Capítulo 16

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Seungmin llevaba días sin salir con Felix, no lo veía en la escuela, platicaban por mensaje, pero no era lo mismo. El pelirrojo extrañaba ver esa cara angelical que tenía el pecoso.

Decidió invitar al australiano al cine, lo buscó por toda la escuela y a lo lejos lo vio. Con pasos apresurados el menor se acercó, pero antes de llegar con el rubio, vio que alguien lo abrazaba. El coreano se detuvo en medio del pasillo y se escondió en una columna para poder ver quien era.

Veía que era un chico con cabello negro, un poco más bajo, reían, iban juntos abrazados. Cuando el chico giró su rostro vio entonces que era Changbin.

Le dolió demasiado ver eso, se acercó un poco más y escuchó que saldrían a comer.

Los celos, el enojo, la tristeza abundaban por cada parte de su ser. Necesitaba hablar con alguien de lo que sentía, así que tomó el teléfono y marcó a Wonpil, esperando que el castaño estuviera desocupado.

– Hola amigo ¿estas ocupado? – preguntó mientras trataba de contener su voz temblorosa.

– Sabes que siempre te escucharé, mi instinto dice te pasa algo, ven a mi apartamento. – respondió en un tono maternal el mayor.

– Gracias. – el pelirrojo colgó el teléfono y se apresuró a casa de Wonpil, en unos 5 minutos estaba en el lugar, y el castaño ya le estaba esperando en la puerta de su departamento.

– Gracias en serio, necesitaba hablar con alguien. – dijo el menor apenas llegó, abrazando a su contrario.

– Está bien, cuéntame todo lo que pasa. – lo invitó a pasar, ambos se sentaron en un gran y cómodo sillón que tenía el mayor.

– Bien, hace mucho que no hablo con Felix, pensé en invitarlo hoy al cine, pero, cuando lo vi en el pasillo llegó Changbin lo abrazó, lo invitó a comer y me sentí muy mal cuando vi eso. – paso sus manos por su cabellera, en signo de desesperación.

– Ya veo ¿algo más que quieras agregar? – preguntó su contrario mientras acomodaba sus gafas.

– Pues sentía algo en sus miradas, como si se vieran con amor, no sé, creo ya me volví loco. – el menor se tumbó en el sillón y puso un cojín sobre su rostro.

– Min, esos son celos. – el castaño arrebató salvajemente el cojín.

– ¿Por qué estaría celoso de ese tipo? – Seungmin recalcó la última palabra.

– Quizá porque pasa mucho tiempo con Felix. No sé exactamente, los celos son algo extraño del ser humano. Eso y... – el mayor se vio callado al temer hablar de más.

– Sé que hablas del pasado y todo lo ocurrido con Seo – se incorporó, sentándose como en un inicio – ya no sé qué hacer con lo que siento.

– Deberías hablar con Felix.

– ¿Crees sea prudente marcarle por teléfono?

– Claro, él no sabe que tú en realidad sabes que está con Changbin, es como si le hablaras en un día cualquiera.

– Está bien. – el pelirrojo saco su teléfono, marcó el número de Felix y lo puso en altavoz.

– Bueno. – respondió la siempre fuerte voz del mayor.

– Hola Lixie ¿Cómo estás? Hace mucho que no te veía, quería ver si podríamos vernos.

– Hola, estoy un poco ocupado con tramites de la escuela, te marco más tarde, adiós. – Antes de poder decir nada más, Felix colgó y el menor solo veía la pantalla de su celular.

– Tranquilo Seungmin, es de mala educación hablar por teléfono cuando estas con alguien, no es nada contra ti.

– Pues sí, pero mintió diciendo que hacía. – contesto molesto el pelirrojo.

– Tranquilo Minnie – el mayor abrazó fuertemente a su contrario – dicen que las penas con pan son buenas ¿vamos a comer? Hice pollo.

Ambos amigos fueron al comedor y degustaron del delicioso pollo a la plancha y las verduras al vapor cocinadas por las expertas manos de Wonpil.

Una vez que acabaron de comer, el menor estaba por irse, hasta que escuchó voces en el pasillo, los dos se acercaron a la puerta para escuchar.

– Muchas gracias por salir conmigo hoy Changbin.

– De nada Felix, nos vemos mañana, cuídate.

Pronto se escuchó silencio y el sonido de la puerta mientras se cerraba.

– ¿Crees es prudente marcarle ahora? – le preguntó el pelirrojo a su contrario.

– Yo digo que no, él dijo te marcaba más tarde.

Pasó un buen rato y el pecoso no devolvía la llamada.

– Creo no me volverá a llamar. – dijo decepcionado el menor.

– Ve y tócale. – el mayor abrió la puerta alentando a su contrario quien le hizo caso. Fue a su puerta y tocó, después de un rato abrió la puerta.

– Felix, me tenías preocupado, no devolvías la llamada y no supe que había pasado, decidí venir a ver si estabas bien. – el menor mintió, no orgulloso de eso.

– Seungmin, está todo bien, solo lo olvide por completo, perdóname, estaba muy ocupado con los tramites. – al pelirrojo le dolía demasiado ver como recibía tantas mentiras.

– Yo solo quería saber si estabas bien, es todo lo que importa, me interesas y quiero estés bien. – eso salió directo del corazón del menor.

– Hace mucho no te veía Seungmin. – el rubio prefería cambiar de tema.

– De hecho, por eso te marcaba, quería ver si salíamos porque hace mucho no nos veíamos, quería invitarte al cine.

– Perdón, no sabía. – el pecoso sentía la culpa, veía la desilusión en los ojos de su menor.

– No importa, supongo será después. Te veo luego Felix.

Antes de decir nada mas Seungmin dirigió su paso a las escaleras y se fue rápido del edificio, se sentía mal y no quería que el australiano lo notara.

Dolía demasiado saber que le mintiera, pensando ¿Por qué no me puede decir solo de una maldita vez que estaba con el estúpido de Seo?

Cuando llegó a casa, sintiendo la soledad del lugar, dejó caer la primer lagrima. Después de todo no estaban los mayores que solo le decían llorar era cosas de mujeres.

Amaba estar solo en esa gran casa, podía sentir y nadie lo juzgaría por ello.



Hola a todos, espero que estén muy bien y les gustara el capitulo de hoy. :)


Loneliness || Lee FelixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora