Belleza del Cielo #3

Capítulo 29

Kael

"Desgracia... desgracia... desgracia".

Me cubro los oídos a pesar de que sé que la voz de mi madre puedo oírla en mi mente. Este último tiempo se ha dedicado a molestarme. A veces dudo si está viva o muerta, pero aparece como espectro y me atormenta.

Siento sus manos en mis hombros detrás de mí y me agarra un escalofrío, me giro entonces la encuentro enfrente.

—Madre... —Trago saliva—. ¿Qué intentas?

Sonríe, sus ojos con ceguera, cubiertos de un color blanco, parecieran que me observan, pero no es así.

Atrae al pavor, pero intento mantenerme firme, cuando se queda delante de mí.

—Desgracia... tendrás mucha desgracia por no escucharme.

—Madre, por favor. —Suspiro.

—Vendrá y no podrán detenerlo.

—¿Quién? —digo confundido.

La puerta del cuarto se abre y mi madre desaparece en un extraño humo, Jacky corre a acercarse hasta mí.

—Todo está listo, vamos a salvar a Irina —declara determinada mi pareja y asiento.

—Yo también voy. —Veo que Rebecca entra a los aposentos.

—Pero...

—Olvídalo —Levanta su vestido y se nos acerca—. Ya lo hablé con Askar e iremos, las fiestas postboda pueden esperar.

Jaelyne asiente y sonríe.

—Parece que no puedo detenerte.

Ella sonríe.

—Esto es por las tres, además es nuestra amiga y nuestra hermana en una vida pasada, así que jamás abandonaría a mi familia.

—¿Listos? —pregunto sonriente entonces asienten, luego me pongo serio—. El ejército de Andur viene delante, pudimos desviarlo, pero el tiempo corre.

—Están tardando demasiado —Llega Fared, tiene vendas en la cara y cuerpo—. Hay que largarse pero ya —expresa irritado.

—Hacemos lo que podemos, Wash —declara Jacky molesta—. Deberías estar descansando, ayer cuando llegaste, se notó que perdiste mucha sangre, el doctor dijo que...

—¡Me importa una mierda ese médico! Ese hombre no sabe nada de mi pronta recuperación, no soy humano, no necesito de sus estupideces. Lo que necesito es recuperar a Irina, antes de que lleguemos demasiado tarde. Solo espero que el estúpido del principito haga algo.

—¿Principito? —indago confundido.

—Es el príncipe menor del Reino de las Sombras ¿Nos podemos ir ya? —se queja.

Llega Askar y le responde.

—Ya están listos los dragones y la gente que va a despistar al ejército de Andur.

Asiento.

—Perfecto. —Sonrío y entonces nos vamos.

Tengo un escalofrío, el espectro de mi madre me continúa siguiendo. Algo me dice que sus "desgracias" definitivamente tienen que ver con esto.