Un Amor Joven.

Epílogo

POV LORE

—Son las once de la mañana—digo medio dormida—Déjame dormir un poco más.

—Lorena, te quiero invitar a comer—dice y se me va un poco el sueño al escuchar comer.

—¿El qué?

—Es un sorpresa—amo las sorpresas—Así que levántate y ponte linda—me siento de repente en la cama y lo observo enojada.

—¿Me estás diciendo que no te gusto al natural?¿Acaba de levantar y sin maquillar?

—Tienes un lado de la boca blanco por toda la baba que botas—abro mi boca sorprendida—A mi me gustas hasta toda sudada y sin bañar—hago una mueca.

—Bueno pues dame un beso—Lo que más odia Alex es besarse sin cepillarse los dientes antes. Pero, para mi sorpresa se acercó y me comió la boca.

—¿Conforme?—asiento rápidamente y lo observo detenidamente.

—¿Saliste?—asiente.

—Fui al mercado a comprar algunas cosas. Te deje una nota y el desayuno.

—Ah. Bueno déjame ir a bañarme y a ponerme linda—me levanto de la cama directo al baño.

Decido colocarme un top amarillo con estampado de flores junto a unos mom jeans y unas zapatillas. Me coloco perfume, algunas cadenas, brazaletes y aretes, me hago un maquillaje sencillo, mi pelo está ondulado así que solo me lo cepillo arriba, tomo un mini bolso y salgo de la habitación.

Alex está vestido con una camisa roja de cuadros de mangas cortas, un pantalón negro de vestir y unos tenis negros. Está hermoso.

—¿Y ese quién es?—pregunto y él levanta su mirada.

—Alexander—responde y se acerca—¿Tú?

—Lorena.

—Bonita tú.

—Gracias pero no puedo decir lo mismo—hace un puchero—Mentira—le doy un beso corto—¿Para donde es que vamos?

—¿No me habías dicho que te gustaban las sorpresas?—dice.

—Te amo—digo emocionada y abro la puerta del departamento.

—Lo sé—dice saliendo detrás de mi. Hunter aparece en mi campo de visión y lo saludamos—¿Nos podrías tomar una foto?—primera vez que Alex cruza otra palabra que no sea Hola con Hunter.

—Claro—Él toma el celular de Alex y posamos para la foto—Les tomé como diez fotos—Alex agradece y entramos al carro. Tomo su celular y veo las fotos.

En una me estoy arreglando y Alex me mira como si fuera algo precioso. Sonrío enternecida.

—¿A donde vamos?—pregunto cuando Alex empieza a conducir.

—Deja que te sorprenda—dice y coloca su mano en mi muslo.

Me gustan las sorpresas, así que cierro el pico y recuesto mi cabeza del cristal. Veo las personas pasar, analizo que cada uno tiene una vida propia y son personajes extras en mi vida.

De repente en la radio suena Stand By Me de Ben E. King.

Es una canción súper hermosa, amo cantarla al igual que Alex.

—When the night has come—comienzo a cantar.

—And the land is dark—Alex se une y formamos un dúo.

—And the moon is the only light we'll see

—No, I won't be afraid, oh, I won't be afraid