Fluggel: Nacida del polvo

Extracto 4

Hace años atrás...

Ese día mientras el sonido de la lluvia se escuchaba caer en lo profundo del bosque de Foissard, él despertó, no recordaba nada, no sabía quien era, o lo que había vivido, ahora estaba sucio y mojado, tenía barro en el cuerpo, pero por alguna razón no sentía frío ni calor, no le dolía nada, pero tampoco podía decir que su cuerpo estuviera bien.

Pero el hecho de no recordar nada lo espantó, así que decidió ponerse de pie, cuando un medallón cayó al suelo, por supuesto, no sabía leer, o al menos no recordaba como se hacía, así que sin importar que, él lo tomó y se lo llevo consigo.

Caminó y caminó por el bosque, buscando algo o alguien que lo ayudara, pero sin importar que, él no logró ver a nadie; y solamente el sonido de la lluvia era lo único que lo acompañaba.

No sabía que hacer, estaba sólo en el bosque y sin recuerdos, hacia frío pero él por alguna razón no era capaz de sentirlo, su brazo derecho sangraba pero el no podía sentir ese dolor.

Caminó durante varias horas hasta que pudo ver la salida del bosque, llegó hasta una pequeña aldea, no sabía que hacer o decir, pero al menos pudo saber que podría pedir ayuda, y eso lo reconforto.

Sabía que debía pedir ayuda, pero se percató que ni siquiera sabía que decir o pedir, después de todo no recordaba nada, pero al menos podía pedir que le ayudarán a curar las heridas.

Cuando llegó a la aldea pudo ver a una mujer que llevaba una canasta, era una humana la cual parecía que acababa de comprar algo para la comida, la mujer lo vio y al instante se horrorizo, tanto que empezó a gritar y salió corriendo del lugar huyendo del joven.

Por supuesto aquel joven no sabía porque gritaba, y volteó a mirar atrás si había alguien que tuviera una vibra aterradora pero no, no había nadie que pudiera tener una vibra aterradora, de hecho no había nadie detrás de él.

No le dio mucha importancia, debía buscar a alguien que le ayudará y eso era lo más importante, poco a poco se fue acercando al centro del pueblo y las personas que lo veían salían asustadas o le decían palabras inapropiadas para que se alejara, por supuesto el joven no podía entenderlo hasta que unos hombres llegaron al frente de él.

-- Yo... necesito ayuda... -- dijo joven pero el hombre del medio le dio un golpe en el estómago haciendo que Marcel retrocediera.

No sintió dolor y tampoco sintió que se le iba el aire, y fue en ese instante en que joven se dio cuenta, no respiraba, no necesitaba respirar, desde que se despertó no había tomado ni una sola bocanada de aire, y se asustó.

Los hombres entonces viendo como retrocedía por el golpe se acercaron al joven y comenzaron a golpearlo cada vez más, hubo hasta uno que se le acercó con un palo y lo empezaron a golpear de una forma horrible, pero el joven no sentía nada.

Estaba en el suelo, pero estaba pensando ¿Por qué no respiraba? ¿Por qué no sentía dolor? ¿Qué fue lo que pasó para llegar a estar así? Pero por más que lo pensará ninguna de las preguntas tendrían una respuesta.

Los hombres pronto se marcharon, dejando al pobre joven tirado en el suelo, con morados y huesos rotos, su herida del brazo derecho comenzó a sangrar más, sí, salía un líquido pero al verlo se pudo dar cuenta que no era sangre como tal, salía un líquido verdoso oscuro, era una sustancia extraña, con tonos rojos que era la propia sangre de él.

En ese momento se asustó.

《¿Qué me pasó? ¿Por qué mi sangre es así? ¿Por qué me golpearon? ¿Por qué se asustó esa señora al verme? ¿Quién soy en realidad?》 - Pensaba.