DESCONTROL (BORRADOR)

Capitulo 43

─Tenemos que irnos cuanto antes... ─continua Logan. ─No sabemos que pasará si te encuentra.

El comentario me molesta, me levanto apretando mis puños.

─Aleksei no me haría daño.

─ ¿Por qué estás tan segura?

─ ¡Porque lo sé! No sería capaz de lastimarme.

─No sabes como va a reaccionar ante la noticia de un embarazo, y lo que necesitas es estar en paz. No falta mucho para que te alivies.

Estoy a punto de abrir la boca cuando un rechinido de llantas llama nuestra atención, al mismo tiempo salimos de la habitación, voy camino hacia la ventana y logro ver varias camionetas negras blindadas estacionarse, no tengo nada de qué preocuparme, los guardias lucen familiarizados, así que no corremos peligro.

Pero la tranquilidad se va cuando distingo la Hummer roja de Aleksei, de las camionetas negras se bajan Zack y Simón. En cuanto los guardias se percatan de la presencia de Aleksei se ponen a la defensiva.

─ ¿Por qué están a la defensiva si se supone que es socio de tu padre? ─le pregunto a Logan.

─Porque saben que no tiene que estar aquí, ninguno de ellos. Las camionetas negras son de nosotros, por eso no notaron que se trataba de ellos.

De todas formas, se tiene que enterar, me dirijo hacia la puerta, pero la mano de Logan me lo impide.

─ ¿Qué haces?

─Ir con él, tarde o temprano lo sabrá. ─me zafo de su agarre.

No niego que una parte de mí se siente emocionada por verlo, cuando se baja de la camioneta mi corazón se acelera y una sonrisa involuntaria se apodera de mi rostro.

─No. ─se impone Logan.

─ ¿Disculpa? Ya no hay salida, iré con él. No me hará nada. ─me enojo─ No lo veas como un monstruo.

─Alexandra, él se siente traicionado. ─dice en tono molesto. ─ ¿Piensas que te va a recibir con los brazos abiertos? ¿Cómo si no hubiera pasado nada?

Me quedo en silencio, le hace una seña a Henry que no me había dado cuenta de su presencia.

─Llévatela. ─ordena y siento las manos de mi amigo tomarme por los hombros.

─ ¡No! Logan, por favor... déjame intentarlo. ─acaricio mi vientre. ─Sé que no nos hará daño.

─Es un asesino. ─comenta con incredulidad. ─ ¿Por qué lo defiendes tanto?

Henry me toma bruscamente, mirándome con suplica para que haga caso, niego con ojos llorosos.

─Yo también lo soy. ¿Se te olvidó lo que hice?

─No es lo mismo, no importa que tan buena sea una persona, cuando matan a un ser querido, la mayoría pensamos en vengarnos. ─ayuda a Henry a sacarme por la puerta trasera.

Normalmente podría defenderme y zafarme de ambos, pero con la panza de mi embarazo se me dificultan muchas cosas.

─No tengo justificación...

─Una cosa es matar por venganza. ─sigue de terco. ─ ¿Matar por ambición? ¿Matar por poder? Eso hace una mala persona.

─ ¿Qué me dices de ti? ─suelto con coraje. ─ Vienes de mafiosos, no seas hipócrita.

─Yo no he manchado mis manos de sangre. ─comenta con indiferencia, llevándome a la camioneta que nos espera. ─Algún día me lo agradecerás...