Fluggel: Nacida del polvo

Arco 4 Capítulo 27

-- ¡Sam por aquí! -- Lo llamó Arlett, que estaba escondida en el jardín junto con Tsuu.

-- Qué bueno que están bien -- les dijo Sam acercándose allí atrás -- Y díganme ¿Dónde está Elizabeth?

-- Ella aun esta adentro, al parecer tenía que buscar algo antes irnos.

-- No puede ser, ya vuelvo -- dijo el espantapájaros desapareciendo de al frente en un parpadeo.

Era algo a lo que las dos estaban acostumbradas, pero aun así ver a Sam desaparecer así de la nada era algo que seguía sorprendiendo a Arlett; aunque en aquel momento había cosas más importantes que hacer.

-- Vamos Arlett, hay que preparar a los caballos -- dijo Tsuu.

Arlett asintió y ambas rápidamente y por el follaje de las plantas del jardín se acercaron al establo.

-- Pero ¿Qué? -- dijo Tsuu al ver lo que había pasado -- Están... muertos.

Al parecer aquellos hombres habían ido hasta el establo y acabado con los animales que allí estaban para así no darles oportunidad de escapar.

-- Y ahora como se supone que llegaremos a Alfheim, son ocho horas a pie -- dijo la Sylphide maldiciendo a aquellos hombres -- Y Tsuu no podrá resistir volando hasta allí.

-- Eso no importa Tsuu, si es necesario iremos a pie.

-- Pero...

La Sylphide estaba a punto de decir que era imposible, al menos para ella, pero en aquel momento más hombres salieron del bosque y entraron al establo con sus armas apuntándoles a ellas.

-- Arlett agáchate, Tsuu acabara con todos ellos.

Y así de las manos de la Sylphide se crearon dos cuchillas de cristal, las cuales apuntó directamente a los hombres que estaban al frente de ella.

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-- Bien ahora -- dijo Elizabeth luego de ponerse la flor en el cabello, cuando de repente el suelo del segundo piso se quebró y de allí salió el Elfo al que ella le había lanzado el estante de libros, y al parecer estaba furioso.

Así que el elfo desenfundo las dagas que llevaba, y acomodándose se lanzó ágilmente hacia la sirvienta de la biblioteca, ella esquivó los ataques saltando hacia atrás pero justo quedó al frente de un estante, y estando allí el elfo se le lanzó con una cuchillada que ella no podría esquivar.

La recibiría de golpe en el pecho, pero en ese momento algo se interpuso en el ataque.

-- ¡Sam! -- dijo Elizabeth con alegría.

El espantapájaros estaba allí en frente recibiendo el ataque que ella estaba apuntó de recibir, bloqueándolo con la azada.

-- Sal rápido Elizabeth, las demás te esperan afuera.

-- Ah sí ya voy -- respondió tímidamente.

Así que se puso de pie y se acercó a la habitación de Arlett con la intención de saltar desde su destruida ventana, pero el elfo se lanzó rápidamente y golpeó la puerta bloqueando la entrada.

-- Tu batalla es conmigo -- le dijo Sam lanzándole la azada, pero el elfo desde luego la bloqueo con la otra daga que tenía, y estando ambos furiosos, la batalla entre aquellos dos comenzó.

Elizabeth mientras huía, salto al primer piso por el agujero que había hecho aquel Elfo y corrió hasta la salida escuchando detrás de si el sonido de los golpes de las cuchilladas, y el sonido de libros y estantes romperse, cuando el techo se rompió, mostrando la figura del elfo cayendo al suelo entre los estantes rotos.