Me senté en el asiento de copiloto, y recoste mi cabeza en la ventana. Con mi papá los caminos a la escuela eran super callados, nos dedicabamos a escuchar las noticias por la radio. Mientras con mamá era el camino completo nos la pasabamos riéndonos y hablando de cosas al azar.Mis padres eran esa típica pareja cliché, es decir, mi papá era todo un mujeriego, y mi mamá era una chica tímida. Se conocieron en una empresa de bebidas alcohólicas donde papá era electricista y mamá era contadora. De casualidad de la vida, papá le ofreció a mamá llevarla a su casa, y mamá de una manera confío en él. Eso sí, mamá se hacia la difícil y según ella eso hace que los hombres se interesen más. Luego de 6 años de noviazgo, se casaron y hasta el sol de hoy siguen juntos. Adrián Thompson y Margaret Haynes.
Ya estábamos llegando al colegio, me dediqué a mirarme en el espejito, arregle un poco mi pelo que caía por mis hombros y me puse un poco de brillalabios, para no destacar mucho. Llegamos y nos despedimos de papá. Con nerviosismo entre al colegio. Ya llevaba 3 años estudiando aquí y se siente como si fuera la primera vez.
Mis hermanos desde que entraron se perdieron, así que me dediqué a buscar un banquito para sentarme. Al ser tan temprano, no habían abierto las aulas así que tuve que esperar sentada cerca de la entrada, hasta cuando le diese su regalada gana abrir las aulas.
Me fijé en algunos alumnos del año pasado y algunos nuevos, note lo nerviosos que estaban.
Para matar el tiempo saque mi celular y comencé a leer Damián, un libro que comencé hace poco ya que todos hablaban de el, la verdad es muy interesante. Quiero conocer a alguien que haya nacido el 9/9 para decirle que si me puedo unir a su manada. Sería épico.
Me pasé unos veinte minutos leyendo y podía seguir, pero fui interrumpida por mi amiga Eli, era una chica tímida pero a la vez muy sociable y espontánea, la quería un montón. Nos habíamos visto un par de veces en vacaciones pero ella me saludo como si teníamos años sin vernos.
—HOLAAAAA—grito ella de emoción y me dio un abrazo.
—Demonios mujer, son las 7 de la mañana, modera tu voz—dije para molestarla—¿Tienes algo de comer?, tengo mucha hambre-solté.
—Noup—dice haciendo énfasis en la p- Tú siempre tienes hambre-.
—Ay ya, no me des un sermón—dije dramáticamente— ¿Ya abrieron?—pregunté mientras guardaba el celular en la mochila.
—Sip, ya van a abrir. Parate y vamos—dijo. Me levanté del banquito y me encamine al edificio donde se encontraban las aulas de secundaria. Les explico, esta escuela es como todo en uno. Ven que en gringolandia tienen Elementary School, Midterm School y High School, pues acá en el colegio Domenica, estaban todos los grados y se dividían por edificios.
Subimos las escaleras hasta la último nivel, y buscamos donde se supone que esta nuestra aula.
—Aquí esta—dije. Entramos con cansancio por subir tantas escaleras y nos ubicamos en nuestros lugares. Eli y yo siempre nos sentamos al lado, es decir nuestras filas estan al lado, ella siempre se sienta delante de Lia y yo detrás de Mary. Además los abanicos estaban justo encima de nosotras.
—Aquí volvemos de nuevo, Lore—dice.
—Vamos a los pasillos, a esperar que lleguen más personas—digo. Ella asiente y salimos del aula. Mientras estábamos en los pasillos veiamos a los nuevos, que estaban con ese aire de nervios.
—Oye Eli, Javier y tú no vienen juntos, ¿Dónde está?—Javier era un chico que vivía en el mismo lugar donde ella vivía. Javier entró en el mismo año que yo, y era lo más bello que había en esta escuela, para mi nunca lo fue pero mi salón entero estaba por el. Hasta que se cansaron y ahora lo ven normal.
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Un Amor Joven.
Teen FictionMe imagino que muchos amantes de las historias donde el amor próspera, alguna vez se han quedado pensando si esto les pasaría alguna vez o se preguntan ¿En qué momento va a llegar ese tóxico que tendré comiendo desde la palma de mi mano?. Lorena no...