Capítulo 32: Nosotros

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Voló lo más rápido que pudo, ya había ubicado a Damian por los sonidos de su corazón, ahora solo tenía que sacarlo de aquí. No estaba seguro si el compañero de aquel hombre también tendría Kriptonita, así que no podía acercase lo suficiente como para tomarlo y salir.

A lo lejos podía ver que Damian estaba peleando contra una chica, o al menos eso parecía al ver su complexión, también estaba enmascarada y llevaba ropa negra, perfecta para que nadie los viera en la oscuridad. Necesitaba un plan, uno donde se pusiera llevar a su compañero sin arriesgarse.

-¡DAMIAN! - le gritó con la esperanza que lo escuchara desde su altura. Cuando lo vio girarse, supo que hacer.

Estiró su mano y se preparó para salir volando de nuevo. Escucho un chasquido de lengua de parte de su amigo y lo vio disparar su gancho hacia él, logró tomarlo y voló con velocidad, en unos segundos, ambos ya se encontraban en el techo de Bar Love. Jonathan se seguro que Damian tocará el suelo del tejado antes de poder aterrizar a su lado.

Jonathan observó a Damian con atención, asegurándose de que estuviera ileso después de la rápida maniobra. Los dos estaban ahora en la relativa seguridad del techo del Bar Love, pero sabían que la situación aún era peligrosa.

- Mierda- escucho de parte se su compañero-¿Quiénes eran? Carajo.

-Damian...- intentó llamarlo, pero el petirrojo seguía insultando a la nada.

-Tendemos que regresar a ese estúpido lugar para ver si...

-¡Damian! - lo agarro de los hombros.

El oji-verde pudo percatarse de las sangre en la cara de Jon, inspeccionó su cuerpo, también había sangre y hasta podía ver algunos moretones, pero algunas botaban un humo dando a saber de que se estaban curando rápido. Su plan no era acabar con ellos, y la muestra de que su compañero siguiera vivo después de que lo tuvieran tan vulnerable, solo lo hacía más evidente.

Primero había sido Maya, eso sólo era una advertencia de que ya no siguieran investigando, pero ahora ya no es eso, ahora era un aviso de guerra.

-¿Te duele? - su mano apartó con delicadeza los mechones se cabello que tenía en la cara Jon.

-Ya no... Pero en ese momento fue horrible.

Jonathan se percató de la mirada preocupada de Damian y le ofreció una sonrisa tranquilizadora. - No te preocupes, Damian, esto no es nada. Tenemos que enfocarnos en detener a esos antes de que causen más problemas.

Intercambiaron miradas, Damian mostraba furia, su maldita de misión había puesto a todos en peligro. Esto no podía seguir así, no ahora que Jonathan también había sufrido las consecuencias de sus acciones.

Ambos entraron al bar, Jonathan quería descansar un poco después de lo que había pasado, no tenía fuerzas para seguir consciente, por otro lado, Robin tenía que hablar con Jazmín. Todos a su alrededor se asustaron, ver al hijo de Superman lleno de sangre y con algunos rasguños era desalentador, los chicos solo caminaron en silencio antes las miradas expectantes de las mujeres a su alrededor. Fueron hasta la habitación de Jazmín, quien también se sorprendió de verlos, pero rápidamente los hizo pasar y cerró la puerta con seguro.

-¿Qué fue lo que pasó? - estiró si brazo para agarrar con delicadeza el mentón de Jon y subió su cabeza para verlo mejor- parece que tus heridas sanan rápidamente... Pero esto no tiene...

-¿Sentido? - la interrumpió Damian.

- ¿Qué pasó? - está vez la mirada de la mujer fue más profunda, quería saber que era lo que había pasado.

-Quieren asesinar a Superman, y saben que nosotros estamos investigando por qué- Jazmín se alejó del niño y se sentó frente a ellos. Damian siguió hablando- lo de Maya fue un aviso, el daño que le dieron a Jonathan es para demostrar que pueden acabar con nosotros... Maldición.

No te voy a abandonarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora