Capítulo 16: Quiero saber

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𝑪𝒐𝒎𝒆𝒏𝒄𝒆𝒎𝒐𝒔...

Llegó a la aldea prácticamente en segundos cuando detectó el Youki de una batalla en la aldea junto al aroma de Rin muy cerca de ahí. Lo que miró fue algunas chozas destrozadas, pero no había ningún muerto.

Sesshomaru: "No hay sangre de humanos, tampoco huele a muerte. Solo se derramó sangre de Yokai. Pero aún así la situación es extraña.". - Pensaba mientras miraba los escombros.

Kohaku: Señor Sesshomaru, que bueno verlo, Rin se encuentra bien al parecer esta curando a alguien. - Decía apurado cargando una cubeta de agua.

Sesshomaru: La persona que está curando Rin. ¿Es un Yokai?. - Preguntó con mirada fría.

Kohaku: Pues... Si eso parece. - Dudaba en responder porque notó como el semblante del demonio era sombrío.

Lo ignoraba mientras caminaba directo hacia donde estaba Rin. Kohaku lo seguía unos pasos atrás. Estaba nervioso porque no sabia lo que iba a pasar.

...

Michiko: Necesito brotes de "Pieris", el veneno que tiene en su cuerpo es muy potente. - Explicaba a Rin.

Rin: ¡Pero esa planta es venenosa!. - Gritó preocupada.

Michiko: Jovencita, para crear la cura de un veneno se necesita otro mucho más fuerte para que lo contrarreste. - Dijó de manera tranquila.

Rin: ¿Pero podría morir por ese veneno?.

Michiko: Tal vez, pero de igual forma morirá por el otro veneno que ya esta en su cuerpo, en cambio con esto quizá pueda llegar a salvarse. Además, es un demonio no morirá tan fácilmente.

Rin: ¿Esto ya ha funcionado antes?. - Seguía dudando.

Michiko: ¿Piensas que soy una charlatana, niña?. - Su mirada mostraba superioridad.

Rin: No digo eso, simplemente es la primera vez que lo escucho.

Miroku: La mujer tiene razón, para deshacerte de un veneno necesitas envenenarte con otro más fuerte, puede que mueras pero es mejor intentarlo, a veces puede funcionar. Yo mismo he pasado por eso. - Se dirigía a la joven.

El monje se quedó a vigilar la situación en la cabaña mientras que Sango cuidaba de sus hijos. Por eso se encontraba ahí con ellas.

Rin: En ese caso confiaré en usted señora Michiko. - Decía con mucho respeto.

Michiko: Más te vale, de todas formas no te estaba preguntando. - Seguía ofendida por la duda que mostró.

En eso el gran Daiyokai se encontraba en el umbral de la puerta, pero la expresión de Sesshomaru mostraba molestia absoluta. Michiko se impresionó al ver esa figura, no era normal que un demonio de tan alto nivel estuviera ahí, para ella eso no tenía sentido, hasta que...

Sesshomaru: ¿Se puede saber qué estás haciendo, Rin?. - Su voz era amenazante.

Rin: Señor Sesshomaru, ahora mismo estoy ayudando a esta persona, de hecho es... - Fue interrumpida.

Sesshomaru: Aléjate de esa cosa, no es necesario que le des cuidados a un Yokai inferior que no es capaz de hacer frente a su oponente. - Estaba molesto.

Rin: Pero él no es una mala persona, además no es correcto dejar morir a alguien solo por ser débil, si ese fuera el caso hace mucho yo habría muerto. - no mostraba miedo por las palabras duras de Sesshomaru.

El poder de la confianza: Sesshomaru y Rin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora