Fluggel: Nacida del polvo

Arco 5 Capítulo 28

Arco 5:
De Camino hacia Urok

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-- Mi señor, hemos inspeccionado el lugar pero no hay rastros de la Fluggel -- Dijo un hombre que parecía ser un cultista, y que se acercaba a su líder -- Y excepto de las cosas de una biblioteca no hemos encontrado los cadáveres de los demás que vinieron por ella.

-- Ya veo... -- respondió Marcel el cual estaba en frente de un árbol cercano y tenia su mano puesta en el mismo -- No te preocupes por nuestros compañeros -- Agregó -- Ahora ya no estarán mas con nosotros, ahora sus vidas están en este bosque, pobrecillos, debió ser duro ¿No? -- dijo hablándole al árbol.

Ya era la mañana y en la gran biblioteca del bosque de Foissard estaba aquel culto que quería a Arlett, el culto al dios roto; estaban inspeccionando el lugar, el día anterior debían atraparla pero no lo lograron ¿Ahora como la encontrarían? y si de verdad ella era la ultima Fluggel no podían perder la esperanza, al fin y al cabo ella era la única que lograría darle vida a aquel engendro que duerme en lo mas profundo del abismo lunar y lograría darle paz y equilibrio al universo.

-- Señor mire -- dijo otro hombre trayéndole un libro -- Las paginas están en blanco, cada libro de este lugar esta en blanco, no tienen nada.

《Ya veo, es magia de bloqueo》

-- Quémenlos -- dijo luego de pensarlo.

-- Eso ya lo intentamos Señor pero tampoco se queman, ni siquiera la biblioteca se quema ¿Qué cree usted que debemos hacer con eso?

《¡Oh! así que es mas poderoso de lo que pensé》

-- En ese caso, dejaré a algunos hombres para que cuiden esta biblioteca, ellos seguramente volverán aquí, es su hogar después de todo, así que por el momento será mejor irnos.

-- Si señor, a la iglesia ¿Verdad?

-- No ustedes búsquenla en Alfheim.

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Durante aquella noche las chicas caminaron ocho horas hasta llegar a Alfheim, Elizabeth ya estaba cansada y la pequeña Tsuu dormía en la cabeza de Arlett, o eso pensaba; nadie había dicho ninguna palabra desde que salieron de la biblioteca, ni siquiera Arlett lograba comprender la muerte de Sam, no lloraba ya que apenas estuvo cinco meses con él, pero aun así era triste y frustrante el saber que él ya no estaría con ellas y mas aun el no saber que debían hacer ahora, ya no tenían a donde ir, al menos eso pensaban Tsuu y Elizabeth.

Y ahora Arlett tampoco sabía que debían hacer, lo que si sabía es que estaba apenada, enojada y triste, no solo por haber perdido a Sam, si no porque ella misma los había traído a ellos a la biblioteca y ahora eran sus habitantes lo que tenían que sufrir por culpa de ella, ahora habían perdido lo que Arlett una vez sintió que era su nuevo hogar, ahora no sabían lo que debían hacer, y si ninguna de ellas sabia que hacer ¿Quién sabría? Arlett sintió que debía hacer algo y que debía sacar la cara por aquellas desafortunadas dos chicas; así que al menos tenia una idea de a donde dirigirse.

--Es aquí -- dijo Arlett al llegar a la casa de Jurguen -- ¡JURGUEN! -- Lo llamaba, pero él no se asomó.

-- Él no está -- dijo Elizabeth con desánimo, casi sin ganas de hablar -- Mahonry lo envió a Urok pero no sé para que.

-- Mmm entonces ¿Cómo entramos?

Elizabeth entonces se acerco hasta la puerta y extendiendo su mano hasta la puerta la abrió fácilmente, era algo que Arlett no sabia, pero la razas mágicas no usaban llaves como los humanos, era la magia que portaban la que lograba abrir las puertas; así que una vez abierta la puerta las chicas entraron a aquella solitaria casa.