Cayendo Por Ti [Completa✓]

Capítulo 25| Helado De Menta.

Capítulo dedicado a: @Yadeli1407, tú teoría fue la que más se acercó a lo que pasará en la fiesta universitaria. Que lo disfrutes ❤️.

Ya saben: ven la llamita (🔥) y saben lo que viene 😏.

.....

Leah:

— No puedo creer que en serio estemos haciendo compras —Matt se queja, mientras arrastra el carrito de compras a mi lado.

Tomo un paquete de panecillos de canela y lo coloco dentro del carrito.

Luego de ir a comer un helado con los chicos —salida que resultó divertida y que me acercó bastante a Natalie— fui a casa, me relajé un poco con un baño caliente y luego de una hora llamé a Matt para hacer las compras para nuestra noche de maratón.

Mi acompañante va a mi lado con un pasamontañas negro, una camisa blanca con la palabra FUCK en blanco y sobre esto una chaqueta de cuero negro, sus pantalones son de mezclilla común y tiene botas de combate. Diré que es la primera vez que lo veo vestir así, se ve sexy intentando meterse en el papel de chico malo.

— Admítelo, es divertido —me caigo de hombros, caminando hacia la sección de los frigoríficos.

— No, no es divertido que casi toda la maldita tienda te vea raro —miro como observa con fastidio a las personas, quisiera golpearlo por su indiscreción.

— Sé discreto.

— Ellos no son discretos cuando me ven de esa forma —señala él, deteniéndose frente a una de las neveras.

— Es qué eres muy sexy, Matthew Gadaff, todos tienen que deleitar su vista contigo —también me detengo y lo miro de arriba abajo con picardía.

Sonríe como todo un arrogante.

— Uh, eso sonó bien.

No puedo evitar curvar mis labios en una sonrisa.

— Sexy, guapo, una jodida belleza...

Se lame los dientes de manera depredadora, toma un helado de vainilla y uno de menta del refrigerador que está frente a él.

— ¿Buscas algo en específico halagándome de esa forma? —se acerca a mí de una manera alarmante pero no me separo.

Presiono mis labios con suavidad.

— Nada en específico.

— Mhm...pensé que querías algo de mí.

Bien podría decirle que lo deseo a él por completo, pero decido mantenerme callada.

— ¿Cuál llevaremos? —miro en dirección a ambos recipientes de helado.

Su sonrisa pervertida hace que mis piernas se tensen, luego, cuando da pasos peligrosos hacia mí, no soy capaz de moverme, para ser completamente sincera ni siquiera quiero hacerlo, me gusta tenerlo cerca, creo que me estoy haciendo adicta a su cercanía.

Se agacha a mi altura con lo que parecen ganas de decirme algo.

— Llevemos ambos, tengo la intención de averiguar cuál combina más con el delicioso sabor de tu piel —me mira de arriba abajo con ese semblante coqueto, creo que puedo derretirme aquí mismo...

No oculto la sonrisa llena de coquetería que amolda mis labios, no voy a mentir, quiero sentirlo de esa forma de nuevo.

— Vamos, Matt. Las chicas deben estar esperándonos —me guiña antes de guardar ambos recipientes de helado en el carrito y seguir nuestro camino.