[2] Jugando con su mente

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[Drox Bowers]

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[Drox Bowers]

Jugando con su mente. 

13 de septiembre 2019

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13 de septiembre 2019.

El frío me envuelve, penetrando hasta lo más profundo de mi ser, mientras corro sin aliento por las sombrías profundidades del Hermitage. 

Cada paso resonando en la oscuridad como un eco de mi terror, sintiendo el aliento helado de la muerte acechando tras de mí, una presencia palpable en cada sombra, en cada rincón oscuro de este laberinto de pesadilla.

Parece ser la hora más oscura de una madrugada eterna, donde los árboles se funden con una niebla densa que envuelve todo en un manto de misterio y desasosiego. Aunque conozco este bosque como si fuera una extensión de mi propia piel, siento cómo su abrazo sombrío también me consume, confundiéndome en sus caminos enredados y sus sombras insondables. En este momento, me veo acorralado, sin saber quién o qué me persigue, pero el instinto primal me impulsa a correr sin descanso, sin aliento para hablar ni espacio para pensar, solo avanzando entre la oscuridad y la niebla que amenazan con devorarme por completo.

Atrapado en este siniestro juego, me encuentro acorralado, sin saber si lo que me persigue es una amenaza tangible o la manifestación misma del horror que habita en lo más profundo del bosque prohibido.

Choco contra los árboles musgosos, el impacto tiñe mi chaqueta gris con manchas de humedad y tierra en diferentes lugares. Resbalo por las colinas cubiertas de hojas crujientes, espinas afiladas y flores marchitas, desatando una estampida de pájaros que salen en un frenesí de alas agitadas desde las copas de los árboles, desvaneciéndose en el cielo plomizo. En medio de este caos de naturaleza salvaje, mi presencia parece perturbar el equilibrio delicado del follaje, convirtiéndome en un intruso en su reino sombrío.

Me deslizo por la ladera del cerro, el frío del suelo corta mi espalda como cuchillas afiladas. Intento levantarme, pero mis músculos se niegan a obedecer, como si estuvieran congelados por el pánico que me consume. Mi corazón late desbocado, martillando en mis oídos con una fuerza aterradora.

El miedo de Drox © [✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora