El sol se ponía y Arlett ya estaba cansada y decepcionada de ella misma, había estado dos horas intentando sentir el Prana de su interior pero no lo había conseguido.
La presencia de Tsuu había sido reconfortante, pero ella se había marchado dejándola sola en el santuario, al principio se había opuesto a quedarse sola, pero la Sylfide logró convencerla, después de todo ella tenía algunas cosas que hacer y no podía quedarse todo el tiempo con ella.
Tsuu le había brindado la confianza necesaria para permanecer allí pero ahora que se hacía tarde, decidió que ya era hora de entrar, así que salió del santuario y se dirigió a la biblioteca entrando por la puerta principal.
La tenue luz del atardecer que llegaba a la biblioteca, le daba un aspecto cálido y acogedor, y un sentimiento de nostalgia inundó su corazón, llenándola de una calidez indescriptible, y por un momento Arlett se sintió como en su hogar.
Entonces volteó a mirar a la pequeña sala de estar y allí lo vio, era Mahonry que estaba acostado en el sofá donde ella había despertado por primera vez, tenía un libro en el pecho y los ojos cerrados, al parecer se había quedado dormido mientras leía, Arlett se acercó y lo vio, para ella la actitud del chico se le hizo algo infantil y adorable, y esa acción la hizo recordar cuando ella era pequeña, las veces en que ella se quedaba dormida cuando le contaban historias. La chica se sentó en uno de los sofás de al lado y contempló al chico; esta era la primera vez que lo detallaba bien, su liso cabello castaño que siempre estaba peinado ahora se encontraba desordenado, piel blanca y rostro firme, también era bastante alto, tanto que no cabía en el sofá.
Arlett había visto chicos más guapos en su aldea, de hecho, su amigo de la infancia Eliot era por lejos mucho más guapo que Mahonry, pero por alguna razón, ver al chico dormir hizo que su corazón latiera más rápido, generando en ella una emoción que nunca antes había sentido.
Esa era la primera vez que Arlett veía a un chico dormir, y es que aquel chico que se decía ser muy poderoso, ahora estaba durmiendo indefenso en un sofá que le quedaba pequeño, y ella podía verlo sin tapujos.
Arlett siempre fue quisquillosa con los chicos, ella había tenido muchos pretendientes durante toda su vida, pero ella los había rechazado porque solo se fijaban en su belleza y no en su forma de ser, después de todo ella era la chica más bella del pueblo, cabello rubio ondulado y unos ojos de un color que no se sabría decir, y es que los ojos de Arlett eran bastante raros, pero a la vez hermosos, a veces se veían azules, a veces verdes, otras veces se veían amarillos, y había quien decía que llegaban a ser de color violeta.
Por supuesto Arlett sabía que sus ojos eran raros, y no podía evitar pensar en quiénes pudieron haber sido sus padres biológicos para heredar tan extraño color de ojos y su suprema belleza; los padres que la criaron la habían encontrado en lo profundo del bosque y la adoptaron como su hija dándole el nombre de "Arlett".
Y en el pueblo ella siempre era admirada por todos sus vecinos y amigos y decían que ella se casaría con Eliot ya que era el chico más guapo de la aldea, y eso no cambió cuando Eliot se fue a la capital para unirse a la Guardia Imperial, allí las chicas tanto plebeyas como las hijas de los nobles lo mantenían seduciendo, en ocasiones Eliot le enviaba cartas a Arlett, y había quien decía que eran novios y que esas cartas eran de enamorados; y no se equivocaban, el chico había estado enamorado de Arlett en secreto pero nunca se lo dijo, ni siquiera en las cartas.
Pero hubo un día en que Arlett dejó de recibir cartas de él, por lo que todos asumieron que había muerto en combate, por supuesto eso la entristeció bastante, ya que para Arlett, Eliot era casi como su hermano pequeño, aunque claramente él era dos años mayor que ella, eso le hizo maldecir aún más al Rey.
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Fluggel: Nacida del polvo
Fantasía-"La verdad está en lo profundo del bosque"- La destrucción de su aldea causa un gran cambio en la vida de Arlett quien se ve obligada a huir internándose en el bosque de Foissard (el bosque de los elfos). En su huida es salvada por un misterioso ho...