𝖀𝖓𝖆 𝖆𝖇𝖔𝖌𝖆𝖉𝖆 𝖕𝖆𝖗𝖆 𝖊𝖑 𝔹ℝ𝔸𝕋𝕍Á

🔥🔥¡𝕱𝖊𝖙𝖎𝖈𝖍𝖊𝖘, 𝕯𝖊𝖇𝖎𝖑𝖎𝖉𝖆𝖉𝖊𝖘 𝖞...!! 🔥

PRIMERO QUE TODO, FELIZ NOCHE BUENA A TODOS MIS LECTORES FAVORITOS, LES DESEÓ QUE ESTÉ AÑO CULMINE LLENO DE BENDICIONES PARA USTEDES.

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SEGUNDO... AQUÍ ESTÁ MI ESPECIAL DE NAVIDAD... DISFRUTENLO... UN ABRAZO.

Al llegar y estacionar el Jeep en la acera frente al hotel, Bastian se apresuró y le abrió la puerta a Maïa quien estaba un poco más calmada en medio de todo el furor, era normal, al parecer su vida había cambiado en conceptos que su propia existencia que desconocía, pero aquello solo era un obstáculo, una prueba de camino a su victoria, nadie, en absoluto nadie la derrotaria ni siquiera su familia.

Por que a algo la habían acostumbrado incluso ellos mismos y fue a ser independiente, pero sobre todo letal, sus altos y bajos no median su letalidad, aquella que probaría la turca Nazly.

La cuál vio de lejos acercándose a ellos, al parecer la mujer esperaba por ellos o por Bastian, que era lo más seguro.

-¿Almorzamos? -Preguntó Bastian luego de ayudarla a salir del auto, tomandola de la mano, a la vez que cerraba la puerta metálica del automóvil.

-Siendo sincera no me apetece nada, tengo cosas que pensar, así que tomaré un poco el sol e iré a la playa -pronunció siendo éstas últimas, escuchadas por la fémina que estaba detrás de Bastian.

-Te acompañó -se limitó a decir Bastian, girando su cuerpo para encarar a la fémina cruzada de brazos y con mirada molesta.

-Te acompañaremos, estoy un poco aburrida y no tengo más que hacer -se autoinvito la mujer a la vez que justificaba su intromisión.

-Ire a cambiarme -respondió Maïa aún sujeta de la mano de Bastian, la cuál no había salido de la vista de Nazly, siendo a la vez analizada por la más astuta de las dos féminas.

Por lo que luego de que Bastian le asintiera, Maïa se dirigió hasta el ascensor que la llevó, hasta el piso donde estaba su habitación, en donde también había pedido un traspaso de todo su equipaje.

Sin embargo una vez al entrar, su celular vibró avisandole de una llamada entrante, a la cuál atendió mientras escogía ropa del vestier.

-Te estoy enviando información ahora mismo de la turca, sin embargo no es nada relevante, pero sabes que cuando existe ese tipo de cortinas, es por que detrás se esconde el peligro, pero algo llamó mi atención... en realidad dos, es hija de un militar turco, pero se supone que no hay lazos con la milicia y lo otro es que al parecer tiene una obsesión por Bastian, ya que incluso prostitutas con las que él se ha acostado, han desaparecido misteriosamente.

Explicaba la egipcia, mientras que de los labios de la griega se expandian en una sonrisa sádica, era como si matará dos pájaros de un solo tiro 《pobre niña ilusa》 pensó para si misma.

-Esta bien, averigua que lazos puede tener su padre con mi abuelo, por que ella fue quien le dio la foto a Bastian, así que algo esconden en común -volvió a sonreír, de su obsesión por Bastian se encargaría ella.

-Así será, esto cada día me gusta más -habló con emoción la fémina que estaba en la otra línea -cuándo tenga nueva información te avisó.

Luego de colgar aquella provechosa llamada, vio varios vestidos de baño siendo dos los que le llamaron la atención, uno blanco y uno rojo, el rojo sería la tentación para Bastian, pues ella sabía que era su fetiche, pero... a su mente vino, que posiblemente la turca lo usaría a su favor.