𝖀𝖓𝖆 𝖆𝖇𝖔𝖌𝖆𝖉𝖆 𝖕𝖆𝖗𝖆 𝖊𝖑 𝔹ℝ𝔸𝕋𝕍Á

🔥🔥 ¿ℂ𝕌𝕄ℙ𝕃𝔼𝔸ℕ̃𝕆𝕊 𝔽𝔼𝕃𝕀ℤ❔🔥

Bien, antes de iniciar... Esté mensaje va dirigido tambien a mis lectores fantasmas, de los cuáles me encantaría por lo menos obtener una estrellita (⭐) una que indique que mi trabajo les va gustando, sin embargo también quiero leer sus opiniones, yo no me rubro de esto que hago por que lo hago con cariño, sin embargo lo único que pido de ustedes, es que si les gustó, me lo hagan saber.

Gracias, es todo, sin más que decir, disfruten de lo que viene a continuación.
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¿Alguna vez has sentido que tomaste una mala decisión por culpa de tus miedos? Ó... ¿alguna vez te sentiste encerrado por culpa de tus temores?

Para Maïa aquellas preguntas, en compañía de otras que siempre giraban en torno a los temores de la fémina, eran las que la habían perturbado en toda la noche.

Decir que no durmió era una vil mentira, sin embargo si fue una realidad que sus lapsus de sueño fueron cortos y que al momento en que despertaba y veía el cuerpo desnudo de Bastian unido al suyo, con su cabeza sobre sus senos también desnudos, aquellas preguntas, no hacían más que torturar su realidad.

Bastian le había dicho que la esperaría, de eso no tenía duda, sin embargo le aterraba la idea de que no pudiera ser estable para él, un matrimonio era un escalafón gigante en la vida de ambos y que ella no quería tomar a la ligera.

Pero tampoco quería dejar pasar tanto tiempo, por miedo a darle un nombre a sus sentimientos profundos, solo era capaz de hacer eso, aceptar que eran profundos, pero no minimizarlos a una palabra, para ella, aquello era una catalogación amplia a la cuál le daba terror llegar.

-Buenos días nena -la interrumpió Bastian de sus pensamientos, posando su mirada azul, en aquel hombre frente a ella, que estaba enfundado en un pantalón de vestir color gris perla y una camisa blanca, los cuales se ajustaban de manera provocativa a su anatomía.

Por lo que Maïa aún sobre la amplia cama y con las sábanas cubriendo la mitad de su cuerpo desnudo, lo miró detenidamente, empezando por ese pantalón y la forma en como se ajustaba, en especial en su miembro, que le daba pequeñas secuelas de la noche anterior, llegando hasta sus labios rosas que la recibían con una sonrisa llena de picardía.

Por que Bastian desde esa posición vio como sus pezones erectos en busca de su atención se le insinuaban y el quería, lo anhelaba, pero habían cosas que solucionar, sin embargo ya tendría tiempo para satisfacer a su mujer y obviamente así mismo.

-¿Por que te vas tan rápido? -susurró sin dejar de verlo a los ojos, haciendo un pequeño y adorable puchero que calentó el interior del masculino, era aquello que quería ver siempre al despertarse, además de que dormir junto a ella calmaba sus demonios internos, al tiempo que sentía como los alimentaba, pues se sentía posesivo de ella, la quería para él solo.

Por lo que se inclinó, recostando su cuerpo sobre el desnudo de Maïa, no sin antes quitar la sábana que que impedía disfrutar de lo hermosa que ella es.

Así que dejando un beso en medio de los senos, en su tórax, creando un camino con ellos, a la vez que veía como su respiración se aceleraba, lo cuál no pasó por alto en el movimiento frenético que ejercían sus senos haciendo un contacto exquisito con la tela fina de su camisa ajustada.

-¿No quieres que me valla nena? -susurró sobre sus labios, antes de unir los suyos a los provocativos y carnosos de la griega, sintiendo como ella abría sus tentadoras piernas para él, mientras lo abrazaba con estas, cortando la distancia que los separaba de ambas pelvis.

Por lo que Maïa en un movimiento rápido, giró ambos cuerpos quedando ella sobre el de Bastian, aquello sin dejar de besarse, llevando aquel acto a uno más placentero, sintiendo como las grandes manos de Bastian se posicionaban una en la cintura de está y la otra en su trasero, al cuál le dejó caer su mano, haciéndola jadear, separándose un poco y dejando unidas sus humedas frentes.