T/N:
- ¡Quitenle la bolsa! - dice con un chasquido.
- ¡Ay por favor! ¿Una venda en los ojos? - cómo si la bolsa no hubiera sido suficiente. - Sácame la venda, quiero ver tu horrible cara.
- ¡Hey! Estás muy rebelde hoy. - dice Sebastián antes de chasquear los dedos.
Él estaba muy cerca de mi junto al tipo que vi la noche anterior.
- Bienvenida a tu hogar, preciosa. - dice con una sonrisa.
- ¿Mi hogar?... Estás loco... Completamente loco.
Sebastián iba a responderme con sarcasmo, tal vez, pero fue interrumpido por una llamada.
- "Hola papá... Sí estoy aquí".
- ¡Ayuda! ¡Señor, su hijo me tiene secuestrada! - grité sin pensarlo.
- "¿Estás seguro, papá?... Bueno..."
- "Hola _________, sinceramente no sé porqué mi hijo te quiere tanto pero como su padre estoy obligado a apoyarlo en todo y si te quiere a ti... Te tendrá."
Sentí mi sangre hervir al escucharlo hablar así, no soy una mercancía como para ser algo que se toma y ya...
- Los dos son tan para cual, de tal palo tal astilla... ¡Malditos! Nunca seré de su hijo. - grito.
-" ¿En serio quieres a esa mujer? ".
-" Sí papá, gracias... Estaré muy ocupado con _________".
Cuelga la llamada y sonríe al verme atada, este tipo debe ir a un psiquiatra.
Sale de la habitación en compañía de su matón después de que este le dice que hay algo que tiene que ver.
Al quedarme sola en la habitación la observé de arriba a abajo buscando un orificio para ver donde estaba pero fue inútil.
En el completo silencio se escuchó el sonido que emiten las aves costeras, cerré los ojos para concentrarme en los sonidos a mi alrededor escuchando el sonido de las olas golpeando la arena.
¿Acaso me encontraba en una playa?
Traté de unir los cabos sueltos, no habíamos salido del país pero no faltaba mucho para hacerlo. Aún me encontraba en Colombia.
- ¡Maldición! - golpeó la mesa al entrar a la habitación.
- ¿Qué hacemos, señor? - preguntó su ayudante.
- ¡Maldito Christopher! - escuchar su nombre me llamó la atención. - Tenemos que irnos...
- No podemos hacerlo señor...
- ¿De qué estas hablando? - grita.
- Estoy muchachos son famosos y la transmisión a sido vista por miles de personas aquí y en otros países.
- Tienes razón, la policía no dejará salir ningún vehículo privado sin revisarlo. - se acerca a mi tomándome bruscamente de mis rostro. - ¡Ese cretino!
- ¿Qué creíste? ¿Qué no me iba a buscar? Pues te equivocaste... - digo con una sonrisa.
- ¿Me crees tan tonto? Es obvio que sabia que lo harían por eso... Hay dos hombres vigilando todos sus movimientos... - dice con una sonrisa.
Escuchar eso me deja helada.
- No te saldrás con la tuya. - respondo enfurecida.
- Sería una pena que una "bala perdida" impacte en el pecho de tu amado. - eso me hace temblar y sudar frío.
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Finge ser mi enamorada // Christopher Vélez y tú. [TERMINADA]
FanfictionChristopher Vélez no imaginó que su vida daría un giro inesperado al actuar por impulso sólo para salvar a sus mejores amigos.