𝑪𝒐𝒎𝒆𝒏𝒄𝒆𝒎𝒐𝒔...
Todo el día Rin estuvo ocupada con Michiko, de hecho comieron muy tarde porque estaban demasiado concentradas en el trabajo. Michiko le explicó largo y tendido varios procedimientos en forma teorica porque según la señora Michiko, Rin no atendería a nadie hasta que supiera lo básico. Por lo tanto las explicaciones fueron muy exhaustivas, tanto así que la Joven no pudo ni pensar en su señor, quien permaneció paciente en espera de ella. Ese mismo día en la tarde, Jaken le hizó entrega de las prendas a Sesshomaru...
Jaken: Amo Sesshomaru, aquí está lo que me encargo. - Le entregaba la caja con la ropa mientras se reverenciaba.
Estaban en la habitación de Sesshomaru, el Daiyokai abrió la caja y examinó con cuidado los Yukatas y efectivamente eran de buena calidad y los diseños no estaban mal, inesperadamente para él, fue de su total agrado lo que consiguió Jaken.
Sesshomaru: Parece que no eres tan inútil como pensaba, Jaken. - Habló con su tono monótono de siempre.
Jaken: ¡Ay! Amo bonito, que bueno que no le desagradó, debo admitir que fue Ume quien los eligió, pero yo mismo supervise sus elecciones. - Trataba de sonar como si él también hubiera escogido la ropa pero en realidad todo lo hizó la señora Ume.
El inuyoukai sacó de sus ropas una bolsa con 50 Ryô y dejo caer para que Jaken la atrapará antes de que cayera al suelo.
Sesshomaru: Asegúrate de entregarle eso a la vendedora. - Dijó serio mirando a otro lado.
Jaken: ¡Claro que si! Amo Sesshomaru. - Gritó con ímpetu el pequeño Kappa. Estaba feliz porque podría pagarle a Ume y además su amo parecía satisfecho.
Hubo un silencio largo en la habitación hasta que Jaken se atrevió a preguntar algo...
Jaken: Mi señor, solo por curiosidad ¿Porqué me mando a conseguir prendas con los humanos y no con algún Yokai costurero?. - Preguntó con miedo pero aún así sentía demasiado interés por saber, por lo que mencionó Ume antes, sobre la ropa de los Daiyokais.
Sesshomaru: Implica demasiado tiempo y no puedo mandarte a ti al lugar donde consigo mi armadura. - Contestó indiferente.
Jaken: Kah! Ya veo, tiene sentido. - Decía sorprendido porque pensó que su amo se molestaría, además la explicación le dió a entender a Jaken que el lugar donde lo consigue es peligroso y no podría hacerle ese favor.
Sesshomaru: Puedes retirarte. - Fue lo último que dijo a Jaken, al parecer quería privacidad.
La verdad es que la armadura de Youki de Sesshomaru es muy especial, su elaboración requiere de tiempo y su presencia es necesaria. El herrero en cuestión que se dedica hacer eso vive en un lugar muy mortífero, solo los Daiyokais como él soportan ese ambiente tan hóstil. Su armadura tiene ya muchos años y aún así su apariencia y resistencia permanecen igual, se regenera de cualquier ataque que recibe. Pero todo eso se logra gracias la forma en que se hace. La última vez que fue a conseguir su armadura tuvo que permanecer siete días enteros en ese lugar para poder transferir su Youki al material y lograr la conexión espacio-temporal con dicha prenda. De esa manera el puede hacer desaparecer a voluntad las partes pesadas de su traje, una función muy útil que requiere de un proceso largo para que sea efectivo. Al parecer Sesshomaru no quería alejarse tanto tiempo de Rin y por eso recurrió a Jaken.
...
Pasaron varias horas, ya era de noche, Sesshomaru se encontraba sentado muy pacífico en el balcón de la sala de estar mirando hacia el jardín, al parecer esa vista era de su agrado, estaba vistiendo una yukata azul rey con morado. Y cierta persona iba pasando por ahí y lo miró.
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El poder de la confianza: Sesshomaru y Rin
RomansaSinopsis: la historia comienza cuando Sesshomaru deja a Rin en la aldea. ¿Cómo el cariño de Sesshomaru pasó a ser amor? conforme ella creció. Las aventuras que llevaron al Gran Sesshomaru a despertar sentimientos más allá de proteger a una simple hu...