Después de una terrible noche, tener un agradable descanso es lo mejor que puedes desear. Entre tú y el Dios de la mentira ya se resguardaban secretos que sólo ustedes podían saber, por razones que los protegían de resoluciones más poderosas que ambos, ello no obstante, algunos secretos eran simples gustos o tonterías que les gustaba compartir, por ejemplo y en particular, estaba cuando podías pasar la noche siendo acunada, mientras acariciaban tu cabello ni la más lejana pesadilla podía perturbar el horizonte, así como esa noche. Dormiste como no habías podido en meses, en absoluta y completa paz. Despertando, al parecer, varias horas después que saliera el sol, aun en sus tibios brazos. Observas su rostro al dormir, sonríes a medias, deseabas despertarle y poder decirle, aunque sea solo una vez, que era, entre todas las personas y cosas que pudieras encontrarte a lo largo y ancho de la historia de tu vida y todos los vuelcos del destino, lo que más amabas. ¿No era eso algo mágico? Y más allá, eran un buen equipo. Ahí, contigo, tu mejor amigo, quien iba a enfrentar este mundo y todos los que desearan, a tu lado, ayudándote, tanto como tú lo ibas a ayudar siempre, podías estar segura que iba a cuidar de ti ¿verdad? En ese momento, estas a salvo. Por ello, muy a regañadientes, tienes que levantarte. Loki despierta en el instante que siente tus músculos tensarse.
-¿Dónde vas?- se apega más a ti, no vas a pelear contra ello.
-Tengo una rutina de entrenamiento, por si no te habías dado cuenta.
-Ni hablar, hoy te quedas, Thor está avisado- había muchas posibilidades de que aquel último dato fuera una mentira, una muy dulce y que estabas en completo acuerdo con creer. Le das una buena mirada y sientes el calor confortable que les envuelve bajo las mantas, definitivamente te quedabas. Te encojes de hombros y con una mano en su mejilla le das un tierno beso.
-Bien- te relajas, hasta que sientes sus manos pasar a tu cintura y sujetarte como si no pesaras nada, para ponerte de espaldas en la cama y parar sobre ti, apoyado en sus codos sobre las almohadas debajo de tu cabeza.
-¿Qué? ¿Sin pelear?- por momentos te hacia sentir como una neófita ante la coreografía que tan típicamente llevaban repitiendo durante años, intentas sentir que juegas el mismo juego levantando los brazos y abrazando su cuello, pero tenerlo así de cerca te hace desear cada vez más.
-¿Por qué querría ir a que me pateen el trasero, si puedo quedarme en cama hasta tarde?- sientes los parpados pesados de nuevo mientras su abrazo te aísla del mundo entero, dejándote en un pequeño y seguro espacio donde solo existen ambos.
Su única respuesta es una radiante sonrisa que pocas veces habían visto antes, en ocasiones que podrías contar con los dedos de una mano. La paz, que había sido tan escasa esos días, te adormece. Tanto fuera como dentro de tu cabeza un silencio seductor te empuja a volver a dormir. Y sin notarlo, Loki ya te acuna sobre su pecho, ahí van un par de horas en las que no planeas despertar, el sueño más reparador que has tenido en un par de semanas. Cuando regresas a la conciencia, en parte por culpa del hambre, escuchas una suave voz llamarte, susurrando tu nombre con paciencia y dulzura. Hay algo entre tus brazos y lo abrazas con todas tus fuerzas mientras te acomodas más profundo entre las mantas. Un quejido mitad risa responde ante ese apretón que le diste a lo que, ahora sabías, era el brazo del príncipe.
-Vamos, hay que ir a recoger tu vestido- insiste ahora que sabe que escuchas.
-mmmh que vaya alguien más- te quejas, sin admitir que estabas harta de estar en cama por muy reconfortante que fuese.
-No lo creo, venga, no es gran cosa- abres los ojos y les das su tiempo para enfocarse y a tus parpados, el suyo, para dejar de sentirse pesados, luego te preparas para sentarte sobre el colchón y reunir algo de energía. Loki se levanta prácticamente de un salto, camina a tu lado de la cama y extiende su mano, la cual tomas resignada. Como extrañas las dulces vacaciones en Midgard, el nunca tener que preocuparse por nada y lo fácil que solías aceptar la comodidad.
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El Bucle -Loki y Tú-
Fiksi PenggemarSecuela de "No lo Respires" Es el fin, mientras los últimos esbozos de esperanza tejen sus planes para salvar lo que queda del universo, se te ha encargado una única misión. Resistir. Todo va como se pensaba, hasta que cometen un error, uno que debe...