Me tienes en tus manos (Logan Henderson)

¡Aún más!

*Narra Logan*

Peter había hecho un excelente trabajo, tenía a (TN) en donde habíamos quedado, completamente solos y sin que nadie nos interrumpa. Me miraba con cara de incredulidad.

—¡Estas loco! ¿Qué hacemos aquí?— gritó desesperada.

—Oh, nada en particular, solo estar aquí, solos, tú y yo— con cada palabra me acercaba más y más— ¿No te encanta?

—Claro que no, y no te me acerques más. Yo me voy.

Tomó la perilla de la puerta y yo me recargué en la pared que quedaba detrás ha a que ella se diera cuenta de que le pedí a Peter que cerrara con llave.
Intento varias veces hasta que se rindió.
Admito que no la había visto así de molesta, no desde aquella pelea con Grace, pero no pasa nada, yo le quitaré ese enojo.

—Sácanos de aquí, ahora— exigió y puso un gesto que el lugar de que me asustara me hizo morir de ternura.

Pero seguía molesta, lo sabía, yo no podía borrar mi sonrisa de la cara.

¡Esta vez lo haría! ¡No le preguntaría si quería o no! Simplemente lo necesitaba, necesitaba con desesperación besarla. Desde hace tiempo ansiaba poder sentir sus labios, pero sabia que ella reaccionaría mal. Yo sabía a la perfección que ella no es como Grace, no existe punto de comparación.

Me acerque mas ¡Aún más! Ya la tenía cerca, solo un pequeño movimiento del cuello y la estaría besando. Ella no hacía nada, ni se movía, no se alejaba ni se acercaba, entonces yo daría el primer paso y la besaría.

—¿Quien está adentro?— tocaron la puerta fuertemente haciendo que ambos nos apartáramos de inmediato.

Maldición, seguro es el conserje.
¡Me arruino el momento!

Hice una seña a (TN) para que no hablara y no hiciera ruido. Si nos descubrían tendríamos mas problemas de los que ya tenemos. Ella asintió con la cabeza pero seguían golpeando la puerta con desesperación, después de unos golpeas más parecía que la persona se había ido.

—¿En qué estábamos?— dije mientras me acercaba de nuevo.

Puso una mano en mi pecho para alejarme— No te me vuelvas a acercar.

Giré los ojos— ¡Vamos (TN)! ¿Por qué no quieres que te bese?

—No me gustas, entiende de una vez, no eres hombre para mí, somos muy diferentes.

—(TN), por favor, yo solo..—

De nuevo comenzaron los golpes en la puerta, pero están vez se escuchaba una voz diferente.

—¡Abran la puerta!—

¡Dios! ¡Era el director!
La perilla comenzó a moverse indicando que alguien quería abrir, quizás ya hasta tenían la llave y en cualquier momento entrarían, y nos verían aquí. Los dos solos en un pequeño cuarto oscuro, no era una buena forma de encontrarnos, quien sabe qué pasaría por su mente.

—¿Y ahora qué, Logan?— preguntó cerca de mi oído lo que provocó un escalofrío por toda mi espalda.

«Piensa tonto»

Comencé a inspeccionar Roa la habitación hasta que vi una ventana de buen tamaño en la parte alta de la pared.

—Ahí— señale— Saldremos por esa ventana.

Me miró preocupada al ver la altura.

—¿Como se supone que subiremos?

—Te subiré primero, y luego tú me ayudas a mí.

Se escucharon murmullos fuera y luego parecía que estaban enojando la puerta con mucha fuerza.

—De acuerdo.

Nos acercamos a la ventana. La tome de la cintura y la alce lo más que pude, afortunadamente llegó a la orilla y logró subir completamente, se sentó en el borde de la ventana y me ayudo un poco para que pudiera subir.
La ventana no era muy grande pero cabíamos bien.

—Ahora yo bajaré primero— le dije y me lance al césped verde, caí de pie y giré a verla

—Te atraparé, (TN), salta.— dije extendiendo mis brazos hacia ella.

—Es muy alto.

—¡Nada de eso! No te dejare caer.

Cerró los ojos y se lanzó hací mi, justo después se escuchó la presencia de él director dentro de la habitación. La había atrapado sin problemas, pero quedábamos bastante cerca el uno del otro. Una posición nada incomoda, de hecho, muy placentera para mí.

—Ya puedes soltarme— expresó y la noté un tanto incómoda.

—Cierto, lo lamentó— la puse suavemente en el césped.

Nos miramos por alguno segundos.

—¡Lo ves! Aquí no hay nadie, Edd, está vacío— escuchamos dentro.

—Director, yo le juro que escuché voces y no se abría la puerta— afirmó quien parecer era el conserje.

—Mejor di que olvidaste las llaves dentro.

Nos comenzamos a reír, los habíamos engañado por completo, después de todo si podíamos ser un gran equipo. A pesar de las diferencias que ella dijo que teníamos.
Al ver su sonrisa supe que quería verla más, y me encantaba ser la causa de ella, admitiendo que me gusta los gestos que hace cuando está molesta, prefiero verla riendo con alguna tontería que se me pueda ocurrir.
Pero detrás de ella, arruinando este perfecto momento, había el mas grande y molesto problema que podíamos tener.

Grace.
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RR💕