Te encontré.

Capítulo 26

Veo los carros pasar rápidamente, el ruido de la ciudad como siempre desesperante. Sigo sentada en una parada de bus, no para coger uno, si no para esperar a Marce y a Gala quien me llevarán a encontrarme con Jean.

Luego de acordar con Jean la salida de hoy, llamé a Marce y le conté todo lo que pasó con él en la cena con mamá. Marce a diferencia de Karen se emocionó por cada detalle. Omití toda mi conversación con Karen, no quiero que Marce le recrimine. También le conté sobre la invitación de Jean, y ella notó que era la misma a la que Gala le había hecho.

Sí, al parecer es un reunión de los del grado de Jean, según Marce es una fogata en un terreno alejado de la ciudad.

Para no hacer más largo el camino para Jean, le pedí a Marce que me llevarán hasta el lugar, y aceptaron así que, ahora estoy aquí esperando.

Veo desde lejos el carro de Gala, así que me levanto esperando que se acerque más. Frena frente a mi y abro rápidamente la puerta trasera para subir.

–¡Hola! –digo mientras me acomodo en el asiento y Gala arranca.

–¡Hola! –contesta Marce, girando para verme.

–¿Qué tal? –dice Gala quien me mira a través del retrovisor.

–Bien... Muchas gracias por recogerme, espero no haber molestado.

–No hay de qué, tranquila –dice Gala con una pequeña sonrisa–¿Puedo saber quién te invito, Avril? Es que hasta donde sé, solo los de último grado pueden invitar... y la mayoría es a sus parejas.

Miro a Marce, pensé que ella le había contado, pero pues no.

–No le quise contar, pensé que te podría incomodar, preferí que tú se lo dijeras en el caso de que quieras hacerlo –se apresura a decir Marce al ver mi expresión.

–Oh, bueno. No hay ningún problema si le hubieras contado, pero bueno.–aclaro– Prepárate Gala -le aviso entusiasmada por ver su reacción-, quién me invitó fue...

–¡La invitó tu amigo Jean! –grita Marce, contenta, removiendo se en el asiento del copiloto.

–¿Jean? –inquiere Gala sorprendida.

–¡Sí! ¡De hecho, ya son novios!

–¡¿Qué?! –exclama Gala con una gran sonrisa– no lo puedo creer, o sea... ¿Es en serio? –se gira hacia mí, dandole la espalda al volante.

–Amor la vista al frente –Ordena Marce.

–Sí, sí, perdón. -Gala vuelve su vista al frente- ¿Es enserio, Avril?

Rio –Sí, es enserio. -Confirmo, mi tono bajo y tímido.

–Me estabas preocupando niña, pensé que tenías corazón. –niega con la cabeza, y dice bajo –¡Realmente lo consiguió! ¿Quién lo diría?

Lo que dice Gala me deja confundida, y como si Marce también pensara lo mismo que yo gira a verme.

–¿A qué te refieres? –frunce el ceño.

–Ehh a nada, solo que... ya saben... Avril no es chica fácil.

–Oh bueno, eso es cierto. –Marce afirma, y lo deja ir, sin embargo a mi aún me parece extraño pero no digo nada.

Gala me mira por el retrovisor, como si buscara algo en mi expresión. Cómo si lo que dijo se prestará para problemas.

–¿Qué les parece si pongo música? El camino es algo largo, así qué, hay que hacerlo cómodo.