tragame tierra

El cerebro de esta pobre chica de verdad estaba afectado con solo la presencia del chico el cual le gusta mucho, y como su mejor amiga debía evitar que cometiera o dijera alguna otra pregunta estúpida.

— ¿Qué película vieron?— les pregunté salvado su trasero. Darla me miró de reojo y suponía que se había dado cuenta de su tonta pregunta.

— Alguien nos torturó con una película romántica — dijo el rubio mirando a la castaña.

Margaret se encogió de hombros — Ambos necesitan una novia y que mejor una para película romántica para animarlos ¿no creen chicas?— nos miraba con esa sonrisa divertida en sus labios, eso hizo que la chica a mi lado se supiera más roja y hasta sudara frio de su indirecta bien directa.

Nathan bufó — Yo no necesito a una novia, estoy bien soltero.

— Soltero mi abuela — se quejó la castaña— sabes que eso no es así, en algún momento bajarás la guardia y querrás tener a esa chica que este solamente para ti, la cual desearás el resto de tus días.

— Te acusare con la tía Lily— se burlo Nathan y cruzó su brazo por el hombro de su prima.— y quizás algún día llegué, pero por mientras aprovecharé mis soltería.

— Algo me dice que no te durará mucho.

Owen negó riendo por el tema de conversación de esos dos, la cual me sentía incómoda ya que no sabía que  carajo hacía yo en el mismo lugar que ellos escuchando una conversación que  no me beneficiaba en nada.

— Es hora de irnos — tome el brazo de mi amiga— fue un gusto volverlos a ver.

No espere que dijeran nada y arrastre a la castaña de mi mejor amiga a mi lado para salir de ese lugar a uno donde no me sintiera incómoda con la presencia de ese sujeto que no me agradaba y que a la fuerza debía trabajar con el solo por la compañía de nuestros padres.

Darla se quejó por la manera en la que la hale, pero era lo mejor sabiando que la chica no diría nada aunque su crush estuviera frente de ella.

Mientras íbamos en el auto varias veces se llamo estúpida por la pregunta que le hizo y también al quedarse inmóvil. Me quedé un poco pensativa al darme cuenta de que todo este tiempo pensé que Margaret era la novia de Nathan y me sorprendí a mi misma de que fallará en algo como eso ya que aunque no era par estudiar a las personas lo imaginé ese día en el restaurante por la manera en la reía con ella. Sin embargo, no era perfecta y con él todo era equivocación pues no debería en un principio cruzarme con él en la cafetería ese día y menos trabajar juntos.

Evité pensar en el y concentrarme en mi vida, estacione el auto frente al hotel donde mi amiga vivía mirándo la hora en el auto esperando que la chica se bajará.

— Vendrás — me preguntó quitándose el cinturón de seguridad — es temprano, además sabes que puedes quedarte a dormir.

Eso era verdad, hasta tenía ropa en su apartamento, asentí en realidad no tenía sueño y tampoco quería volver a la casa tan temprano. Los trabajadores de ese hotel me saludaron cuando entré, ya me conocían desde hace mucho tiempo y tenía mucha confianza con ellos.