Capítulo trece.

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T/N:

Que situación tan incómoda. No sólo estoy en deuda con el pesado de Christopher, sino que también tengo que invitarle algo de tomar, Camila lo haría pero mamá se la llevó para dejarme sola con este sujeto.

- ¿Que quieres tomar? - pregunto buscando los vasos.

- Solo agua... Por favor. - respondió.

Le serví un vaso de agua y se lo di.

- Gracias... ________, ¿Él es tu ex enamorado?

Era hora de charlar de lo sucedido. Me senté en frente de él con un vaso de agua.

- Sí, es él. - suspiro avergonzada.

- ¿Que le viste? - susurró.

- La verdad... Ya ni sé. - respondo suspirando.

Al parecer no esperaba respuesta a eso.

- Gracias. - susurré.

- ¿Puedes decirlo más fuerte? No escuché. - agregó.

- ¡Qué pena! No lo volveré a repetir. - agregué con el mismo tono.

- ¡Qué mal agradecida eres! - se indignó.

El gesto que puso fue tan gracioso que no pude aguantar las ganas de reír. - Gracias por tu ayuda Christopher. - le dije con una sonrisa.

- No hay de que _______.- sonrió.

- Apareciste en el momento oportuno pero... ¿Qué hacias en mi casa? - pregunté.

- Pues... Vine a verte, quiero hablar contigo de lo que pasó y de lo que viste hoy.

Con todo el problema que tuve con Sebastián me había olvidado por completo de que estaba furiosa con este tipo.

Su rostro cambió al verme más distante de lo normal.

- ________, lo que viste hoy fue...

- No tienes que darme explicaciones, eso es algo normal para ti, es para de tu día a día. - lo interrumpo molesta.

- No pienses eso, ella es solo una amiga.

- Seguro, y yo soy la presidenta de Estados Unidos. - digo irónicamente.

- _______ eres muy graciosa. - es lo único que salió de su boca.

- Christopher, como te lo dije, no tienes porque darme explicaciones... Tú y yo no somos nada.

- ¿Recuerdas que eres mi "enamorada"? - eso comillas con los dedos.

- El trato, pero sólo por eso soy tu enamorada. - agrego. Él solo me mira. - Si no fuera por el trato que hicimos, no sería tu "enamorada"... Yo no podría estar con un chico como tú.

- ¿Cómo yo? Solo para salir de una duda... ¿Por qué no?

-Pues, con Sebastián aprendí, no quiero otro chico como él en mi vida...

- ¿Crees que soy como él? - sé acerca.

- Pues si, no son tan iguales pero si. Christopher, yo no quiero un chico que no me respete, que me haga sentir menos, que no esté cuando más lo necesite, que me reclame por falta de tiempo y que se quiera coger a cualquier chica que se le cruce en el camino.

- ¿Así es él? - pregunta antes de beber de su vaso.

- Así es, y así también eres tú. Pronto te irás y acabaremos con esto así que, si te traté mal en algún momento... Sin rencores ¿Si? Es solo que no tolero a los tipos como tú.

- Si... Sobre eso. - paso su mano por su cabello una y otra vez.

- ¿Qué sucede?

-Pues... Aún necesito de tu ayuda. - se ríe nervioso. - Necesito que continues fingiendo ser mi enamorada.

- ¿Hablas de una relación a distancia? No veo como eso te ayude, no soy famosa, ni he salido en los programas de televisión en los que te presentaste así que no veo como te pue...

- Viajarás conmigo. - cierra los ojos esperando mi respuesta.

- ¿Qué? ¡Estás completamente loco! Olvídalo, eso nunca pasará... NUNCA. - Me levanto de la silla en la que me hayaba sentada.

- ¡Vamos _______! Ayúdame, de ti depende mi reputación y no me gusta depender de nadie pero en serio, en serio te necesito. - Me toma de la mano.

- Christopher, no pienso irme, no pienso abandonar a mi madre aquí... ¿Recuerdas por qué acepté esto? Pará ayudarla a ella, ¡Está enferma! Y no la pienso dejar sola.

- Busquemos una solución... Aún no me des tu respuesta, déjame hacer una llamada.

- Pero...

- ¡Shhh! Ya vuelvo.

Se alejó para hacer una llamada y me dejó con la palabra en la boca.

Christopher:

Llamé a mi manager y le comenté la situación de mi "enamorada" y aunque me costó convencerlo, no sé pudo negar.

- Te propongo algo. - dije acercándome a ella.

- ¡Ay no! No más propuestas, por favor. - rodó los ojos.

-  Si vas conmigo, no serás la única que irá... Te ofrezco esto, ven a Miami conmigo, que tu hermana y mamá vayan con nosotros.

- ¿Estás hablando en serio? - le sorprende mi propuesta.

- Sí, muy en serio. Esta es una buena oportunidad para que tu mamá sea atendida por otros doctores en el extranjero, no le niegues la oportunidad de recibir otra opinión.

_______ se queda pensando en lo que dije, al parecer no está muy convencida.

- Tu papá... Me dijiste que tu papá está en Estados Unidos, puedes encontrarlo, y así Camila podrá ver a su papá... Aquí no te espera mucho.

- Y seguro dijiste, "Con esta propuesta ella se va conmigo" muy bien, pensaste en dos puntos muy importante pero... ¿Qué hay de mi universidad? - cruzó los brazos esperando mi respuesta.

- Tu universidad... Continuarás tus estudios en una universidad de Estados Unidos, la que quieras.

- No sé hablar inglés. - agregó.

- ¡Vamos ______! Deja de ponerme excusas... Te matriculo en clases de inglés... ¿Alguna otra objeción?

- ¿Qué hay de mis amigos? ¿Mi trabajo?

- ______, existen los teléfonos así que puedes llamarlos, no creo que tengas tantos amigos. - mi comentario la enoja. - Y puedes conseguir un mejor trabajo allá.

- Déjame hablar con mi mamá y mi hermana. - dijo después de tantas excusas.

- Gracias, sé que aceptarán.

- Supongo que si, ¿Cuando se irán?

- Dentro de dos días, espero tu respuesta, que no pase de esta noche, por favor. - dije dirigiéndome a la puerta.

- Esta bien, es muy poco tiempo y tengo que ir a trabajar mañana. - dice preocupada.

- Ya no vayas, ya no lo necesitas. - digo.

- Gracias. - volteo a mirarla.

- ¿Tres gracias en un día? ¿Eres tú ____? - actúo.

- ¡Oye! Yo no soy una maleducada, sé cuando debo agradecer.

- Solo bromeaba... Me escribes cuando tomes la decisión. - ella solo asiente.

Finge ser mi enamorada // Christopher Vélez y tú. [TERMINADA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora