Las nuevas sombras de Christian Grey (Completa)

Capítulo 19

Christian

Parece que Elena se olvido que no debía venir a mi casa por las dudas que se cruce con mi familia, ellos no saben que volví a relacionarme porque si fuera así se enfadarían mucho conmigo.

-¿Señor quiere que lleve a los niños al cuarto?

-Por ahora no, gracias.

-Christian vine a verte porque no respondes mis mensajes ni mis llamadas.

-Estuve muy ocupado estos días por eso no te pude atender.

Elena mira a Alexandra con desprecio como si le molestara su presencia.

-Ya veo en que estuviste ocupado, conseguiste una chica que no solo te atiende a vos si no que también cuida de tus hijos, completita la sumisa.

-Alexandra por favor lleve los chicos al cuarto.

-Si señor.

Espero a que salgan del lugar para responderle a Elena, pero antes que lo haga ella hace una nueva acotación.

-Esta chica es un tipo de sumisa que no conocía. ¿Dónde la encontraste?

-Elena primero que nada te dije que no vengas a mi casa porque mi familia no está de acuerdo con nuestra relación. Segundo Alexandra es solo la niñera de mis hijos, es una mujer increíble que hace más fácil la vida de mis pequeños y no se merece que la trates de esa manera.

-No te ofendas de esa manera Christian, parece que esa chica es algo más por como la defiendes.

-Es solo alguien que trabaja en mi casa. Además sabes que no quiero volver a amar a otra mujer después de haber perdido a la única mujer que me enseño lo que es el amor.

-Voy a optar por creerte Christian. ¿Te voy a ver el fin de semana?

-Ya veremos si podemos vernos, cualquier cosa yo te aviso. Por favor te pido que no regreses a mi casa, no solo por mi familia si no porque no quiero que te acerques a mis hijos. Espero no tener que repetírtelo nuevamente.

-Esta bien Christian, voy a hacer lo que me pides porque no quiero volver a perder tu amistad. Ahora me retiro y espero que te comuniques conmigo. Hasta luego.

-Hasta luego Elena. Taylor acompañe a la señora hasta la puerta.

Alexandra

Qué mujer desagradable esa señora Lincon, entró en la casa como si fuera la suya y de forma muy autoritaria. Me parece raro que el señor se relacione con ese tipo de personas. Hay algo que no entendí, qué habrá querido decir cuándo me llamo sumisa, lo habrá dicho porque soy muy tranquila. Por suerte los pequeños ya están en sus camas descansando y me puedo ir a comer algo antes de irme a dormir.

-Familia ya estoy de regreso. ¿Dónde están todos?

-Hola mamá. Papá se esta duchando y Elliot todavía no regresó. ¿Cómo fue tu día?

-Con mucho trabajo hija. Pero quiero saber cómo fue la salida con Alexandra.

-La pase muy bien con ella, fuimos a un montón de lugares.

-Supongo que la llevaste a lugares donde ella podía comprar cosas.

-No mamá, la lleve donde voy siempre a comprar.

-Hija sabes que ella no tiene el mismo nivel económico que el tuyo.

-Lo se mamá. Pero quise comprarle lo que le gustaba como agradecimiento a todo lo que hace por mis sobrinos, que va más allá de sus obligaciones.

-En ese sentido tienes toda la razón. El cumpleaños que le organizo a Teddy fue increíble y eso no era parte de su trabajo. Eso demuestra lo mucho que los quiere.

-La verdad que hoy tuve la posibilidad de conocer a una gran mujer. Alexandra es muy sencilla y tierna, en un principio me costo que aceptara los regalos pero lo logre. Lo que decís que quiere a los chicos tenes mucha razón porque le compro cositas para ellos y no me dejo que la ayudara a pagar.

-Dentro de todo lo malo que paso Christian tuvo suerte en conseguir alguien tan especial para cuidar de los pequeños. Se que ella no reemplazara a su madre pero es lo más cercano que van a conocer en su vida.

-Ustedes dos podrían dejar de charlar y venir a la mesa a comer que estoy famélico.

-Papá no seas tan exagerado, como si no comieras todos los días.

-Vamos hija porque yo también tengo hambre, por supuesto no tanto como él de tu padre.

-Me parece que se están burlando un poco de mí.

-No amor, solo es un día que estamos muy felices. Vamos antes de que Elliot nos deje sin comida.

-Gail te puedo hacer una pregunta.

-La que quieras Ale.

-¿Quién es esa señora Lincon?

-Lo peor que le pudo pasar al señor. Antes de conocer a la señora Ana iba muy seguido al departamento del señor. Incluso era íntima amiga de la señora Grace y de un día para el otro cortaron toda relación. Una vez encontré en la basura un regalo para Teddy de su parte.

-Chicas mejor dejen ese tema porque puede venir el señor y saben que no le gusta nada que hablen de sus cosas privadas. Además nosotros no somos quien para opinar sobre lo que hace de su vida.

-Estoy de acuerdo con Jason, cambiemos de tema. Ale contanos cómo fue la salida con la señorita Mía. Me gusta mucho como te quedo el pelo.

-Muchas gracias Gail. La salida fue mejor de lo que pensaba. La señorita Mía es muy dulce, nada que ver con el señor. No solo me llevo a la peluquería si no que me compro un montón de ropa para que salga una noche con ella.

-La señorita es una chica muy especial. No me olvido que cuando la conocí ella pensó que yo era el novio del señor Christian, todo porque no le prestaba atención.

-En realidad muchos pensaban que era gay porque nunca se lo había visto con una mujer a su lado. La señora Ana fue la primera en salir con él en fotos y la llevo a cenar, todos se dieron cuenta que todo era una noticia falsa.

-Seguro paso eso por lo reservado que es en su vida privada y eso hace que los medios inventen cosas que no son tan solo por vender más.

-Tienes mucha razón Ale. Me voy a controlar todo así luego me voy a descansar.

-Nosotras nos encargamos de ordenar acá. No tardes mucho amor. Vamos Ale.

-Dale Gail. También quiero ir a descansar porque hoy fue un día movido.

Elena

Estaba preocupada por la falta de comunicación de Christian pero ahora que lo vi hay algo que me inquieta mucho más. Defendió a esa chiruza como lo hizo alguna vez con su difunta esposa, con la diferencia que está no es más que una empleaducha. Vuelvo a temer que la presencia de esta nueva se interponga entre Christian y yo, no quiero salir de su vida nuevamente. Tengo que buscar la manera de sacarla del medio, pero tiene que ser de una forma tal que salga de su vida y no quiera regresar jamás.

-Hola necesito que me hagas un favor. Te espero en casa.

El plan ya esta en marcha.