🅟🅓🅤🅒🅒 〖Vol.Ⅰ〗(Completo)

Capítulo 30

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Su Alteza, ¿en quién
estás pensando?
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        ¿Exploradores?

        Bai Qingyan se mantuvo firme en su lugar, forzándose a concentrarse. Reflexionó en silencio, pero no pudo recordar ningún error.

        Bai Qingyan había estado a cargo de las fuerzas de espionaje de Yuyao durante más de una década, y no era la primera ni la segunda vez que se enfrentaba a los exploradores de Langye. Ambos bandos habían tenido victorias y derrotas, y él no podía mantener todo en secreto. Sin embargo, podía garantizar que el mayor secreto, la técnica de cultivo de la familia real de Yuyao, nunca se había filtrado.

        Estaba tan seguro de esto porque la familia real de Yuyao ya se había corrompido completamente en la generación de su padre. Si no fuera por sus propios esfuerzos, Yuyao habría caído hace diez años. Con una familia real así, ¿quién estaría dispuesto a soportar el sufrimiento de practicar una técnica de cultivo tan ascética?

        Por lo tanto, desde que tuvo uso de razón, esa técnica de cultivo siempre había estado en su posesión. Y cuando tenía menos de diez años, después de memorizar duramente la técnica, el original había sido destruido hace mucho tiempo. Otros miembros de la familia real ni siquiera habían leído el texto completo, así que ¿cómo podrían haberlo filtrado? Por lo tanto, era imposible que los exploradores de Langye hubieran obtenido ni siquiera la más mínima pista.

        No, no se podía decir que no hubiera habido absolutamente ninguna filtración. La única vez que hubo un descuido fue cuando estaba practicando en una cueva y perdió el control de su cultivo. Fue esa persona quien lo salvó con sus propias manos, y debido a eso, esa persona también llegó a entender esta técnica. Pero esa persona había jurado solemnemente que nunca revelaría el secreto. Incluso la última vez que se vieron... realmente casi perdió la vida para mantener el secreto por él.

        Bai Qingyan se perdió en sus recuerdos, sin darse cuenta de que estaba perdiendo el equilibrio y palideciendo. Sin embargo, esta apariencia ausente y abatida captó la atención de Ran Chen. Hizo un gesto con la mano para que Long Ye no hablara, y él mismo se apoyó en su barbilla para observar detenidamente, como si estuviera apreciando una exquisita obra de arte.

        —Pensé que yo era el joven más elegante y apuesto bajo el cielo. Pero nunca imaginé que Su Alteza el Príncipe Heredero, cuando está absorto en sus pensamientos, es aún más delicado como un crisantemo y suave como el jade.

        Después de apreciar lo suficiente, Ran Chen habló lentamente:

        —Me pregunto en quién está pensando Su Alteza con esa expresión tan melancólica.

        Bai Qingyan fue sacado de sus recuerdos y negó con la cabeza.

        —No estaba pensando en nadie.

        —¿De verdad? ¿Cómo es que siento que Su Alteza parece estar pensando en alguien “que no ha visto en mucho tiempo” y a quien “desearía morir frente a él”, algún “viejo conocido”?

        Con una frase casual, estalló un trueno en el pecho de Bai Qingyan. Ese “que no ha visto en mucho tiempo”, “desearía morir frente a él” y “viejo conocido” eran precisamente las palabras que Bai Qingyan había dicho cuando habló de Ji Ning la primera vez que se encontró con Ran Chen.

        ¿Acaso Ran Chen ya sabía sobre su pasado juntos? ¿Cuánto sabía exactamente?

        El corazón de Bai Qingyan se agitó como olas turbulentas, y tuvo que agarrarse al borde de la silla para mantener el equilibrio. Cuando levantó la cabeza, vio a Ran Chen sonriéndole, pero sus ojos estaban llenos de sondeo. En un instante, se dio cuenta.

        Si Ran Chen realmente supiera la verdad, ¿por qué se molestaría en sondearle tanto? Probablemente solo estaba adivinando, y si realmente perdía la compostura, ¡caería completamente en su trampa!

        Aunque Bai Qingyan estaba en desventaja, después de todo era el verdadero gobernante de Yuyao, y naturalmente tenía sus propias estrategias. Frente a Ji Ning, se había sentido indefenso y a su merced, pero eso era solo porque se trataba de “él”. Ahora, habiendo comprendido la situación, dijo con voz firme:

        —Bai Qingyan no tiene viejos conocidos en quienes pensar. Hace un momento, solo estaba pensando que Langye es un lugar frío y duro, con gente feroz, y sin embargo ha producido a una figura tan excepcional y refinada como el Supervisor Ran. Me temo que toda la esencia cultivada de Langye se ha concentrado en usted solo.

        Los ojos de Ran Chen se movieron, y Bai Qingyan claramente captó un destello de decepción. Pero esa decepción también desapareció rápidamente, y Ran Chen sonrió.

        —En ese caso, parece que Su Alteza y yo nos apreciamos mutuamente.

        —No me atrevo a aceptar tal cumplido. Solo soy un esclavo cautivo.

        Bai Qingyan ya no podía soportarlo más. Menospreciarse era una forma de intentar escapar rápidamente. Sin embargo, Ran Chen insistió:

        —Esas palabras son incorrectas. Aunque Yuyao haya caído, Su Alteza sigue siendo Su Alteza. Si me hace el honor, ¿por qué no viene a mi lado? Solo crearé la ilusión de que ha partido hacia el oeste montado en una grulla, y a partir de entonces, usted me acompañará por mucho tiempo. ¿Qué le parece?

N/T: Esta es una expresión que se utiliza como un eufemismo para la muerte. En la mitología china, se creía que los inmortales montaban grullas para viajar al cielo occidental, donde se encontraba el paraíso. Al usar la imagen poética de "montar una grulla hacia el oeste" es para referirse a fingir la muerte del Príncipe Heredero, mientras que en realidad se propone mantenerlo vivo en secreto.

        Bai Qingyan miró fijamente esos ojos sonrientes como flores de melocotón. Sabía que detrás de esa sonrisa aparentemente inofensiva, un par de colmillos ya se habían revelado.

        ¿Qué intenciones ocultas tenía este Ran Chen? ¿Por qué estaba tan decidido a tenerlo?