Capítulo 40: ¿Y si de todos modos, lo intentamos?

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No, no quería salir, no tenía ni el más mínimo ánimo de poner un jodido pie fuera de mi maldita cama. Pero, siempre tiene que haber un "pero", oírlo así de vulnerable me conmovió; no me quise negar y acepté reunirme con él. Le escribí a mi mamá diciéndole que mis amigas me habían insistido a horrores y me habían ido a sacar a la casa para ir un rato a divertirnos, la idea pareció encantarle.

Se ofreció pasar por mí para irnos en su moto y así lo hizo. Me fui tal cual estaba pues en la noche cuando ver tele me aburrió me fui directo a la cama sin tener la decencia de ponerme la pijama, lo único que tomé conmigo fue un abrigo. Al verlo, lo primero que noté fueron sus ojos rojos e hinchados, era obvio que había estado llorando.

Detuvo nuestro andar en una linda zona verde, nos sentamos en una de las bancas y ahí comenzamos a hablar. A él sí, le conté con detalle todo lo ocurrido con Alphonse. Creo que lo único que hice fue darle más razones para detestarlo.

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Le agradecí en silencio su compañía, no sé por qué la llame precisamente a ella pero definitivamente no me arrepiento.

El escuchar todo lo que Alphonse le ha hecho me resulta repulsivo. No pude contener la sorpresa al enterarme que Hannah era la hermana Kelly.

Luego de oír su razón por la cual "No" estaba llorando, llegó el turno de contarle la mía.

Comencé comentándole la forma tan misteriosa de cómo conseguí el trabajo. Enliste todos esos lugares en los que fui rechazado e, incluso, en todos aquellos en los que ni siquiera me llamaron ni para rechazarme. De pronto y de la nada, me surgió ese trabajo en el Instituto Westfall.

Todo por obra de mi madre, de no haber sido por ella yo seguiría desempleado. Luego de mi reunión con Wilson no terminé mi jornada laboral me fui directo al trabajo de mi mamá, conduje a toda velocidad en mi moto durante casi dos horas hasta que por fin llegué. No me importo nada ni repare en quien tuviera que pasarme por delante, entre de tajo a la oficina de ella... Directo a reclamarle.

Ella argumento haberlo hecho por mi bien, dijo que lo único que deseaba era mi estabilidad económica, incluso me restregó en la cara todo esa renuencia de mi parte ante el hecho de regresar a compartir techo con mi padre.

Después de todo James tenía que darme trabajo, enfatizo en la obligación de su parte hacia conmigo; cuándo le pregunté el porqué aseguraba con tanta vehemencia aquello, se negó rotundamente a darme explicación alguna, incluso, me hecho de su trabajo. Todo esto le conté a Savannah y ella me escuchó con total atención, de hecho sugirió la posibilidad de que Wilson le debiese algún tipo de favor a mi mamá y esta decidió cobrárselo consiguiendome un trabajo. No se me había ocurrido pero a decir verdad, se me hizo muy probable.

Le conté como inicie con Margot, desde sus insinuaciones hasta que llegamos al punto de vernos casi todas las noches durante semanas. También le di todos los detalles de la reunión de maestros y aún más de mi conversación con Wilson, en la que me amenazo clara y explícitamente.

Cuando toda aquella conversación terminó ambos tuvimos un enorme vació en nuestros estómagos. Íbamos a ir al centro comercial por comida pero se negó rotundamente argumentando que no quería correr el riesgo de toparse con su mamá pues le había dicho que salió con sus amigas, la típica mentira; ¿cómo es que los padres aún siguen creyendo esa bobada? Al final terminamos yendo a un local pequeño de comida rápida.

Luego de comprar la comida nos venimos de regreso al parque donde hemos estado comiendo sumidos en completo mutismo desde hace más o menos veinte minutos. Nuestra música de fondo son los carros que pasan a toda velocidad a metros de nosotros y el bullicio de algunas personas a nuestro alrededor.

¿Lo intentamos?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora