Ayla tiene 15 años, ha vivido engañada durante los últimos 10 años. No recuerda nada tras esos diez años, hasta que un día de verano tras un incidente que pone en riesgo su vida, todos sus recuerdos regresan haciendo que la realidad que ella conocí...
Al llegar a la cabaña me hicieron subir a alisarme y prepararme para la fiesta, luego de hacerlos creer que si que hicimos ejercicio (la verdad no me quiero ni imaginar que es lo que nos habrían echo si descubrían la verdad).
Saliendo de la ducha, me vestí con un jersey de manga larga azul cielo y unos pantalones leggins negros (ya se muy casual pero tampoco es que me arregle mucho, además al estar en mitad del bosque prefiero llevar algo cómodo y práctico) y baje al salón a esperar a mi hermano tal y como este digo que hiciera.
Cuando llegue al salón él ya me estaba esperando. En cuando me vio me indico que lo siguiera, pero antes de salir de la cabaña me vendo los ojos, dijo que así sería más emocionante.
No me emociona mucho la posibilidad de estallarme con un árbol pero lo que tu digas...
Caminamos al rededor de diez minutos antes de detenernos indicándome que ya habíamos llegado. No tenia ni idea de dónde estábamos ya que en todo el camino ha sido mi hermano el que me ha guiado, eso sin contar que aún no me dejaba quitarme la venda de los ojos. Supongo que estaban terminando los últimos retoques ya que escuchaba como se movían.
Al cabo de lo que calculo que fueron dos minutos (los más largos de mi vida por cierto) por fin me dejaron quitarme la maldita venda de los ojos. Lo que veía era simplemente hermoso, no tenia palabras para describirlo (en multimedia).
Al medio de toda esa preparación se encontraban mis padres y mi hermano sonriendo con una pancarta que decía " FELIZ CUMPLEAÑOS AYLA ". Era el momento más feliz de mi vida, me hacía ver lo mucho que me querían, se me llenaron los ojos de lagrimas de la emoción.
Me hacía tan feliz que por primera vez en muchos años me di un descanso de intentar recordar mi pasado, pues su esfuerzo para preparar todo esto tenía que ser compensado de alguna manera y está sería mi forma de agradecerles: disfrutar al máximo la fiesta en que tanto esfuerzo pusieron.
Después de comer un poco de mi pastel y reír un rato me entregaron mi regalo de cumpleaños:
Un collar de luna con una inscripción en el dorso: "como la Luna, siempre contigo"
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Puede que para algunos sea una cosa insignificante o demasiado pobre para un regalo de cumpleaños, pero para mi era especial, era el mejor regalo que podrían haberme echo. Ellos saben que no me gusta que me regalen muchas cosas y que prefiero una cosa sencilla pero llena de sentimiento.
Con este regalo todo quedaba claro, no les importaba mi pasado, me quieren tal y como soy y aunque recuerde en algún momento quién era, seguirán siempre a mi lado sin importar nada.
Por eso este es el mejor regalo que me podrían hacer porque con el me dan a entender cuanto es el aprecio y el amor que me tienen.
Sencillamente este regalo es PERFECTO.
Ya no me podía aguantar más, me lo puse lo más rápido posible y me lancé a sus brazos diciendo: gracias, gracias, gracias... Una vez detrás de otra mientras lloraba de felicidad.
