capítulo trece

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  Tus orbes se habían detenido en el techo de tu habitación y amenazaban con quedarse allí mucho tiempo, mientras que un sentimiento amargo comenzaba a expandirse en todo tu ser. El mes que mantenías como descanso de tu trabajo de modelo estaba por terminar y aquello te llenaba mucho de angustia, no sabias que podías decir acerca de las grandes cicatrices de tu cuerpo y si llegaba a hacerse público la gente podría sospechar. Por lo menos ahora se suponía que debías de estar preparándote para la semana siguiente en donde estarías junto a Kai preparando algunas cosas del trabajo.

  Lo más importante de todo es que no sabias en donde se encontraba tu teléfono celular, este mantenía todas tus conversaciones con todas las personas que conocían todo acerca de ti y por supuesto allí podría comprobar que en verdad tenías dos identidades.

  Cuando Dimitri te había dado aquella noticia simplemente no podías evitar entrar en pánico aunque él te había dejado en claro que tu celular ahora no tendría ninguna información debido a un bloqueo permanente, lo cual agradeciste.

  Aunque esa solo era una más de tus preocupaciones, durante estos días las palabras de tu padre aún seguían rondando por tu mente, él ahora ya no quería que siguieras sus pasos. No es que siempre lo hubieras hecho por él, pero a ti te agradaba ser una heroína y poseer una particularidad para ayudar a los más necesitados, aunque debias de entender a tu padre ya que después de todo casi pierde a su única hija.

  La discusión acerca de tu oficio como heroína estaba en proceso, sabias que tu madre apoyaría la decisión de tu padre, después de todo a ella nunca le agradó que tu también mantuvieras un trabajo peligroso como este.

  Tu mirada se había centrado en una pequeña mesa que se mantenía aún lado de tu cama, justamente allí se encontraban tus medicinas diarias junto a un vaso de agua, Dimitri los había colocado en aquel lugar hace una media hora atrás. Lo bueno de la situación es que al menos unas cuantas heridas de tu cuerpo se habían cerrado pero, otras aún estaban en proceso.

  Cuando tu maestro, Beast Jeanist se habia retirado de tu habitación había dejado muchas preguntas en tu cabeza, las cuales la mayoría no tenía ninguna respuesta. Él te había expuesto su punto de vista al respecto acerca de los acontecimientos que habían ocurrido en menos de un mes y es que llegó a la conclusión de que los dos ataques fueron ocasionados por la misma persona, como lo habías pensando había sido la liga de villanos debido a la aparición que había hecho Dabi en la batalla de Endeavor.

  Tus manos difícilmente habian tomado los pequeños círculos en blanco para colocarlos entre tu boca para asimismo tomar unos cuantos tragos de agua y colocar el vaso de cristal en aquel pequeño mueble.

— Esto está comenzando a estresarme— observaste tu cuerpo entero, debido a que el dolor aún se mantenía presente en tu sistema.

  Para tu mala suerte los doctores que estaban en aquel lugar te habían explicado la situación de tu cuerpo, por lo que resumieron que quizás tu cuerpo se recuperaría en un año y medio, lo cual había provocado tu gran descontento. Debías de entender que aquel Nomu te había perforado varias partes de tu cuerpo, solo que al final habías protegido los órganos importantes con una pared de rocas ya que por suerte siempre estabas lista en esos caso, solo que esta vez aquello no funcionó bien debido a que habías perdido demasiada sangre.

  No había nada que lograras hacer por el momento, así que simplemente tus orbes comenzaron a cerrarse de forma instintiva o al menos eso habías pensado, cuando unos sonidos comenzaron a hacerse presentes en tu habitación lo que provocó que tu cuerpo se estremeciera.

  Tus orbes se habían abierto un poco más cuando habías visualizado lo que provocó aquellos sonidos y es que no dabas crédito a lo que estabas observando.

— Lamento entrar así de repente.

  Aquella persona se mantenía con una sonrisa coqueta observando a su alrededor con gran curiosidad, tu respiración comenzó a acelerarse cuando reconociste a la perfección a la persona que estaba frente a ti.

— ¿Q-que estas haciendo aquí?— tus palabras mostraron lo nerviosa que de verdad te encontrabas.

— Digamos que estoy visitando a una colega del trabajo, Terra— cuando aquellas palabras sobresalieron de los labios del héroe habias tragado en seco.

  No mantenías tu antifaz en ese momento, no estabas en tus horas de servicio por lo que solamente poseías ropas cómodas.

— Creo que me estás confundiendo con alguien más— tu mirada estaba dirigiéndose hacia el pequeño mueble a tu lado, justo en aquel lugar se encontraba un botón de pánico, el cual se encargaría de llamar rápidamente a Dimitri.

— ¿En serio?— el héroe número dos se habia acercado hacia tu pequeña mesa, con solo observar tus pequeños gestos se habia percatado de lo que estabas planeando hacer. — no hace falta que lo niegues cuando aquí hay demasiadas pruebas.

  Presionaste tu mandíbula cuando Hawks alzó tu teléfono celular, el cual de hecho se encontraba perdido desde hace un mes atrás.

— Tu compañero el fotógrafo llamó— Hawks dejó tu celular junto a tu botón de pánico. — tranquilizate, que no le he dicho nada de tu identidad.

  Simplemente sabias que ahora si tenías posibilidad de que todos descubrieran tu identidad y lo decías por el héroe que se mantenía frente a ti, debido a que era mayormente conocido por ser un tanto controversial.

— ¿Que es lo que quieres?— exhalaste todo el aire contenido, ya no había manera de negar lo que era obvio ante los ojos del héroe.

— Nada— alzaste una ceja ante su respuesta. — sabia que escondias algo, esto solo fue un pasatiempo.

— No voy a creer eso— dictaste con cierta molestia. — no simplemente vas a investigar la identidad de alguien por un simple pasatiempo, se que vas a querer algo a cambio.

— ¿Quieres comprar mi silencio?— Hawks sonrió de medio lado. — por ahora no diré nada, aunque estoy seguro de que tus fans descubrirán la verdad por si mismos— el héroe se cruzó de brazos para después observar tu cuerpo de pies a cabeza, examinando los diferentes vendajes de tu cuerpo.

  Simplemente un poco de remordimiento comenzó a aparecer en el héroe, según tenía entendido tu aún tenías poco tiempo como heroína y tener un ataque de esa magnitud quizás podría hacer que te retirarás de tu oficio permanente, no le agradaba aquello, puesto que en ciertas ocasiones tuvo el honor de ver tus batallas. Por ciertas razones, él estaba cerca de donde te encontrabas pero lamentablemente no podría ayudarte mucho debido a que no poseía sus alas, seguía haciendo patrullas de día aún sin su particularidad.

  Quizás sus palabra eran ciertas, tus fans podrían darse cuenta de que en verdad algo estaba sucediendo entre Terra y (T/N).

— Lo dudo.

TERRA ━━ takami keigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora