Una guardiana como Luna

Capítulo 63

CAPÍTULO LARGO PARA COMPENSAR ESTOS ÚLTIMOS TAN CORTOS.

Julio POV:

MATE

La voz de mi lobo resonaba una y otra vez repitiendo lo mismo sin cesar. 

Aún no  puedo creer que ella esté frente a mi en este momento. Es preciosa, fácilmente la podría confundir con un ángel. Su melena rubia hasta la cintura me recordaba a las estrellas y sus ojos grises parecían eclipsar la luna, son hermosos. Su melódica voz  fácilmente podría hechizarme.

Ahora comprendo perfectamente lo que tanto mis padres como Derek me decían acerca de la conexión de mates, es tan profunda que cuesta ponerlo en palabras. 

Mi hermana...

Ayla...

¡MIERDA AYLA!

Soy un imbécil, como pude olvidarme de ella. Como le haya pasado algo... 

Dirijo mis ojos rápidamente dentro de la habitación pare verificar su estado. Pero todo parece estar extrañamente tranquilo y a ella no la veo por ningún lado.

MIERDA, MIERDA, MIERDA

Empiezo a hiperventilar mientras la busco desesperado por todos lados. 

¿Dónde están los demás? 

No hay nadie en el pasillo, ¿dónde se han metido?¿Cómo han sido capaces de abandonar a mi hermana?

— ¡Julio! 

La voz de Jack resuena a lo largo del pasillo. Giro rápidamente mi cuerpo hacia él para plantarle un puñetazo en la cara. Me asegurare de que se arrepienta de abandonarla.

— Aquí es- - No lo dejo terminar y estampo mi puño en su cara. - ¡¿Y eso por qué?¿Qué rayos te ocurre?!

— ¡¿Dónde está mi hermana?¿Cómo te atreves a abandonarla?! - Intento proporcionarle otro puñetazo sin embargo esta vez lo atrapa en el aire antes de que le de.

— ¿Tú hermana?¿Ayla? 

— No, tu tía la Fulana. ¿De quien más crees que estoy hablando? 

— ¿No me escuchaste antes? Esa chica extraña, Zafiro, la que parece ser vuestra última compañera, logro romper la barrera, y se la llevaron a-

— ¡QUÉ SE LA LLEBARON! ¿QUIEN A SIDO EL IMVECIL QUE SE HA ATREVIDO A LLEVARSELA? - Salto desesperado.

— Puedes tranquilizarte y dejarme terminar, idiota. No se la han llevado-

— ¿Pero si acabas de decirme que se la llevaron? - Digo confuso.

— PUEDES ESCUCHARME HASTA EL FINAL, JODER. No, no se la ha llevado nadie, solo la llevaron a otra habitación para tratarla. 

—  ¿Dónde?

Él suspira frustrado.

 — Tercer piso, cuarta puerta a la izquierda. Pero-

Antes de que termine salgo disparado escaleras arriba.

Por favor que este bien, por favor que este bien...

— ¡AYLA! - Grito abriendo la puerta de golpe.

Seis paren de ojos se giran de golpe hacia a mi enviándome cuchillas con la mirada.

— No grites, la despertarás. - La voz rota de Derek es lo primero que escucho antes de que todos los demás me manden a callar. Es entonces cuando me percato de que mi hermana esta abrazada a su torso, con restos de lágrimas en sus ojos. Enseguida me doy cuenta de que algo ha ocurrido en el poco tiempo en el que no estaba.

— ¿Qué le pasado? 

Estoy seguro de que todos han podido saborear la preocupación en mis palabras, puesto que absolutamente todos me lanzan una mirada comprensiva.

— Lo ha recordado... todo.

— ¿A qué te refieres con "todo"? 

— Todo, hijo. A sus amigos y compañeros, a su familia, el rostro de su padre,  su manada y sus miembros, como cada uno de ellos murió tratando de protegerla, como su hogar fue destruido por esos vampiros que trataban de eliminarla... absolutamente todo su pasado.

— No... no me digas que ella...

— Sí.

MIERDA

Un golpe a mi derecha me saca de mis pensamientos.

— MALDITA SEA, CUANDO LA VUELVA A VER SE VA A ENTERAR DE ESTO. ¿ACASO NO ENTIENDE QUE EXISTIAN MEJORES MOMENTOS QUE ESE PARA PRESENTARLE A SU PADRE? YA LE DIJE QUE SE PRESENTARÍAN MUCHAS OPORTUNIDADES PARA ESO, PERO NO, TUBO QUE ELEJIR LA PEOR DE TODAS. - Hace una pausa y luego mira al cielo antes de gritar. - FELICIDADES, CASI LOGRAS QUE TU HIJA SE MATE.

Quedo sorprendido ante sus palabras, no tengo ni la menor idea de qué decir al respecto. ¿Quién eres, brujita?

— ¿A qué te refieres con "cuando la vuelva a ver"?¿Quien eres tú exactamente? Y ¿qué tanto sabes sobre ella? - La voz de mamá resuena con un tono severo y protector. Por un momento se me cruza por la cabeza reprocharle por hablarle así pero me encuentro dividido, por una parte quiero reclamarle a mamá que no trate así a mi brujita, pero la otra, la más grande de los dos, sigue preocupada por mi hermanita y, por mucho que quiera a mi mate, ella siempre será mi primera prioridad. Quizás no compartimos sangre, pero desde que la vi por primera vez con los ojos cristalizados me prometí que la cuidaría siempre, sin importar lo que pudiera suceder.

Ella suspira y, por un instante, la habitación queda en silencio. 

— Supongo que no me queda más remedio. Como dije anteriormente mi nombre es Zafiro y soy una bruja blanca, pertenezco a los clanes del sud, concretamente el clan lunar servers. Nuestro clan a servido a la Diosa Luna durante generaciones, cada miembro tiene un cargo único que se decide desde el momento en el que nace y por el que se prepara durante quince años. Una vez cumplidos los quince, el individuo debe partir a cumplir su cargo por el resto de su vida, El mío fue protegerla, al contario que vosotros, yo, ya tengo la marca de los guardianes desde el momento de mi nacimiento. Cuando cumplí la edad establecida, viaje a su encuentro, llegué en cuestión de tres días gracias a la Diosa, desde entonces he sido su sombra utilizando mi poder para no ser notada, ocultando mi aroma para que no os percataseis de mi presencia - me lanza una sonrisa triste antes de añadir mirándome a les ojos - por eso no me encontraste antes. - Luego de una breve pausa en los que todos fijan la vista en nosotros prosigue. - He sido la encargada de elegiros y cruzar vuestros caminos a lo largo del viaje por eso os conozco más que nadie, gracias a mi poder podía elegir sin preocuparme si le haríais daño o tendíais malas intenciones con ella puesto que mi poder  despoja de la parte sobrenatural a todo individuo que intente lastimarla volviéndolo más vulnerable que cualquier ser humano.

— Pero... si ya sabias que eras una de los nuestros, ¿por qué no apareciste antes?¿por qué te ocultaste? - Susurro apenas audible. - Acaso...

No puedo continuar, no tengo la fuerza para terminar esa oración. Tengo demasiado miedo a la respuesta que me dará. 

Ella me sonríe dulcemente negando con la cabeza.

— No, no es lo que piensas. No pienso rechazarte ni tengo la más mínima intención de dejarte. Quiero estar contigo, pero no era el momento, de hecho aún faltaban un par de semanas para que me conocierais pero las cosas no salieron como debían y el hecho de que ya me conozcáis ha roto el equilibrio y provocará estragos que se podrían haber evitado. - Hace una pausa en la que aprovecha para acercarse a mi antes de seguir. - No te imaginas las ganas que tenia de estar así contigo.

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Aquí termina este capítulo.

¿Qué os ha parecido?

¿Cuál a sido vuestra primera impresión de Zafiro?