Capítulo 81

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Bai Qingyan, ¿todavía
recuerdas quién soy? ┗━━━━━━━━━ೋ❀❀ೋ✿┛


        Después de estar sentado en silencio por un momento, Lu Mingshan se limpió las lágrimas. Sacó un frasco de su bolsillo, tomó algunas píldoras y las puso en la boca de Bai Qingyan. Luego tomó su pulso, anotó una receta y estuvo ocupado por un buen rato. No fue hasta una hora después que finalmente terminó.

        Después de enviar la receta a Ran Chen, Lu Mingshan aún no se había ido. Se sentó al lado de Bai Qingyan, mirándolo fijamente.

        —En ese entonces te aconsejé que te fueras, pero te negaste. Dijiste que si te ibas, Yuyao también estaría acabado. Pero cuando ese bastardo de Ji He me pidió que fuera a Daxie como embajador, insististe en que fuera. ¿Fue porque ya sabías que Yuyao estaba más allá de la salvación? Incluso si temporalmente no estaba muerto, su colapso total era solo cuestión de tiempo. Así es. Incluso si eras un árbol gigante, seguías siendo un solo árbol incapaz de soportar todo. Solo era cuestión de aguantar un día a la vez. Aguantaste diez años, y Yuyao aún así se acabó. Ahora que te veo en este estado, primo, ¿qué piensas realmente en tu corazón?

        Lu Mingshan había guardado estas palabras en su corazón durante mucho tiempo. Pero al expresarlas hoy, fue en vano. Bai Qingyan yacía inmóvil en la cama, con los ojos firmemente cerrados, sin responder ni una palabra.

        Un dolor inmenso, como un tsunami, barrió el cuerpo de Bai Qingyan en oleadas. Pero de repente, sintió una frescura en su garganta, como si hubiera tragado algún elixir milagroso. Esta frescura descendió por su esófago y finalmente se dispersó desde su dantian.

        El dolor se fue aliviando gradualmente, y la conciencia de Bai Qingyan emergió del abismo.

        En su sueño, Bai Qingyan abrió los ojos nuevamente.

        Lentamente empezó a recordar que ayer acababa de cumplir quince años, pero en la ceremonia de celebración, su padre el emperador no había aparecido. Hasta que la celebración estaba a punto de terminar, el mensajero de su padre llegó tarde, para llevarlo al “Pabellón de la Primavera” para “celebrar su cumpleaños”.

        Bai Qingyan sabía que su padre frecuentaba ese lugar de libertinaje, y también sabía que esto probablemente era una idea absurda de su padre estando ebrio. Pero por un momento, casi quiso ir. Si fuera, ya no sería un “extraño que se cree superior” entre la familia real de Yuyao, y quizás, podría obtener un poco de amor de su padre imperial.

        En lugar de que su propio padre lo mirara con frialdad, como ahora. Pero...

        Después de ser rechazado, el mensajero resopló fríamente y se fue. Bai Qingyan sabía que probablemente el disgusto de su padre hacia él aumentaría aún más. Sintiéndose deprimido, fue solo a la montaña trasera a medianoche, con la intención de pasar la larga noche practicando. Pero no esperaba que, en su estado emocional agitado, su energía interna fluyera en reversa, ¡estaba a punto de sufrir una desviación de qi!

        ¡A medianoche, en un momento de impulso, ni siquiera tenía a nadie que lo protegiera! Bai Qingyan se alarmó, y luego el dolor de sus meridianos fluyendo en reversa lo hizo perder el conocimiento.

🅟🅓🅤🅒🅒 〖Vol.Ⅰ〗(Completo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora