Herederos ©✔[Heir#2]

Capítulo 19

Después de la deliciosa cena junto a la familia de James quienes son una familia fabulosa, salí a caminar un rato por el hermoso jardín trasero con el rubio a mi lado quién su mirada verdes estaba sobre el cielo admirando las hermosas estrellas sobre nosotros. Reí admirando su belleza, la mirada de niño que tenía como también lo dulce y delicado que era para todo.

James Ferguson desde que lo había conocido fue un gran amigo que en poco tiempo se ganó mi corazón, este chico era dulce y delicado pero cuando pensé que ya lo conocía de la nada me muestra una faceta que no conocía y menos la información de su familia. No me sentía enojada o molesta porque tampoco era necesario saber toda la información de su personalidad o un mapa sobre su familia porque para eso estamos juntos para conocernos y con James presentía que nada me faltaría.

Sin embargo, teníamos metas diferentes pues yo quería viajar al rededor del mundo y Ferguson tenía su vida en la empresa y nunca le pediría hacer algo que no quería. Pero faltaba mucho tiempo para que yo pudiera irme y salir de todo esto y en ese tiempo lo aprovecharía para estar con él.

Como dije antes era una chica que no conocía mucho sobre el amor, no tuve muchas relaciones amorosas cuando estuve en la secundaria o la universidad, sin embargo, con James estaba aprendiendo de todo. No era una chica celosa, la verdad no sabía que era eso y nunca esperaba que sucediera porque he visto a muchos hacer locuras cuando sienten esa inseguridad o ira por adentro.

— Gracias por venir esta noche mi hermana esta muy feliz de conocerte al fin.

— También yo, se parece mucho a tu madre — admiti y el solo asintió.

— Pues a cambiado mucho. Cuando llegó a casa era su bolsa de boxeo.

— Y aún lo eres hermanito — Margo llegó hasta nosotros con una sonrisa viva en sus labios — no puedo creer que sigas vivo despues de todas las travesuras que te hice.

— ¿Vienes a fastidiar de nuevo?— preguntó James y la chica rodó los ojos.

— Solo vine a despedirme de Morgan, necesito ir a descansar un poco — me dio un beso en la mejilla con un pequeño abrazo— nos vemos otro día, ya quiero que me cuentes todo de ti.

Margo le sacó la lengua a su hermano y regresó de nuevo a la casa. Reí por eso la verdad la chica era muy amigable y hasta parecía ser hija legítima de la señora Ferguson. James me llevo a la pequeña fuente que se encontraba al final del sendero de rosas amarillas. Me senté al borde de la fuente moviendo el agua con mi mano, mi vellos se erizaron por unos segundos cuando la sentí fría. James se sentó a mi lado y sus ojos verdes con ese brillo me miraron.

— ¿Ocurre algo?— pregunté dejando de mover el agua.

— ¿Quieres quedarte esta noche conmigo?— era una propuesta tentadora— quiero pasar más tiempo contigo Morgan, y podemos ir a la oficina juntos.

Mordí mi labios imaginando todo lo que haría con ese chico pues comprendía que no iba a dormir. Sin darle una respuesta me levante, me senté entre sus piernas y con ambas manos en sus mejillas lo besé. Sus manos subieron por debajo de la tela de mi vestido llegando hasta mis muslos, su lengua se introdujo en mi boca y ambos disfrutábamos de nuestro baile.

— Eso es un sí— inquirió sonriendo en mis labios mientras nos besabamos. Asentí atrayenndolo más a mí.

El sonido de un estupido celular interrumpió nuestro momento, esperé que James lo buscara pero nunca deje de besarlo porque no quería y lo necesitaba de muchas maneras posibles.

— No es el mío — abrí mis ojos, lo dejé de besar y busqué mi celular el cual estaba dentro del bolsillo de mi vestido.

Fruncí mi ceño al ver que era un número desconocido y sin pensarlo corte la llamada porque no me interesaba la persona que no estuviera registrada, además que había arruinado mi momento de lujuria. Lo guarde de nuevo y cuando volví a besar los labios de Ferguson el maldito celular volvió a sonar.