Un Amor Joven.

Capítulo 31

POV ALEX

—Ya te dije Diana, no iré al centro comercial.— vuelvo a recalcarle a mi hermana y entré a mi habitación. Ella viene detrás de mi y ruedo los ojos.

—Dame una razón válida por la que no quieres ir.— insiste.

—No quiero ir. Esa es mi razón.— le respondo. —Además, ¿que haré allí? Tu estarás con tus amigas y Noah estará en una cita.— me acuesto en la cama.

—Alex, hoy es el aniversario de mamá y papá, debes de darles un poco de espacio.— comienza a menear las cejas.

—En primer lugar, asco no quiero ni imaginarlo. En segundo lugar, si es por eso puedo irme a casa de Lorena.

—Vas a cada rato a su casa, nada más está semana fuiste tres veces. ¿No crees que su madre esté cansada de verte a diario?— ataca Diana y se sienta en la esquina de la cama. En parte tiene razón pero sé que quiere manipularme.

Sabes muy bien que ya tienes cansado a la madre de Lorena, incluso cuando fuiste la tercera vez rodó los ojos cuando te vio.

Pues lo acepto, tengo cansado a la madre de Lorena.

—Pues iré a donde uno de los chicos.— propongo.

—Alex ya te dije que no, vienes o vienes.— me amenaza. —Si quieres le dices a Lorena que vaya, tendrían una cita.— bingo. Ella sonríe porque sabe que al fin y al cabo su plan resultó. Ella se levanta de la cama para irse a su habitación victoriosa.

—Me convenciste.— ella sonríe aún más.—¿A que hora le digo?— tomo mi celular para llamar a Lorena. Ella se gira para responderme.

—Dile que a las tres y media, ahora son casi las dos de la tarde.— dice y se va por ahí mismo se va.

—Ok.— y llamo a Lorena.

POV LORE

Con la voz de Ana Gabriel de fondo, termino de limpiar la cocina. Suspiro pensando en lo rico que se sentirá una linda siesta. Tomo mi celular apagando la música y sale una llamada entrante de Alex. La tomo mientras comienzo a subir las escaleras.

—¿Aló?— hablo.

—¿Tienes algo que hacer dentro de una hora?—pregunta. Seguro que quiere venir a casa y yo por ahora lo único que pienso es en dormir.

—Ahora no puedes venir porque terminé de limpiar y ahora quiero acostarme.— digo entrando al baño de mi habitación. Dejó el celular en altavoz mientras me quito la ropa.

—¿En qué momento te dije que era para ir a tu casa?— suelta con enfado.

—Es lo que siempre me dices antes de venir.— comienzo a cepillarme los dientes.

—Bueno, pero esta vez no.— espera que diga algo pero como me estoy cepillando los dientes prosigue.—¿Quieres ir al centro comercial conmigo y mis hermanos?—siento su voz nerviosa y apuesto lo poco que tengo que seguro está pasándose la mano por el pelo.— Claramente no estarán con nosotros todo el tiempo, ellos irán cada uno por su camino.— termino de cepillarme los dientes. Tengo una sonrisa plasmada en el rostro.

—¿Sería una cita?— preguntó tímidamente tratando de controlar mi emoción.

¿Siete meses y nunca habían salido a una cita?
Triste pero cierto.

—Emm... pues creo que si.

—Me apunto. ¿A qué hora es?

—Dentro de una hora.