No te voy a abandonar

Capitulo 69: Vida

Miraba a su madre traer la comida que el hospital proporcionaba a sus pacientes; la miraba con gratitud mientras ella le servía con cuidado. Desde que despertó, ella no se había separado de él, dedicada a cuidarlo y reconfortarlo en cada momento difícil. Era reconfortante verla tan cerca, ofreciéndole comida como cuando era niño.

-Mamá, en serio, no tienes que molest...-comenzó Jon, pero su madre lo interrumpió con una sonrisa suave.

-Calla y come, cariño- dijo con dulzura, acercando otra cucharada de sopa a los labios de Jon. -Estoy aquí para cuidarte. Es lo menos que puedo hacer después de todo lo que has pasado.

Jon se dejó mimar, permitiendo que su madre le alimentara como solía hacerlo cuando era pequeño. Cada cucharada era un bálsamo para su alma, un recordatorio de la constante presencia de amor y apoyo maternal.

Entre bocados, Jon encontró la voz para expresar su gratitud. -Gracias, mami. Por todo.

Ella le acarició suavemente el cabello, con una mirada llena de amor y preocupación. -Siempre estaré aquí para ti, cariño. Nunca lo olvides.

Las palabras de su madre lo llenaron de calidez y seguridad. Aunque su vida había cambiado drásticamente, el amor y la atención constante de su madre eran un ancla en medio de la incertidumbre. Se prometió a sí mismo aprovechar cada momento con ella, sabiendo que esos momentos de cercanía eran preciosos y reconfortantes más allá de las palabras.

Lois continuó alimentando a Jon con cuidado mientras una sonrisa nostálgica jugaba en sus labios. -Ha pasado mucho tiempo desde que te alimenté así, ¿verdad?

Jon, con una risa suave, asintió mientras tomaba otra cucharada de sopa. Sí, creo que desde que tenía unos diez años. Es extraño volver a esto.

Ella asintió, con una expresión cariñosa. -Parece que fue ayer cuando eras solo un niño.

Entre bocado y bocado, la conversación se tornó más seria. -Jon, en estos dos meses que has estado en el hospital, no has visto a tu padre," dijo Lois suavemente, mirando a su hijo con preocupación.

Jon bajó la mirada por un momento, sintiendo la incomodidad y el dolor de la distancia entre él y su padre. -No estaba preparado para verlo- admitió en voz baja, sintiendo el peso de la conversación. -Y... se de cuenta de que ya no soy Superboy.

Lois puso una mano sobre la de Jon, transmitiendo apoyo silencioso. -Jon, eres mucho más que tus poderes. Siempre lo has sido.

Jon miró a su madre, agradecido por sus palabras reconfortantes. -Lo sé, mamá. Pero... es difícil aceptar que ya no puedo hacer lo que hacía antes.

Lois asintió comprensivamente. -Te entiendo, cariño. Pero tienes que darte tiempo para sanar, tanto física como emocionalmente.

Jon respiró hondo, dejando que las palabras de su madre resonaran en su corazón. Sabía que tenía un largo camino por delante para aceptar su nueva realidad, pero el amor y el apoyo de su madre lo hacían sentir menos solo en ese proceso.

El silencio entre ellos se hizo cómodo, lleno de la presencia reconfortante de Lois y el sonido suave del hospital a su alrededor. Jon continuó comiendo, dejando que la sopa caliente y las palabras de su madre le brindaran consuelo.

Después de un rato, Lois rompió el silencio. —He estado pensando... quizá podríamos tomarnos unas vacaciones cuando te sientas mejor. Solo tú y yo, algún lugar tranquilo.

Jon levantó la vista, sorprendido por la idea. —¿Vacaciones? No recuerdo la última vez que hicimos algo así.

Lois sonrió, su mirada llena de esperanza. —Creo que ambos necesitamos un descanso de todo esto. Y sería una buena oportunidad para reconectarnos, lejos de las preocupaciones.